Capítulo 1
Narra Blaine
Me extrañó encontrar la puerta sin llave. Entré y escuché una voz conocida, aunque no era la de Sam. Entonces levanté la cabeza y lo vi allí, en medio de la sala.
―¿Cooper?
Mantuvo su mirada sobre mí unos segundos y entonces su rostro se iluminó con una gran sonrisa al reconocerme.
―¿Squirt?
***
Sábado
22.00hs
―¡Oye! ―exclamó mi hermano mayor cuando me vio ingresar en la sala―. Realmente estabas agotado. Has dormido toda la tarde...
Miré el reloj de la pared y efectivamente mi siesta había durado más de cinco horas. Froté mis ojos, bostecé y me acomodé en el sofá. Cooper desapareció por la puerta de la cocina unos minutos y regresó con dos tazas de café. Se sentó a mi lado y me ofreció una de ellas sonriendo.
―¿Vas a contarme qué sucede contigo? Cuando Sam me dejó entrar me explicó que no tardarías en llegar, pero jamás imaginé que debería prepararme para recibirte deshecho.
Sorbí algunos tragos del líquido oscuro de la taza e intenté contenerme, pero las lágrimas ya estaban buscando por dónde salir y no pude retenerlas más.
―¿Por qué te has ido, Cooper?
Sus orbes celestes parecieron reflejar de pronto arrepentimiento y una gran tristeza. Algo se había quebrado en él. Desde el momento en que nos reencontramos Cooper había intentado ser el fuerte, cargar con la situación y con el desastre en el que me había convertido luego de abandonar el apartamento de Kurt, pero teníamos mucho de qué hablar, muchas razones por las que pedir perdón y otras tantas por las que perdonar. Tampoco pudo evitarlo, una gota salada rodó por su mejilla.
―Lo siento tanto, Blaine ―se lamentó, acercándose a mí y abrazándome mientras yo me acurrucaba contra su pecho.
No sabíamos por dónde empezar, las palabras simplemente no parecían querer salir de nuestras bocas. Así nos mantuvimos algunos minutos, aferrados al cuerpo del otro como si nos costara creer que en realidad eso estaba sucediendo, que en realidad volvíamos a estar juntos.
―Intenté ayudarla, Coop. Debí haber estado con a su lado ese día. Sufrió mucho durante esos meses. El cáncer no sólo estaba consumiendo a papá, también la estaba consumiendo a ella. Luego de su muerte y cuando tú te fuiste, mamá ya no era la persona que nosotros conocíamos. Me convertí en su sombra, yo... ―Se me escapó un sollozo y Cooper me atrajo hacia él con más fuerza―. Yo pasaba cada minuto que podía a su lado, pero no fue suficiente. ¡No fue suficiente, maldita sea! ―grité, pero mi hermano no me detuvo. Ambos necesitábamos que eso sucediera―. No debí haber ido a la casa de Sam ese día. Ella... Ella había comenzado a beber. Al principio sólo era por la noche, cuando yo me iba a dormir. Luego ya no pudo controlarlo y lo hacía todo el tiempo, a toda hora. Vivía ebria y yo no encontraba la forma de ayudarla. Mamá no quería que la ayudase. Estaba destruida. Ese día tenía que hacer un trabajo para la escuela y la dejé sola. Salió a la tienda, a comprar más alcohol. No alcanzó a apretar los frenos. Estaba oscuro, el automóvil que impactó con el nuestro no la vio acercarse...
Nuevamente silencio. Era casi como un consuelo para ambos, nos refugiábamos en él para juntar fuerzas que nos permitiesen continuar.
―Mamá te necesitaba... ―Suspiré―. Y yo también lo hacía.
―Nada de lo que sucedió es tu culpa, Blaine. Necesito que lo entiendas ―pidió de manera dulce mientras pasaba su mano por mi cabello en forma de caricia―. Yo... No tuve el valor que tú tuviste. No fui lo suficientemente fuerte. No quise hacerme cargo de la situación y los abandoné a todos. Me sentí tan presionado por la muerte de papá que preferí alejarme. Me sentía atrapado y hui.
―¿Por qué regresaste ahora?
―Siempre me hiciste falta, Blaine. Sé que no puedo reparar el daño hecho en el pasado, pero ya no quiero seguir provocando sufrimiento en el futuro. No quiero perderte, eres mi hermano. Yo... Viví todos estos años en Londres y conocí a alguien. Su nombre es Claire. Estamos esperando un bebé. Cuando recibí la noticia sólo pude pensar en ti y en lo mucho que me dolería que no fueses parte de esto.
Sequé la humedad de mi rostro y me erguí un poco de forma de poder ver a Cooper a los ojos.
―¿Voy a ser tío? ―pregunté con una media sonrisa cargada de emociones.
―El mejor de todos ―respondió Cooper tan emocionado como yo lo estaba.
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Eternal Flame
Fanfiction―¿Sabes? Yo nos imaginé muchas veces juntos. ¿Tú...? ¿Lo has pensado? Porque yo creo que un nosotros hubiese sido perfecto. Ahora entiendo que a veces las cosas perfectas son efímeras, Kurt, y yo no puedo vivir de una ilusión. ¿Podrá ser este incend...