Love at first sight #Book1

Capítulo 16.

AMOR
El amor es un secreto que los ojos no saben guardar.

Narra Amber.
Me levanté de la cama y fui al baño. Hice mis necesidades y me metí a la regadera. Una vez lista me acordé que dejé la ropa fuera, encima de la mesa. Mierda. Asomé la cabeza por la puerta y en la cama estaba él, dormido. Caminé de puntillas tratando de hacer el menos ruido posible. Una vez cogí la ropa miré la cama y me encontré a Paul mirándome atentamente.

Paul: ¿Que haces así? -preguntó examinandome de arriba abajo con los ojos entrecerrados.

Yo: He ido a bañarme y me dejado la ropa, perdón por despertarte.

Iba a meterme otra vez al baño pero me dí con la silla del escritorio. Agarré la toalla fuerte para que no se soltara y caí de bruces al suelo. Paul me levantó del suelo riéndose y me dejó en la cama sentada.

Paul: Serás tonta... ¿Porque no has puesto las manos?

Yo: No quería que se me viera nada.

Paul: Tranquila, tarde o temprano lo veré.

Le dí una bofetada y me encerré rápidamente en el baño, ¿de que iba el tonto este? Me agarré la mano, me dolía un montón, tiene la cara muy dura el chico. Después de arreglarme salí y él estaba en la cama esperándome. Le ignoré y bajé las escaleras yendo a la cocina. Agarré un trapo y le puse un poco de hielo y rodé mi mano con él.
Mientras cocinaba sentí sus cálidas manos en mi cintura y apoyó su cabeza en mi cuello. Por un momento sonreí pero borré rapidamente la sonrisa, estaba enfadada con él.

Paul: Lo siento, no quería decir eso... Lo he dicho sin pensar, perdóname.

Yo: Realmente querías decirlo...

Me dí la vuelta y lo miré a los ojos, me vino en mente la conversación con Bella del otro día. "Estos últimos días aprovechalos al máximo con Paul, porque a lo mejor el lunes ya no estará." La acaricié la mejilla y le abracé.

Paul: ¿Que le a pasado a tu mano? -dijo agarrándola.

Yo: De la bofetada...

Paul: Lo lamento -dijo besándola.

Yo: Tengo miedo a perderte -dije después de un tiempo en silencio.

Paul: No me perderás, no me separaré nunca de ti, eres mi todo.

Yo: Después de estos tres meses junto a ti, quiero hacerlo contigo, no te lo negaré... -dije sonrojada- Pero quiero que sea bonito.

Paul: Y lo será -me besó en los labios- o soy yo, ¿o huele a quemado?

Yo: O no las tortitas -dije mirandolas- Se han quemado, no son comestibles.

Paul: Te invito a almorzar, aunque por la hora mejor te invito a comer. ¿Aceptas? -dijo acercándome a él.

Yo: Supongo que no tengo más opción que ir contigo -dije juguetona.

Paul: Lo siento princesa -dijo besándome- Es lo único que hay.

Yo: Pues me encanta.

Esperé a que Paul se arreglara y salimos a comer. Estuvimos riendo como enamorados en el restaurante, aunque más bien parecíamos unos locos.

Paul: ¿Como esta tu mano?