Boston Love (Jortini)

Capitulo Uno: Otro nuevo comienzo

   Narra Tini

¿Quién lo diría?... normalmente este seria un día en los que yo, Martina, me despertaría más tarde ya que son vacaciones y cualquier chica de 16 años se dormiría hasta más tarde , pasaría el día en pijama y esas cosas, pero hoy era diferente. Habían terminado clases y yo ya estaba haciendo maletas, una mudanza, no un viaje vacacional.

-Hija empaca rápido, la mudanza ya está por venir - dijo mi madre sacándome de mis pensamientos y poniéndome a trabajar de inmediato. Me había aferrado a la idea de que cuanto más tarde lo hiciera, menos dolería.

-Está bien mamá, oye ¿No has visto el brazalete que me regaló Lodo?- Mi habitación era un total desorden y me era imposible encontrar lo poco que quedaba de mí en ella.

-No hija, búscalo bien, debe estar por alguna parte- dijo y se marchó abandonando el lugar

Lodo se había convertido en mi única amiga verdadera, digna de ser llamada así durante estos últimos años que pase en el colegio tras haberme mudado a Buenos Aires, una historia muy larga que no tengo ganas de decirla hoy; en fin, Lodo me regaló el brazalete unos dias antes de que el colegio terminara.

*Flashback*

-Tini, tengo algo que quiero darte -dijo Lodovica mientras caminábamos por el parque en una de esas salidas de amigas donde quieres despejar tu mente después de un examen.

-Sí, pero ¿está todo bien? – contesté preocupada, no quería más malas noticias.

-¡Si!, está todo bien- me respondió con un poco de alegría y tristeza en su voz- Pero sé que ya mismo te vas y...

-Lodo no hagas esto más di...

-No, espera, quería darte algo muy especial para que me recuerdes y recuerdes todo lo que hemos vivido juntas estos últimos años; es un brazalete- dijo sacando una caja pequeña roja de su bolso- el primer dije, un libro, es símbolo de tu inteligencia, porque eres un libro abierto que cada día se enriquece de conocimiento, el segundo una ave, representa lo valiente que eres para emprender un nuevo viaje, el tercer dije, una llave, porque tienes la llave del mundo y lo tienes a tus pies, el cuarto, una flor, porque eres dulce y delicada y el quinto y último dije es una estrella ,porque emites una luz increíble que contagia a todos... y en conjunto forman a la persona más hermosa que he conocido, tanto por dentro como por fuera

-Gracias- fue lo único que pude decir mientras algunas lágrimas caían en mi rostro- Eres increíble- dije y la abracé

-Tú lo eres

-No, tú lo eres

-Lo somos- dijimos las dos mientras seguimos caminando secándonos las lágrimas

*Flashback End*

Ahora buscaba desesperadamente el brazalete mientras la bocina del auto de mamá sonaba en el fondo avisándome que ya era hora de irse. Tras arrastrarme en el suelo, como una serpiente literalmente, hurgando en todas esas cosas que ahora ya no podía lleve, la encontré, salí de la habitación apoyando mi mano en el marco de la puerta para observarla por última vez y recordar todo lo que en ella se albergaba, risas, lágrimas, sueños, ilusiones, tristezas y anhelos, ahora era tiempo de dejarlo atrás y volar como aquella ave de mi brazalete, ¿Estoy lista para enfrentar esto de nuevo? ¿Es justo que tenga que rehacer una vida en cada lugar al que voy? Mi madre no me lo dejó cuestionarme ya que sonó de nuevo la bocina y esta vez repetidas veces, por lo que tuve que emprender una maratónica carrera hasta el auto.

-Martina ¿Qué estuviste haciendo? Casi nos vamos sin ti, tenemos que ir al aeropuerto- dijo mi madre furiosa

-Lo siento, solo que no encontraba el brazalete que me obsequió Lodo