!Fue un Accidente! ~ EDITANDO ~

I

Dormía profundamente. ¡El edredón de mi cama era simplemente perfecto! Me mantenía calientita y resguardada de los fantasmas que se esconden en la oscuridad de las habitaciones por las noches.

Todo era silencio... hasta que a lo lejos, muy vagamente, comencé a escuchar un pitido. Intente ignorarlo, pero cada vez lo escuchaba más cerca.

*TI TI TI TI TI TI TI*

Abrí un ojito para ver que rayos era lo que habia interrumpido mi hermoso sueño.

¡Era el despertador!

Volví a cerrar el ojo y comencé a tantear el mueble de al lado de mi cama para apagar el aparato que no dejaba de sonar. ¡LO ENCONTRE! presione cada botón que sentía creyendo que ese acabaría con el molesto sonido, pero como no abría los ojos por flojera, no podía mirar.
- ¡¡Ah, cállate, cállate que me desesperas!! - Jale el enchufe del despertador y este porfín se cayó - ALELUYA!- Grite feliz.

- Farrah, Que tanto gritas? – gritó mi madre desde abajo -
Am, NADA! – Contesté riéndome por nada - Bueno, date prisa que ya te tienes que ir! - 
Ir a donde?! - volvi a gritar preocupada - Como que a donde?! Anda y báñate! -
Pero si es sábado! - ahora resulta que tengo clases los sabados, que bien. Notesé el sarcasmo -  Si crees que volveras a engañarme con esto, esta muy equivocada señorita! - grito una vez mas - Hoy es viernes! baja a desayunar que ya es tarde!

Creía que hoy me levantaria tarde y no haria nada mas que ver televisión y engordar con dulces. - No es tan tarde – pensé en voz alta. Miré el reloj y... – Oh mierda! Siete cuarenta y cinco!!! –

Salí de la cama de un salto y corrí hacia mi baño. Abrí la llave de la regadera y mientras el agua se templaba, me fui quitando la ropa torpemente, ya que lo hacia lo más rápido que podía.

Tenia que apurarme o no llegaria! casi lloro al golpearme el codo con la pared < torpe > me dije a mi misma.
Cuando vi que empezaba a salir vapor del agua, me metí a la regadera. Puse shampoo en mis manos y talle mi cabeza con la yema de mis dedos, todo mi cabello quedó cubierto de espuma. Tome la esponja y el jabón, los frote entre si y comencé a tallarme el cuerpo.-

- Yeeee ieeee ieee, que no pare la fiesta, DON'T STOP THE PARTY! – cantaba como loca.

- Hey Farrah, - Grito mi padre desde afuera mientras tocaba la puerta del baño – ¿qué haces ahí adentro? Parece que estas matando a un burro –

- Buenos días señor papá, amanecí muy bien, gracias por preguntar - comente sarcastica.

Es que acaso mis padres no pueden ser buenos y venir a darme los buenos dias a su amada hija? Puros maltratos con ellos

- Ya pues, ya, solo bromeo. Apúrate, faltan 5 para las ocho – dijo desde afuera.

- QUE?!!?!? – grite. Deje de cantar, me enjuague y salí de la regadera. Cruce todo mi cuarto hasta el armario. Me puse el uniforme: Una falda azul marino y una blusa blanca de manga corta. Tomé los calcetines y corrí al tocador, cepille mi cabello húmedo y lo deje suelto, deseaba que se hondeara, porque otras veces se me esponja horriblemente feo, y no queria que eso pasara!

Corrí a ponerle dentífrico a mi cepillo de dientes y comencé a lavarlos. Mientras los tallaba corrí de nuevo al espejo y me puse un poco de rímel, volví al baño y me senté sobre la tapa del escusado para ponerme las calcetas. Una vez que acabe, me puse de pie y me voltie al lavamanos de mi baño para terminar de lavarme los dientes. Tomé mi mochila con una mano y ambos zapatos con la otra y salí como rayo de la habitación.

Mientras bajaba las escaleras me iba poniendo los zapatos. Ya estaba a dos escalones de llegar a la planta baja cuando...

 - Ahh!! – me caí – ah, tontas escaleras! – digo sobándome la espalda.