4.-Diagnóstico

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Luke se adentra en la habitación de Ashton, dejando a Liz a solas con el doctor Armstrong.

-¿Hay algo mal con Ashy?.-pregunta la mujer con voz temblorosa, esperando desde el fondo del corazón una respuesta positiva.

-Verá señora Hemmings, su hijo es un caso bastante complejo.-comienza, tomando asiento en una de las sillas al costado de la puerta de la habitación, acción repetida por Liz.-Está demasiado convencido de la realidad que inventó y sinceramente para ser la primera semana, yo esperaba un mejor avance.

Desde cierto momento las lágrimas ya habían comenzado a caer sigilosamente por las mejillas de Liz, quien con un hilo de voz hace la pregunta que ha tenido clavada en la garganta desde que comenzó a conducir al lugar.

-¿Cuánto tiempo más deberá quedarse?

-Si sigue así...-el doctor hace una pausa, sus penetrantes ojos verdes se pierden un momento en algún punto del poco colorido lugar, sin tardar mucho en hablar nuevamente.-...Unos dos o tres meses mínimo, supongo.-finaliza.

Liz intenta regular su respiración y asiente, el doctor simplemente deja una mano en su hombro en una falsa señal de apoyo y comprensión, se pone de pié y se retira con las manos en los bolsillos mientras tararea una pegajosa melodía.
La cansada mujer toma cierto tiempo para poder asimilar la información recibida, seca sus lágrimas, respira hondo, se pone de pié y entra a la habitación dispuesta a aprovechar parte del día con sus hijos.

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Luke se encuentra sentado en el frío suelo del armario de limpieza, Ashton en su regazo, el mayor comenta sobre situaciones que ha vivido en el hospital mientras el menor se limita a oírlo, consolarlo, acariciarlo y besarlo en distintas partes del rostro.

-¿Crees que salga pronto?.-pregunta Ashton jugando con los dedos de Luke.

La pregunta toma por sorpresa al menor.

-Claro.-responde luego de un momento.-Recuerda lo que dijo mamá.

Ashton sonríe, asiente, se forma un breve silencio entre ambos, las respiraciones calmadas se apoderan del ambiente, cierran sus ojos y disfrutan el momento hasta que el mayor lo rompe de golpe.

-¡Olvidé presentarte a alguien!

-Ashton, no creo que-

Antes de que el menor pudiera apelar se vio arrastrado por los pálidos pasillos.

-Dónde se habrá metido.-susurra el mayor.

Luke claramente no comprende a quién busca su hermanastro, sin embargo se deja llevar al ver la expresión emocionada de su rostro, por la cual pagaría cualquier precio.

-¡Ahí estás!.-grita, soltando a Luke y corriendo en dirección a su objetivo.

-¡Ashy!

El menor levanta una ceja al escuchar la voz, observa de pies a cabeza al individuo que envuelve a Ashton en sus brazos. Era una mujer, quizás un poco mayor que Ashton o quizás de su edad, estatura media, cuerpo bien proporcionado, rostro amigable y una larga cabellera color sandía.

-Hola.-saluda con un evidente tono de seriedad, interrumpiendo el abrazo.

La mujer se separa y queda mirando a Luke con una amable sonrisa.

-Hola, soy Ashley.-saluda, acercando una mano hacia el rubio.

-Luke.-dice simplemente, estrechando de mala gana la mano frente a él.

-¡Ashley es enfermera!.-interrumpe el mayor, como si estuviera mostrando un nuevo juguete.-¡Me cuida mucho, es muy dulce!

La muchacha de cabello color sandía simplemente ríe y acaricia el cabello de Ashton, ganándose una maldición mental de parte del rubio.

-¿Tú eres el hermano de Ashy, verdad?

El estómago de Luke se revuelve como si de una licuadora se tratase.

-Si.-responde, cuidando su tono de voz para no dejar en evidencia su descontento.

-Ashy es muy dulce, muy pocos chicos son así a su edad.-sonríe al mayor mientras éste se deja acariciar, esperando que Luke "apruebe" su nueva amistad.

El menor se limita a asentir, los tres chicos se dirigen al comedor para intentar "conversar", cosa que sólo hacen Ashley y Ashton ya que el rubio se concentra en maldecir internamente.
Luke sentía que el universo conspiraba contra él, sentía algo horrible con cada caricia que la teñida proporcionaba al rizado, cabe mencionar que la muchacha le hacía recordar en demasía a Michael, cosa que sólo lograba sacarlo más de sus casillas.

Lo que Luke no sabía era que la relación establecida entre su hermanastro y Ashley era una de las más puras. Ashley conoció a Ashton en el comedor, se le acercó al verlo solo y le sorprendió y conmovió su forma de ser y pensar. Por su parte el mayor veía a la teñida como una figura maternal dentro del hospital.

Claramente nada de esto le importaba a Luke, a él sólo le importaba el hecho de que Ashton se dejaba acariciar por una persona que conoció hace una semana y además afirmaba que ésta lo "cuida mucho" y que era "muy dulce". La sangre hierve en el interior del rubio, no escucha su alrededor y sólo espera que su teléfono suene, una vez que lo hace, se pone de pié.

-Llamó mamá.-interrumpe.-Está afuera, nos vemos.

-Adios Luke, un placer conocerte.-sonríe.

El rubio devuelve la sonrisa pero de una manera más frívola, casi imperceptible. Ashton se levanta, lo abraza con fuerza y dice adiós rápidamente para seguir conversando, sabiendo que al otro día también habría visita.

Luke no dice nada en el camino, llega a casa y se pone ropa cómoda, se recuesta, su respiración se escucha fuerte y profunda. Ahoga un grito en la almohada, varios puñetazos en el colchón y cae dormido.

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Jeioooooou, si sé que me demoré mucho en actualizar! Pero no tengo Internet): por lo que escribo en mi casa y subo cuando puedo): ♡

*Ashley es Halsey

Weird Place [Lashton]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora