Alexander

A-5

Esta loco si cree que puede besarme.

Hago como que dejar que me bese, pero antes de que lo haga me acomodo de manera en que si subo mi pierna, le de justo en su amiguito.

Hora de actuar. Subo mi pierna y ¡tachan!

- ¿Que rayos te pasa?- suelta molesto

- ¿Que me pasa a mi? Jaja ¿que te pasa a ti, imbecil? No puedes llegar y tratarme como una puta- le suelto gritando

Escucho pasos, ojala que sea mamá.
Pero no lo es, al abrirse la puerta un muy orgulloso Ivan me sonríe.

- ¿Que esta pasando aquí?- pregunta serio

- Este idiota trato de besarme. ¿Donde están todos?- digo medio tratando de calmarme

- Bebe, me siento orgulloso de ti - hace señas de que se limpia lágrimas - ya se fueron, nos dejaron el auto de Vladimir para irnos, les dije que tenias problemas con la regla.

- ¡Hijo de tu madre y pariente de tu padre! Como se te ocurre decir eso, que vergüenza, ya veo que tu tampoco piensas.

Me dispongo a irme, salgo de la habitación pero me quedo escondida ya que empiezan una conversación que llama mi atención.

- Hermano, creo que estoy enamorado de esa chica. Waaao que carácter, que caderas... bombon naturalito - dice Matias y se nota que habla con un poco de dificultad debido al dolor del golpe, no puedo evitar sonreír al recordar la escena.

- No me jodas, Matias. Con ella no, enserio, ella es una niña muy linda y especial, no le compliques la existencia - dice Ivan en tono serio, celoso y protector, lo adoro.

- Ella me la complica a mi, Ivan... ¡ya no podre tener hijos por su culpa!

- Te lo merecias, Matias. Te dije que ella no es como todas y sin embargo vas y la provocas.

Se hace el silencio durante un rato hasta que Matias dice algo que me impacta.

- Enserio, esa chica tiene que ser mía.

Escucho pasos y salgo corriendo al baño.

- ¡Bebe, apurate, ya nos vamos!

- ¡Ya voy, cariño!

Durante el camino fuimos escuchando musica de Adele, dios amo sus canciones, son tan llegadoras.

Lleganmos al restaurante, yupi, comida china.
Nos sentamos, quedamos hubicados asi: Ivan, yo, Matias.

Estaba tranquilamente comiendo hasta que siento una mano subir por mi muslo, casi me atraganto y escucho que Matias ahoga unas risitas, bajo mi vista para ver quien es el infeliz que no valora su vida... Matias.

Este si que no aprende ni por buenas, ni por malas.

Tomo mi tenedor y sonrió malisiosa, bajo mi mano y... le ensartó el tenedor en la mano, no tanto para una herida grave pero lo suficiente para que le duela.

- ¡Auch!- grita

- ¿Que pasa?- mamá dice atendiendo el grito del idiota.

Voltea y me ve de forma acusatoria y furiosa.

Lo veo de forma que dice "atrevete a decirle y le cuento que me acosas, puto"

- Nada tía, es solo que me golpee con la mesa.

Mi mamá no muy convencida asintió.

- Quiero hacer las pases contigo- dice Matias serio

- Bueno- suelto desinteresada.

El resto de la comida resulto agusto, cosa que jamas creí posible, estando cercas de Matias.

Matias... se comporto como todo un caballero.

- ¡Pijamada de primos!- suelta Fernanda
Mi prima y parte del clon de las mejores amigas(somos cuatro en total. Fer, Sol, Al, y yo)

Había estado hablando con ella desde que llegue de la comida y ahora ella vendría a la pijamada.

- Voy 5 minutos, alistate mami

Rodé los ojos y solté la carcajada, esta no cambia.

- Dormiremos en el balcón- dicen los chicos

- Esta bien- solté desinteresadamente.

Ya había llegado Fer y estábamos acomodados así: Matias acostado y yo usando sus muslos de almohada, Vladimir usando sus piernas(si tomamos a Matias como almohada), Fer e Ivan sentados en las sillas y viendo vídeos, ese par se gustaron.

- Voy por cobija tengo frío- le anuncie a todos.

Entre a mi cuarto buscando una cobija y cuando ya iba de salida me topo con Matias detrás de mi, a centímetros.

-Arlette, que te cuesta darme un beso?- me dice serio, hasta padece suplica.

-Mafias, me cuesta demasiado, y no pretendo que lo entiendas- le digo en tono sincero.

Este no entiende razones.

Lo rodeo y salgo del cuarto, el me rebasa y se acuesta antes que yo.

Estaba durmiendome cuando siento que me jalan el elástico del pantalón pijama.
Le doy un manotazo y deja de hacerlo.

- Mañana iremos al cine, te pones guapa- dice guiñandome un ojo- ah no mejor no, no quiero tener que pelearme con ningún wey. Aparte... tu ya eres guapa.

No se porque pero me sonrojo.

Oh oh... no me desmaquille, Matias no dejo que me levantara, de seguro parezco momia, que horror.

Y aun así me dice que me veo linda, awww.

No, de seguro es burla, Ahhhg.