Cada Verano Contigo

¿Nueva novia?

Una vez que entré a la casa subí las escaleras corriendo detrás de Becky. Yo siempre dormía en su habitación.

Abrí la puerta y en el piso, junto a la cama de Becky, había dos colchones.

-¿Por qué hay dos colchones?-Pregunté confundida.

-¿No te dijeron? Chrissy pasará el verano con nosotros. Sabes quién es ella, ¿verdad?

-No tengo ni idea.

-La nueva novia de Tanner. Mamá quiso conocerla mejor y la invitó a quedarse con nosotros aquí. Es una buena chica, además...

Becky siguió hablando, pero no la escuché más. Sus palabras resonaban en mi cabeza. "La nueva novia de Tanner". Eso no podía estar pasando. ¿Tanner? ¿Mi Tanner? Imposible. Incluso creí haber escuchado el sonido de mi corazón rompiéndose.

Becky chasqueó sus dedos frente a mí y me hizo volver a la realidad.

-¿Pasa algo?-Me preguntó.

-No, no.-Traté de sonar normal y falsificar una sonrisa. Pero ella notó que algo estaba mal. De todos modos, no le dio importancia.

-Está bien...-Dijo mirándome como si estuviera loca.-Déjame contarte acerca de John.-Cuando terminó de pronunciar el nombre de su novio una enorme sonrisa se dibujó en su rostro. Se tendió en su cama mirando al techo mientras me hablaba de lo lindo que él era. Yo hice lo mismo en mi colchón. No le presté atención a lo que estaba diciendo.

De repente, la puerta se abrió y Tanner calló al piso.

-¿Qué rayos haces aquí?-Preguntó Becky furiosa.

-Nada...-Respondió Tanner. Estaba nervioso. Cuando su hermana se enojaba, era imparable.

-¿A caso estabas escuchando a escondidas?-Becky había comenzado a gritar. Tanner siempre había sido curioso. Becky le lanzó un almohadón.-¡Sal de mi habitación, ahora!-Gritó tan fuerte que Tanner pareció asustarse y salió de la habitación tropezando con cada paso que daba.

Miré a Becky sorprendida. Ella era como un ángel, pero si alguien la molestaba, en custion de segundos podía convertirse en el mismísimo Diablo.

-Sigo sin entender por qué no quieres que nadie sepa de tu novio.

-Ya te lo dije, Din. Es... Complicado.-Dijo enterrando su cabeza en su almohada.

-Y yo te dije que no me llames "Din". Odio ese apodo.

Becky bufó y despegó su cabeza de la almohada.

-Pues a mí me gusta.

Seguimos hablando unos minutos hasta que Becky sugirió que vallamos a la piscina, ya que hacía mucho calor.
Nos pusimos nuestros trajes de baño y salimos al jardín.
Allí estaban los padres cocinando en la parrilla y las madres tomando sol en las reposeras. En la gran piscina se encontraba Tanner con mis dos hermanos encima. Rick colgaba de su cuello y Jake salpicaba agua en su cara.

-¿Me ayudan por aquí?-Preguntó Tanner con tono de súplica. Me costaba mirarlo a los ojos sin que me agarraran ganas de llorar. Becky lo fulminó con la mirada mientras yo me tiraba desde el trampolín a la piscina.-Oye, juro que no escuché nada.-Dijo un poco apenado. Becky rodó los ojos y de un chapuzón se sumergió en la piscina. Tomó a Rick en sus brazos y lo alejó de Tanner. Yo hice lo mismo con Jack.

-Gracias.-Dijo aliviado Tanner.

Los tres permanecimos en la piscina un largo rato hasta que nuestros dedos se arrugaron y el sol se escondió hablando de lo que había pasado durante el año. Pero Tanner no mencionó a su novia en ningún momento.