Definitivamente Tu

Aprendí a Quererte

La verdad no entiendo a Diego, me dice cosas que me hacen feliz y luego me ignora como si nada, que ocultara este chico. A pesar de lo ultimo que ocurrió fuera del edificio, los días siguientes salimos al cine y a cenar con nuestros amigos. En una de esas cenas John le pidió a Sofia que fuera su novia, Sebastian casi muere ahogado con la comida que tenia en la boca pero se relajo y le dio unos consejos a John, yo estaba tan feliz, fue un momento tan hermoso y único para Soff. 

***

Diego: 

Tienes 15 minutos para arreglarte. no lo pregunto. te espero en el parqueo. 

una sonrisa aparece en mi cara, al leer esto, no es la primera vez que lo hace. si el piensa que soy una gruñona, creo que él me ha superado por mucho. 

En el parqueo, puedo verlo delante de una moto ¿El no esperara que me suba ahí? lleva unos jeans, t-shirt blanco y convers. Yo llevo unas sandalias y un vestido un poco descubierto -Que Soff me ha obligado a ponerme, dice que me veo bien- me siento bien. Camino hacia él y puedo ver su sonrisa, esta hermoso, sus ojos brillan al compás de la luna llena que nos acompaña esta noche. 

-Quita esa  cara muñequita, no iremos en la moto. 

Como puede adivinar cada pensamiento. 

-Pensé que te gustaban los riesgos. -Lo miro directo a los ojos y apenas le sonrio 

-No, aun te falta para tomar riesgos. 

Abre la puerta del Ford, amo los autos, es un pasatiempo que me paso mi abuelo y mi tio, siempre que los visitaba en el verano hablaban de autos y béisbol todo el tiempo. 

-Ford Focus, 2.0 litros, rápido y cómodo, puedo deducir que es del 2007 y con motor americano de la ultima versión... 

Puedo ver como pone una cara de incredulidad y esta mas que sorprendido, Toma esa Dieguito, veras que conmigo no se juega. 

-Demasiado inteligente para mi gusto. 

Se que miente pero igual me hace sentir extraña. le doy un puñetazo en el hombro, no respondo y mi limito a mirar por la ventanilla 

-Paula, hagamos un trato, ¿Vale? no mas comentarios ofensivos, ni maltrato físico. 

Se frota el hombro, dejo escapar un risita y el me sonríe. 

-Vale 

Diego conduce durante media hora y pasamos el camino escuchando música y platicando sobre su estudio de grabación, sus padres y también su hermana. Eso me hizo sentir que ya lo conocía y hasta el momento hemos cumplido el trato. 

-Es aquí -dice mientras apaga el motor. 

Bajo en silencio y puedo ver una pequeña casita muy cerca de la playa, esta pintada de verde muy claro y las ventanas blancas, tiene una pequeña terraza pero no puedo ver que hay ahi, desde la entrada puedo divisar una luz suave que sale desde adentro. 

Diego me toma de la mano y me sonríe, entramos a la pequeña casa y en el centro hay una mesa para dos con velas y una botella de vino. ¿Ha hecho esto para mi? ¿Pero por que? 

-¿Te gusta? me pregunta mientras me sonríe. 

-¡Wow! aveces no eres un idiota, eso es una novedad. 

-Paula, nuestro trato -me mira con ojos llenos de dulzura. 

-Lo siento- digo y no puedo evitar derretirme por dentro. 

Me besa en el hombro que por causa del destino -O Sofia- llevo descubierto y siento mi cara ponerse roja. Me invita sentar y me percato de que aun vamos agarrados de la mano, me siento tan bien a su lado, tan cuidada y protegida.