4. Las escrituras que produce la inquietud

10 1 1
                                    

Necesito escribir. Escribir sin parar. Escribir sin pensar. Escribir lo primero que se venga a la mente. Mirar el cielo oscuro y suspirar, mirar las letras y teclear, pensar en lo que escribo y molestarme, molestarme porque no me gusta lo que escribo, pero qué más da, si no me gusta lo que dibujo, no me gusta lo que canto, no me gusta lo que soy.

Por ahora.

Son momentos, momentos que siempre vuelven, como un ciclo. No sabes lo mucho que me gustaría terminar este ciclo, pero nadie sabe cómo terminarlo, preguntémosle a la persona más feliz del mundo si es que alguna vez se sintió triste, pero preguntémosle también a la persona más triste del mundo si alguna vez se sintió feliz. No hay uno sin lo otro, siempre existe ese equilibrio, ya que así está hecho este universo, o tal vez no, quién sabe, somos solamente humanos.

La evolución es algo muy interesante, nos llevó hasta el punto de poder pensar antes de actuar, la gente no se da cuenta de lo impresionante que es eso, pero menos gente se da cuenta lo que eso significa. Constantemente progresando, constantemente evolucionando, sin parar, como un reloj, ¿Se acabarán las pilas algún día? Es probable, tiene sentido, pero tiene sentido dentro de lo limitado que es nuestra comprensión, quizás vivimos dentro de un reloj eterno, quizás estamos condenados a evolucionar sin parar.

Detente a pensar en eso un momento.

Evolucionar sin parar.

Sin límites, progresando y progresando.

Y progresando.

Nosotros, los humanos, somos bastante simples, eso es mucho decir claro ya que basta sólo con mirar alrededor de uno para darse cuenta de que no es tan cierto, pero al mismo tiempo se puede ver con mucha más facilidad de que sí, somos simples, simples y pequeños. La tecnología es la base de nuestro avance, la política lo es también, ambos tienen la misma cantidad de beneficios como defectos, y quizás eso sea eterno, ya que como dije, los humanos somos bastante simples.

Gente peleándose por cosas banales, gente muriendo por egoísmos idiotas.

La vida es un complejo viaje a través de todas estas curvas, de todos estos contrastes. Los contrastes personales son los más notorios para uno, haz una pieza de arte y verás todo lo malo de éste, mírate al espejo un segundo y no tardarás en encontrar un error.

Un simple error.

Un detalle.

¿Por qué tan obsesionados con los detalles?

¿Por qué estoy tan obsesionado con el error?

Los humanos no somos perfectos, aceptar ese hecho también implica aceptarse a uno mismo, y eso es fácil, hasta el punto que no lo es, hasta el punto en que a uno no le importa ni la humanidad ni uno mismo.

Hemos evolucionado hasta el punto de odiarnos.

Si no te sientes identificado, te felicito, pero ¿qué piensas de los demás? ¿Qué piensas de aquel tipo que roba? ¿De aquel tipo que asesina?

No lo sé, quizás esté divagando mucho, pero quizás eso también sea natural.

Odio esa palabra, natural. Natural es comer, beber agua y dormir, los humanos ya no tenemos mucho de natural, quizás lo natural ya sea algo primitivo, pero lo primitivo es bello, es inocente, es simple, no tiene estos estúpidos lapsos depresivos que te hacen cuestionarte hasta el porqué de las ideas.

-

A ti, lector, si llegaste a este punto, gracias por leer mi desquite.

A ti, lector, como llegaste a este punto, siento mucho haberte usado como desquite.

Ahora relajémonos, escuchemos un poco de música, y disfrutemos el no hacer nada.

Ya que no siempre se puede disfrutar el no hacer nada.

Optimismo en todo.

Adiós.

Un café y unos cuentosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora