SEGUNDA TEMPORADA DE: My name is... Chris.
Christopher Bang sabía con exactitud que el amor de su vida era su ex pareja.
aunque, 6 años han pasado desde que vio a Seungmin por última vez y aún no asemeja que perdió todo por su inmadurez.
No creyó ve...
Christopher amaba la familia que estaba formando con el amor de su vida y su omega.
Seungmin, su omega de cabello castaño y rostro tan angelical que el mismo cielo tuviera envidia de tal chico. Sun, su hija pequeña y amorosa, quien le había tomado un cariño inmenso a Seungmin, como si fuera su segunda madre. Y ahora tenían un nuevo integrante, un bebé que crecía en el vientre del omega de forma sana debido a los buenos cuidados que Seungmin se daba para evitar complicaciones.
Si, tal vez Sun "no deberia" de estar ahí, porque la mayorías de las veces el alfa es el malo por crear una familia con otro omega. Pero, debemos de ser sincero ¿Que mal hizo chris? Él no era un santo sabía que le había hecho daño a alguien aunque fuera de forma no intencional, aun así él no merecía ser exiliado por su familia.
Un chris joven seguramente se acobardaría al afrontar a su familia, pero ya estaba en sus 30, queria ser feliz con el amor de su vida y su familia ya no era un impedimento. Porque siempre tenía un plan de respaldo y era su carrera como productor anónimo.
Al estar frente, en casa de su madre, en la misma casa donde nació y se crío. Se permitió admirar el lugar antes de tocar la puerta.
De ella salió su hermano pequeño, de ahora unos 15 años, delgado y con sus ojos perdidos. Hannah fue expulsada de la herencia, ella no tiene parentesco más que una empleada, chris simplemente no le importaba. Pero, Sunoo se llevó la peor parte de su familia por ser omega. Era denigrado y maltratados por todos y se notaba que no estaba nada bien ahi.
—Hermanito —Lo escuchó susurrar, no dudó en abrazarlo, no le importaba el aroma a humedad que tuviera su cuerpo, dejo que el calor de su cuerpo le diera algo de seguridad, que su lobo herido pudiera calmarse—Madre luna, mirate como te tienen esta bola de cavernícolas —masculló acariciando el rubio cabello de su hermano.
Después de unos segundos se alejaron y entraron al hogar.
Sus dos hermanos ya mayores seguían ahí (como si eso le pudiera sorprender) había un bebé en brazos de su hermana y su esposo y su sobrino de 6 años corrió a abrazar sus piernas, siendo recibido con la misma calidez de parte de su tío.
—¿Dónde está Sun? ¿Donde esta Nayeon? —Su madre no lo saludo, en vez de eso le pregunto de una vez, admirando como la sonrisa de su hijo se tuerce en una mueca.
—Mi hija esta con mi omega y Nayeon revocándose con su alfa, ¿yo porque debería de saberlo? —Soltó mirando a su madre a punto de acercarse, seguramente para palmear su mejilla como se le era costumbre. Pero, él le sonrió, algo que la hizo detenerse.
—¿Que haces aqui, chris? —preguntó su hermano después de un incomodo silencio.
—Solo vine a ver a Sunoo y a decir que me divorciare de Nayeon —Sí casa estaba en silencio, en ese mismo momento eso se convirtió en una algarabía que no sabían que podría ocurrir.
Su madre le gritaba y su padre le reclamaba mientras sus hermanos solo expresaba su decepción aunque ellos no hicieran mas en su vida más que casarse y quejarse de su vida.
Como si no fuera algo que no esperaba.
—Por favor ¿por que están tan agitados por mi divorcio? ahora si me pueden exiliar y mandarme lejos y yo seré feliz —exclamó con una sonrisa socarrona en su rostro, sacando de su casilla a su madre que odiaba el comportamiento rebelde de su hijo más obediente.
Lo único que chris no espero fue ver a su padre agitar sus hombros con fuerza, sacudiendo su cuerpo de forma histérica.
—Este no es nuestro chris ¿Que carajo te pasa, Christopher bang? —soltó su padre mirando como el rostro de Chris se reflejaba la inconformidad.
—basta...Basta... ¡Que ya, maldita sea! —Empujó a su padre cuando sintió que era suficiente para su cuerpo—¡Lo que yo haga con mi vida no es de la incumbencia de nadie! —gritó, lo suficientemente alto como para detener las quejas de todos.
—No me quedaré con Nayeon toda la jodida vida y no vengo a pedir permiso, solo lo notificó para que me saquen de la herencia junto a Nayeon —explicó con un tono de voz de neutra, casi sin expresión aunque en su familia se veían horrorizados.
—Si...Si eso pasa ¡Le daremos tu herencia a nayeon! —atacó su madre mientras colocaba una mano en su pecho donde los latidos de su corazón palpitar.
—Daselos y que se los dé a su hijo con su mujer, no me importa —Se encogió de hombros.
—Me llevaré a sunoo, porque aparte de cubrir a una mujer que se acuesta con una mujer alfa se convierten en unos verdaderos cavernícolas con un menor que no tiene la culpa de lo que es. —Con cuidado de no lastimar a su hermano, lo jalo, sin que llevara ropa o algo parecido.
La zona de fuego iba contra su madre, la mujer más culta intentando buscar una afirmación. Pero, Chris no le importaba, porque la seguridad de la persona que arriesgo su felicidad estaba con él.
—¿A donde iremos, Chris? —Se escuchó la suave voz de su hermano mientras se subía al auto de su hermano mayor—Iremos con una persona que te pueda dar hospedaje.
Condujo por casi una hora hasta el distrito dong, en una hermosa residencia donde él tenía paso.
Cuando bajaron, Sun no dudó en recibir a su padre, lanzándose a sus brazos en el momento que abrió la puerta del piloto.
—Papi, bebé y yo te extrañabamos mucho ¿por que tardaste?
Sunoo admiró el lugar con curiosidad y de ella miró al omega que no dudo en identificar en el mínimo segundo donde se acercó. Piernas largas y delgadas, cintura pequeña abdomen plano y pechos perfectos a su contextura de espalda y hombros, con una mordida curada y realmente linda en su cuello.
Sería un modelo a seguir, porque era realmente hermoso y con un brillo que lo hizo suspirar, la felicidad llenaba cada poro de su cuerpo.
—Omega —Si, eso le sorprendió al escuchar a su hermano llamar de esa forma al chico, acercándose para dejar un casto beso en sus labios—Perdona la tardanza... Se que te he pedido mucho, pero necesito un ultimo favor —La mirada de chris fue a su hermano que seguía parado, casi estático y ocultado en la parte del copiloto.
—Él es mi hermano y lo malograron solo por ser omega...Permiteme tenerlo aqui al menos hasta pueda entrar en la universidad, le falta muy poco —Y si, tal vez se aprovechaba del simple hecho de que Seungmin no sabía decir que No cuando de un favor se tratara.
—Bien —lo escuchó asentir—Si tu familia lo malogro debe de ser difícil para él y no te puedo negar nada —El mayor sonrió.
Su hermano estaba a salvo junto a su hija. Solo faltaba un último paso.
Y aunque no lo crean falta poco para que termine (al fin) JAJAJAJJA creo que es momento de entrar a capítulos finales.
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