Para ti, (nunca ha sido de otra manera)

Final eterno.

Tienes que saber una cosa, saber que hoy, tres días después de enterarme que no te volveré a ver, estando en la calle, quería echar a correr, hacia ti, hacia tus brazos, o tu boca, lo que fuera, pero siempre hacia ti.

¿Sabes el dicho "no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes"? Transformemoslo en tiempo, el tiempo que ya no me queda contigo, y que lo he apreciado, pero lo igualmente lo he perdido.

No dejes que tus pupilas se olviden del color de mi pelo, o de lo cerca que estuve de obtener tu asombro, quizá sólo faltaron algunos momentos más junto a ti.

No dejes que mis venas se olviden lo que es correr a 300 km por hora, porque 100 no son lo suficiente al escuchar tu voz diciendo cualquier cosa, como la simple pregunta de si está todo bien.

Ni se te ocurra permitir a tu cabello cambiar de tono sin estar yo para presenciarlo.

Permíteme correr hacia ti para tenerte de una vez por todas, o por lo menos, prométeme que al escuchar alguna canción de despedida, sin saber por qué, te acordarás de mi.

Y serás tú el que corra en mi busca.