-¿Quién es? -Pregunté, conocía su fama pero no a él, solo su nombre.
-Uno de los nuevos, no tiene mucha importancia
Fruncí el ceño y me quedé parada por varios segundos.
Dirigí mi mirada hacia la misma dirección de antes, su mirada y la mía se cruzaron por dos segundos, agaché la cabeza pero no sirvió de mucho ya que me seguía sintiendo observada
Las palabras de Michelle se repetían constantemente en mi cabeza al igual que las imágenes del castaño besándose con otras chicas rodeado de alcohol
-La verdad es que de importante no tiene nada
Fue lo último que dije después de dar un beso a Lauren en la mejilla y marcharme a buscar a la chica que me había prometido que estaríamos poco tiempo aquí.
PDV Louis.
El olor a victoria entraba por mis fosas nasales provocándome una felicidad intensa en mi interior.
Grupos de gente se diferenciaban desde el medio de la carretera, fui observándolos para ver si veía alguna cara conocida hasta que una rubia llamó mi atención.
Su coleta caía por uno de sus hombros dejando su rostro a la libertad, cosa que agradecía. Los vaqueros negros se ceñían a sus piernas a la perfección, como si estuvieran hechos a medida. Le había visto en alguna otra parte y lo sabía porque una cara como la suya no se olvidaba rápidamente.
No podía posar mi mirada en otra persona que no fuera ella, era realmente atractiva.
-¿Pillas uno? -Una voz familiar me hizo volver para observar el cigarro que Liam me ofrecía. Lo cogí con cuidado y lo coloqué sobre mis labios, pedí un mechero y a los pocos minutos el humo blanco salía disparado sobre mi boca perdiéndose con el viento.- Buena carrera
-Ha sido sencilla –Espeté sujetando el cigarro con ambos dedos- Ya no se ve el nivel de antes
-No te metas en ese terreno, Louis –Me dijo mi amigo, puse los ojos en blanco y le di otra calada al cigarro, sabía que no era un tema adecuado; pero el nivel que había antes era superior y él tanto como yo lo sabíamos.
Después de unos minutos volví a mirar a la rubia, la cual al darse cuenta de que la estaba mirando decidió imitar mi acción, por dos segundos su mirada y la mía conectaron hasta que decidió agachar la cabeza. Minutos después el sitio estaba vacío.
-El cielo está para llover, ¿Quieres que nos vayamos? -Pregunté a mi amigo, no me gustaba beber con mal tiempo así que hoy simplemente no lo haría.
Tras recibir su respuesta afirmativa nos metimos entre el bullicio de gente recibiendo miradas a nuestro paso. No soportaba que la gente me mirase, era un gesto que me transmitía inferioridad y más si era un grupo de personas, no lo soportaba pero nunca era yo el último en apartar la mirada. No iba a permitirles el lujo de sentirse superiores o simplemente sentir que me incomodan.
PDV Hannah.
Las miradas seguían posadas sobre mi silueta, era como si se hubiera difundido el rumor de que había venido, como si tuviera en la frente un cartel que ponía "Mi novio murió aquí hace tres años"
La simple idea produjo arcadas. No quería ser conocida por tener un novio bajo tierra.
Decidí dejar de pensar en eso y buscar a Mich ya que le había perdido la pista y quería irme. No aguantaba más aquí, no lo había pasado mal, había visto a gente que tenía ganas de ver pero sabía las consecuencias que conllevaba el estar en este sitio y no me agradaban en absoluto; mi corazón era como un pequeño globo siendo presionado cada dos segundos. Sentía que de un momento a otro iba a explotar.
Después de varios minutos diferencié a mi amiga a lo lejos y me dirigí a ella lo más rápido posible. Cuando ya estaba cerca toqué su hombro suavemente, ésta al notar mi tacto pegó un bote.
-¡Hann! ¿dónde estabas? -Intentó susurrar mi amiga, pero al ver como pronunciaba las palabras supe cuál era su estado.
-¿Podemos irnos? -Ignoré su pregunta y fui directa a lo que me importaba
-Espérate un rato Hannah, mira te presento... -comenzó a señalar a cada una de las personas que contribuía en el círculo formado- Cassy, James..
-Les conozco, Michelle.
Rió de forma tonta y continuó presentando gente como si hubiese hablado con la pared.
-Voy a irme -Espeté
-¿No quieres tomar algo?
-Va a llover, prefiero llegar a casa antes de que mi madre se entere de que he salido sin su consentimiento
Al ver las ganas de mi amiga por quedarse decidí darme por vencida.
-Me voy yo ¿Vale? Quédate tú, mañana hablamos
-No quiero dejarte sola
-Yo no quiero estar aquí
Sonreí levemente y me di la vuelta dispuesta a marcharme de aquel lugar y a cuestionarme si realmente volvería. Fue cuando empezó a llover.
Y no era sólo en mi interior.
•••Las calles se encontraban oscuras, las farolas eran las que me ayudaban a conocer el camino que me llevaría de vuelta a casa. La lluvia cada vez era más fuerte y el camino cada vez me parecía más largo.
Estaba tan sumergida en mis pensamientos que ni si quiera me di cuenta cuando un coche se colocó a mi lado.
-¿Necesitas transporte?
Miré dentro del vehículo y no podía creer que la persona que me estuviese ofreciendo entrar en su coche fuese la misma que acababa de ganar una carrera ilegal hace menos de una hora.
-No, gracias -Espeté
-Está lloviendo mucho, rubia
-No había sido consciente de ese detalle
Observé como el coche avanzaba a medida que yo daba un paso, la lluvia no cesaba y el conductor no parecía contentarse con mi respuesta.
-Deja de hacerte la dura y entra al coche, vas a coger frío
-No tengo porque hacerme la dura con nadie
El castaño sonrió levemente y pese a la poca luz que había me di cuenta de lo atractivo que era.
Pasaron pocos minutos y el coche seguía a mi lado, parecía un guardaespaldas y yo, en esos momentos, no tenía ganas de que nadie me cubriese nada.
-¿Vas a acompañarme hasta casa?
-Si no quieres subir me obligas a acompañarte
-Una pena que mi casa sea esta -Espeté cuando estaba ya en frente de mi jardín.- Yo que quería pasar un rato más contigo -Bromeé mientras ponía los ojos en blanco
De repente un rugido comenzó a hacerse presente en toda la calle y cuando pude darme cuenta el charco que se encontraba en la carretera había pasado a estar por toda mi ropa, como si no estuviese lo suficientemente mojada ya. Solté un pequeño chillido y maldecí la existencia del castaño que estaba conduciendo el coche.
-¿Crees que tu madre te dejará pasar tan mojada a casa? -Bromeó mientras reía suavemente
Se me pasaban todas las ideas del mundo por la cabeza con tal de devolverle lo que acababa de hacerme, todas las putadas posibles las tenía en mente en esos instantes pero simplemente estrujé mi pelo, me quité la chaqueta y respondí con la mayor tranquilidad del mundo.
-Siempre y cuando no vaya acompañada de un gilipollas me dejaría entrar de cualquier manera.
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93 | Louis Tomlinson Fanfiction
Actionuna persona solo muere cuando deja de ser recordada. -Advertencias: Esta Fanfic puede contener lenguaje fuerte, escenas violentas, contenido sexual, uso de alcohol.-