Capítulo 12

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JAKE
Al fin, las clases se me hicieron eternas, tal vez porque en el recreo Mina estuvo todo el tiempo con ese menso, creo que lo escuche llamarla Mini mi ratoncita, que estúpidez ahora mi Mina se ha convertido en Minnie Mouse? Me cae que ya no entiendo nada pero bueno supongo que es otro de sus absurdos apódos de amor, aunque si yo fuera ella le diría ~Hola mi pequeño pantaloncillo tiroles~ al menos estarían a mano.
Si ella fuera mi chica respetaría su nombre, o la llamaría por su otro nombre, sí, ella se llama Devóra Romina Roberts. Sí, es un secreto que me ha contado por ser su mejor amigo, nadie lo sabe excepto los maestros pues les ha suplicado que la llamen Mina ya que Romina no le gusta y Devóra le recuerda a su madre. No entiendo pero Debby o Mina me gustan por igual.
-Ring, ring- suena mi celular despertandome de mis sueños de como llamaría a Mina si fuera mi chica.
Hablando de la chica más hermosa sobre la Tierra, me ha llegado un mensaje suyo para preguntarme en donde nos vemos.
-¡Demonios!- Había olvidado que la invite a pasar la tarde a mi casa, por lo tanto llamo a mi hermano para que recoja un poco y que ponga la mesa, claro esta que lo he tenido que sobornar pero ha accedido a hacerlo, se que es un abuso porque es menor pero sale una hora antes que yo así que supongo que él esta más descanzado.
Después de unos minutos llego al lugar en donde quedamos Mina y yo y ella ya esta ahí.
-Disculpa la demora, esque estaba al otro lado del campus, has estado esperando mucho- Le digo rogando para que no se arrepienta de venir conmigo.
-No, no te preocupes sólo unos cuantos minutos pero no pasa nada.
~Uff~ que alivio pienso, en eso nos ponemos en rumbo para ir por como ella dice nuestros transportes.
-Si quieres podemos ir a tu casa para que dejes tu bici y yo te llevo en la mía asi no te cansaras.
-Como quieras- Me dice con un tono que no pertenece a ella, es como si estuviera vacía por dentro
-¿Qué te pasa? Si no quieres venir conmigo lo entiendo- Le digo y agacho la cabeza porque me he dado cuenta que cuando hace eso o lo hace alguien más es porque esta triste y lo sé también porque la tiene agachada justo ahora.
-¡No!, no es eso, sólo que...- Me dice por fin mirandome a los ojos -Me he peliado con Nick porque él no quiere que vayas al baile.
-Oh... Ven aquí- Le digo con dulzura porque veo como se muerde el labio para intentar no romper en llanto enfrente de mí, aunque no tarda mucho en empezar a llorar cuando esta entre mis brazos.
-No Mina, no llores, nadie, ni siquiera tus padres merecen que llores por ellos, porque estas sufriendo y nadie es tan bueno para que sufras por perderlo.
- ¿Ni siquiera tú?- La miro y me comienzo a preocupar.
-¿Por qué dices eso?- Me aprieta más fuerte como para que nunca la suelte, ojala lo haga pronto porque esta tan indefensa, tan cerca de mí que no me podre contenerme más tiempo para besarla y acariciarla.
-No lloro por la pelea, sino porque me ha prohibido que te hable si quiero seguir con él, y tu sabes que es el hombre de mis sueños así que tendré que dejar de hablarte asi que creo que no debería ir a tu casa, lo pueden mal interpretar.
-¿Y quién es él para prohibirte cosas?, y más aun buenas que si te quieren y te valoran como yo- Le digo tiernamente y secandole sus lágrimas con el pulgar acariciandole la mejilla, luego le levanto la cabeza y le digo esto lo más indirecto posible, aunque no entiendo como ella siendo el mejor promedio de la generación no ha captado el mensaje -Ven a mi casa, si después de lo que te digo decides dejar de hablarme lo aceptaré, pero escuchame primero ¿Sí?
Ella asiente y le pregunto si quiere dejar su bicicleta en su casa que esta mucho más cerca que la mía y así no se cansara pero para mi sorpresa ella esta tan dólida que sus sentimientos cambian rápidamente.
- ¿Sabes qué? A la MIERDA la bicileta, dejemosla aquí, al fin y alcabo mañana hay clases y no le pasara nada, es sólo un objeto- Dice subiendose a la bicicleta pero no en el asiento de atrás, sino en el fierro que hay en medio del volante y el asiento quedando muy cerca de mí.
-Ay Mina, porque me haces esto- Me mira con una sonrisa traviesa y por primera vez siento que capta el mensaje.
Ese fue el mejor paseo del mundo ¿saben? Ella sentada entre mis piernas, recostada en mi pecho y yo sintiendo su respiración hacen que el trayecto se me acorte y ni siquiera me siento cansado.
Para cuando llegamos Mina había dejado de llorar y me dijo géntilmente:
-¡Qué hermoso edificio es muy rústico y más hermosa la vista- Me dice señalando el parque que hay cruzando la calle. Creo que es muy bueno de su parte darle un vistazo bueno al viejo edificio de ladrillo lleno de plantas y con vigas y molduras de madera que se cae a pedazos, creo que lo dice por lastima o por hacerme sentir bien.
-Aquí es- le digo señalando el número 211.
Maldición no encuentro mis llaves, seguramente las deje en mi cama. Comienzo a tocar pero nadie abre hasta que de repente mi hermanito sale y sólo dice:
-¡Wow! Pero que chica- Mina se rubiriza al ver que un niño de 12 años le dice eso- Pero Jake como has hecho para que fuera tu novia, seguro la sobornaste para que saliera con un chimpance como tu, al igual que lo haz hecho conmigo para preparar la mesa- lo dice con un tono odioso como vengandoze porque lo he puesto a trabajar.
Le doy un pisotón y miro a Mina, ella se ríe y me mira como diciendome ¿Qué rayos pasa aquí?
-No es mi novia, ni sobornandola saldría conmigo ella es mucho para mí- le digo al entrometido de mi hermano empujamdolo para que nos deje pasar y cuando me volteo para dejar pasar primero a Mina, me doy cuanta que esta pasmada por mis palabras, seguramente por su personalidad esta embonando las piezas del rompecabezas y no tarda en captar todas las indirectas que le he lanzado hoy.
-Adelante, primero las bellezas y luego los chimpances- Lo digo para romper el hielo y ella se ríe, siento que la desperte de sus pensamientos y que he hecho que no trate de investigar más porque si lo descubre antes de que se lo diga todo mi ligue se echará a perder, digo, se que no soy experto pero en eso me convertiré si es necesario.
-Gracias- Me contesta dulcemente y entra con cautela.

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