Opté por llamar Chris a mi dibujo, ya que tenía similitud conmigo, dio el toque de receso, no copié la tarea, un niño se acercó a mí y dijo que me pasaba los ejercicios, los copié y se los devolví.
Me senté bajo de un árbol, un lugar callado y tranquilo, cerca de la salida de emergencias. Seguí con mi dibujo, estaba inspirado, unos pies aparecieron y junto con ellos una horrible voz.
-¿es tu dibujo? Que hermoso, para tener 6 años eres muy bueno dibujando
La miré y con ganar de tirarle mi libreta le dije.
-Gracias
Ella se sentó a mi lado, quería salir corriendo de ese lugar.
-¿no te importa si me siento contigo?
Negué con la cabeza, ella sacó su desayuno, de la inspiración olvidé que tenía que comer; cerré la libreta y saqué mi desayuno
-¿de qué es tu emparedado? El mío es de salchicha, ¿quieres?
Ella hablaba mucho... pero sabía cómo llamar mi atención; le di una mordida y luego le invite del mío (jamón con lechuga), ella mordió y sonrió, esa sonrisa que me agrada, sacó unas galletas de bombón "arcoíris" y me convidó, la odiaba pero sabía cómo tratarme, acabamos de comer, saqué mi libreta y seguí dibujando, ella sacó un libro y se puso a leer, la miraba de reojo... no sé por qué. Dio el toque de entrada, se levantó y dijo.
-bueno, espero verte mañana Chris, me gusta estar contigo
Por alguna razón esas palabras me hicieron sentir algo diferente, bajé la mirada.
-sí... a mí también
Sonrió y se fue.
Recogí mis cosas y me dirigí al salón, unas voces susurraban cosas que no entendía... o que no quería escuchar. El resto de la clase fue normal, cansada y aburrida. Dio el toque de salida, agarre mis cosas y salí, busque a la niña de las coletas inconscientemente, caminaba y veía los rostros para ver si alguno era de ella. Al darme cuenta de lo que hacía mire al suelo y seguí caminando, me subí a mi auto, estaba papá; mamá se quedó en casa y papá salió temprano del trabajo.
Llegue a casa, subí a mi cuarto, empecé la tarea, era muy fácil. Mamá gritó que ya estaba la comida y bajé a comer. Todos estábamos en la mesa temprano. Papá pregunto cómo iba con mis amigos, cuántos había hecho, yo le dije que bien lo cuál era una mentira; mamá preguntó por la niña de las coletas, le contesté que se llamaba Nirvana y era... agradable. Terminamos de comer y mamá me pidió que ayudara a recoger la mesa; papá se fue a la oficina que tenemos en casa.
-¿Chris... te gustaría tener a alguien más en la familia? Con quien puedas jugar y confiar
No le respondí me quede pensando.
-¿sí? ¿Qué te gustaría que fuera niño o niña?
-¿un niño?
Ella me miró con sus dulces ojos.
-en serio, ¿y jugarías con él?
Asentí con la cabeza.
Termine de recoger y subí a mi cuarto, ¿niño? ¿Alguien en la familia? ¿Alguien con quien jugar? ¿Por qué me hacen estas preguntas?
Me senté en un rincón, saqué mi libreta y seguí perfeccionando mi dibujo, luego pensé en esa niña y quise dibujarla. Empecé con un boceto pero no salía como quería; mamá tocó la puerta, traía ropa limpia, mientras dejaba mi ropa en la cama dijo que recogiera mis juguetes de la sala. Tendí y guardé mi ropa, bajé por mis juguetes, vi la consola y me puse a jugar, cuando me di cuenta ya era tarde, apague la consola, tomé un vaso de leche y mis juguetes, subí al cuarto, me cambié, escuché a alguien entrar pero estaba muy cansado, sólo sentí sus labios en mi frente. Era un beso de mamá, buenas noches dijo, salió del cuarto.
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Chris
Terror«Todas las noches escucho voces, son varias y no les entiendo; al principio creí que era mi imaginación, pues, era un niño cuando las empecé a escuchar, primero eran leves, como susurros, pero, cada vez son más fuertes».
