Estoy nada.

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-Hola katherin-dice el psicólogo.
-Hola- le contesto igual
-Como has estado?- me pregunta con un tono medio cansado.
-Mmm.. Ya sabe usted, estoy nada- pensé esa ultima palabra por mas tiempo.
Como siempre el psicólogo me hacia las preguntas de siempre y yo le contestaba con lo de siempre.
-katherin te has seguido cortando?- me pregunto y me sorprendió esa pregunta ya que casi no me lo pregunta.
-digamos que mi libreta tiene mas dibujos- le conteste metafóricamente con una sonrisa penosa.
-y ahora por que seguiste dibujando esta vez?- me contesto con tono de desaprobación (típico de el)
- por varias razones (1 por que me sigo sintiendo mal cada vez que mi mama lleva a un hombre con quien coger y se escuchan los gritos hasta mi cuarto (2 se me acabaron las pastillas tranquilizantes y (3 no le incumbe- dije esta ultima con un tono de desesperación (sin contar que ando en mis días verdad?)
-claro que me incumbe, ese es mi trabajo y por eso estas aquí.-
-y si mejor me da las pastillas tranquilizantes y ya?-ya me estoy enojando.
-okey pero primero contéstame una cosa,-dijo sentándose en su silla.
-que cosa?-.
-cada cuanto te cortas?-.
-pues digamos que cada vez que mi mamá lleva a un hombre a la casa y cada vez que me veo en un espejo. Osea cada semana pero no tan seguido como cada 4 días.
-esta bien katherin ya puedes irte.- dijo dándome las pastillas.
Salí rápido del consultorio
Iba caminando a paso rápido mientras observaba el frasco naranja de las pastillas cuando choque con algo como una pared o mas bien alguien y caí al suelo y el frasco se fue rodando.
Vi una mano que me tendían y la agarre para pararme, era el, el chico de la sala de espera y vi en su otra mano que el tenía mis pastillas.
-lo siento por dejar que chocaras conmigo-. Dijo casi riéndose
-no te preocupes, ahora dame mis pastillas-.
- y si no quiero?- dijo eso como con una sonrisa tan sexy.
Trate de quitársela de la mano pero no pude, el no me dejo, y con un movimiento rápido hizo que quedáramos a centímetros.
Vi como se acercaba mas y rápido agarre las pastillas y salí corriendo.
Sentía como las lágrimas salían por mis ojos
Y dije que ya no, no mas, no mas hombres.
Me subí al carro y maneje hasta la casa, iba sacando las llaves cuando escuche algo romperse, rápido trate de abrir la puerta cuando...
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Gracias a l@s que siguen leyendo, se les aprecia ☺️
¿Que esta pasando en la casa de katherin?

Un peligroso amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora