Estoy sentada en el pupitre más alejada, en un rincón cerca de la ventana, todos pasan si notarme, no es tan malo, me acostumbre, hasta me gusta, pero, acaba de llegar un chico, tiene el cabello castaño, es alto, tiene bonitos ojos y una sonrisa muy muy encantadora, no deja de mirarme, parece tímido, pero con esos chicos raros con los que esta de ve muy a gusto.
Sus ojos no dejan de posarse en mi, me sonríe, bajo la mirada.
se esta acercando.
-Hola, soy Ethan- extiende la mano en forma de saludo- oh bueno- baja la mano al notar que no tengo intenciones de estrecharla.
-Hola Ethan- digo en tono aburrido.
-Que raro.
-¿Que es raro?
-Comunmente cuando alguien se presenta, la otra persona hace lo mismo- dice en tono de burla.
-Ah.-miro hacia otro lado.
-No me equivoque al pensar que eres diferente.
-¿Eso es un cumplido o una ofensa?- digo en tono enojado.
Claramente es un cumplido o al menos para mi lo es.
-Tomalo de la mejor forma ¿gustas acompañarnos a la hora del almuerzo?- lo dice con una voz tan...irresistiblemente atractiva, este chico no es tímido, solo es interesante.
-¿Por que?
-Eres difícil...ven si quieres.-se da la vuelta y regresa con su grupo.
Iré, claro que lo haré, tal vez sea mi nuevo inicio.
Las clases son aburridas, estudie y ya sabia todo eso, pero no importa, aún así pongo atención.