Lo que hay dentro de mí

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– ¿S-SABES DONDE ESTA? –Preguntó Annie exaltada. Exigía una respuesta. Ya estaba más confundida que antes. Si anteriormente ignoraba el porqué de la llegada de ese ser misterioso, ya no lo haría. Le preguntaría todo lo que se estuvo guardando durante su conversación. Pero mucho más le interesaba saber sobre su Luz.

–Si, creí que ya no serias capaz de verme –Confesó la, aun más, misteriosa persona. En sus planes no estaba el tener que explicar todo. Solo quería ayudarla e irse. Pero como se dieron las cosas no le quedó más remedio que contarle la verdad, su verdad –estuve a tu lado desde siempre, solo en tu niñez he sido visible para ti.

–Tu eres... –Annie tenía sus dudas, quería confirmarlo pero no le salían las palabras. Y la persona continuó.

–Así es, –Afirmó interrumpiéndola. Ya sabía que era lo que le intentaba decir. –Me llamo "AMISTAD" y YO soy tu LUZ.

– ¿M-mi luz? –Aunque "Amistad" le había aclarado varias dudas, seguía confundida – ¿Cómo no me di cuenta durante todo este tiempo?

–Al crecer, egoístamente fuiste enterrándote en tu propia oscuridad olvidándote completamente de mí.

Esas palabras pusieron a Annie en un estado que ni ella podría describir; era enojo, alegría, tristeza, decepción - de sí misma -, y sobre todo confusión, todo al mismo tiempo. Esa mezcla de emociones hizo que le dejaran de funcionar las piernas y callera sentada sobre el lugar donde estaba. – ¿Egoístamente? ¿Por mi propia cuenta? ¿Olvidarme de ti? –procesaba las palabras mientras las repetía en casi en susurros. Dándoles unos golpecitos a sus piernas al caer, intentando hacerlas reaccionar subconscientemente.

"Amistad" se sentó para estar a su altura y teniéndola de frente le dijo con su voz más suave y comprensiva –Eso es algo que les suele pasar a la mayoría de las personas. Hay quienes lo pueden superar e ir hacia adelante, encontrando su luz; y otros que se quedan atrapados sin salida en su propia oscuridad. Como tú.

Annie ya no sabía que más decir. Se sorprendió al darse cuenta que ya no sentía más tristeza.

"¿Sera porque descubrí mi luz? ¿O porque esta persona, por alguna razón, me trasmite bondad, calidez y valor? Solo con escucharlo hablar me siento segura de mi misma, pero ahora me doy cuenta de que es así desde que apareció. No lo noté antes. Talvez sí me haya vuelto egoísta."

Al ver que Annie no hablaba se limitó a seguir explicando. –Tu oscuridad se llama "soledad". Y te has consumido demasiado en ella –La joven se sorprendió al escuchar eso.

"¿Mi oscuridad se llama "soledad"? ¡Ahora comprendo!. Esta persona dijo que se llamaba amistad, él es la representación de las amistades que alguna vez tuve o tendré. ¡Ya lo entiendo! Lo entiendo perfectamente. La razón de por qué tenía tanta amabilidad y calidez.

Los amigos verdaderos, eh~..."

–Ya es tiempo de dejarla –Continúa, se levanta del suelo y le extiende una mano. La chica eleva la vista de sus pies, que al parecer ya no están entumecidos. –Toma mi mano y levántate.

Para Annie esas simples palabras le parecieron las más dulce que había oído jamás, era tanta calidez y bondad junta en una frase sola que en su interior le resonaba traducido como un simple "Todo estará bien" junto con la sensación de un abrazo. Eso era exactamente lo que Amistad intentaba transmitirle. Y lo logró.

Ahora, absorbida completamente por esas palabras, feliz respondió con un –sí. –Sonriendo levemente mientras tomaba de esa cordial mano, para levantarse junto a la amable figura de la amistad.

–Desde ahora, ya no me olvides. Porque pase lo que pase jamás me separare de tu lado. –dijo mientras la guiaba hacia la puerta del, ahora, tibio cuarto. Donde, al cruzarla, planeaba volver a su INTERIOR, deseando no tener que volver a verla en ese estado nunca más.

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Hola! Bueno, antes que nada me disculpo por la tardanza (a esas pocas personas que sé que me leen jeje) y espero que hayan disfrutado la historia! XD

Aclaro que la razón por la que jamás describí el aspecto de "amistad" es porque en ningún momento Annie lo puede ver detenidamente, para ella era como una silueta o figura.

Pueden tomar esto como: "la amistad no tiene aspecto alguno, es como cada uno la vea"

O, al menos eso fue lo que pensé cuando escribí esta historia.

En fin, este fue el final de En mi interior. Si les gustó no duden en pincharle a la estrellita, o comentar que les pareció. Ayudan y mucho! n.n

 ¡Gracias por leer!

En mi interior - Watashi no HikariDonde viven las historias. Descúbrelo ahora