Decir adiós-Dievica

Capítulo 4 -Lodovica-

El almuerzo con Alessandro fue bastante divertido. Cuándo terminé el trabajo me tomé el día ya que no tenía más nada que hacer. Al terminar Alessandro a mi me faltaba todavía un poco por lo tanto le tocó esperar unos 15 minutos y luego fuimos a un restaurante que se encontraba cerca de allí. Nada muy lujoso o formal, mas bien un almuerzo de amigos porque eso éramos,Amigos.

Cuándo llegamos elegimos una mesa cerca de la ventana y él me corrió la silla para que yo pueda sentarme, cosa que agradecí y me gustó. Se mostraba muy atento conmigo. Comimos una rica pasta y charlamos bastante.

–Y cuéntame Lodo ¿Estás interesada en alguien? ¿Estás enamorada? – Me preguntó luego de hablar sobre mi familia y la suya. Bajé mi mirada hacia mi plato. No quería entrar a ese tema pues no era algo de lo que quisiera hablar con él, sabiendo sus sentimientos hacia mi. – Lo siento Lodo. Yo no quise incomodarte. Si quieres podemos hablar de otra cosa– Le sonreí

–Tranquilo Ale. Y no estoy interesada en nadie por el momento.– Lo miré a los ojos. él me miraba fijamente como intentando descifrar lo que me pasaba. –El amor no es algo en lo que pueda decir que me va bien–suspiré y decidí sincerarme con el– Hace tres años terminé con alguien que era muy importante para mi. Lo conocí en Argentina al poco tiempo de llegar allí para estudiar. Salíamos mucho con amigos, nos divertiamos, nos ayudábamos en los idiomas -Yo le enseñaba Italiano y él a mi Español- al poco tiempo nos planteamos que sentíamos y comenzamos a salir–Hice una pausa y bajé mi mirada. Podía sentir sus ojos clavados en mi– Me sentía en las nubes con él, todo era como un sueño. Tenía a mi principe azul y yo era su princesa. Nos entendíamos tan bien, hablábamos de todo como amigos y nos tratábamos como novios. Era simplemente perfecto hasta que descubrí que él me engañaba con otra por medio de uno de sus amigos– Lo miré– Tomé el primer vuelo y vine aquí con la intención de olvidarlo, de arrancarlo de mi corazón, de...– Las lágrimas empezaron a brotar por mis ojos al recordar todo aquello. Alessandro no decía palabra alguna, estaba atento. El tomó mi mano para consolarme.–Me la pasé llorando días y noches. No podía creer que él me hubiera hecho eso yo no podía– Sollocé

–Vaya Lodovica... Me sorprendí al escuchar todo eso. Tambien me sorprende que ese imbécil no supo valorarte siendo una mujer tan dulce, tan aplicada. Eres digna de ser feliz– Posó su mano derecha sobre mi mejilla y limpió mis lágrimas con su pulgar. Su otra mano estaba sobre la mía– Se que encontrarás a alguien que te ame, que no te haga pasar por tanto dolor.–

–Gracias Alessandro– Le sonreí dulcemente. Me hacía falta desahogarme y contarlo.– Eres muy dulce – Una pequeña sonrisa se formó en sus labios

El resto del almuerzo nos la pasamos riéndonos y contando anécdotas graciosas de nuestras vidas pasadas. No tuve que volver a tocar el tema de Diego, él había entendido que no quería hablar sobre ello.

Había conocido a un Alessandro más simpático, menos tímido y me gustaba mucho su manera de ser. Me encantaba como me hacía sentir cómoda, después de todo él no estaba nada mal.

Luego de la cena el me llevó a mi casa y hablamos un rato más hasta que se tuvo que ir porque -a diferencia de mi- el debía volver a trabajar.

Me fui a mi habitación y me senté en la cama. Me saqué los zapatos y me acosté para mirar alguna película. Me la pasé haciendo zapping hasta que encontré una película de terror, nunca me gustó este tipo de películas pero esta se veía interesante.

Al rato me dormí.

–¡Lodovica!– La voz se escuchaba lejos.–¡Despierta dormilona!

Abrí mis ojos y acto seguido me cubrí la cara por la luz que me daba directo en los ojos

–¿Que hora es Lu?– Mi voz estaba ronca por el sueño

– ¡Son las ocho y media así que te levántas de esa cama Lodovica Comello que traje pizza, películas románticas, helado y dulces! ¡¡Hoy es noche de chicas!!– Mi amiga se paró y saltó eufóricamente

–¿Ya te he dicho que estás completamente loca?

–Oh mi querida amiga ¿Ya te he dicho que eso lo sé desde hace mucho?– Reí

–Solo te lo recordaba– Le guiñé el ojo amistosamente y me levanté de la cama.

La noche había sido divertida, me sentía como una adolescente. Claro que a mis 24 años no era vieja pero hacía mucho que no me divertía así.

Mi móvil comenzó a sonar con una canción de Pink Floyd lo que me indicaba que me estaban llamando.

Lo agarré y contesté

–Hola–Dije.

–Hola Lodovica,soy Alessia–La 'mano derecha' de mi jefe –Te llamaba para decirte que el señor Francesco quiere verte mañana a primera hora para hablar sobre tu nuevo trabajo–Hizo una pausa. ¿Nuevo trabajo?–En Buenos Aires, Argentina–¿QUE?

–¿De que hablas? ¿Nuevo trabajo? ¿Por qué? ¿He hecho algo mal?

–Oye tranquila Lodovica. Por lo que se en la empresa de Argentina estuvieron despidiendo al personal y como tú eres de confianza y sabes el español decidieron mandarte allí– Estaba en shock

– ¿Pero no pueden mandar a otra persona? Quiero decir, no es que no me guste, solo que aquí estoy más cómoda.

–Mira Lodovica eso tienes que hablarlo con alguien más. Yo solo me he enterado de eso. Pero no desaproveches esta oportunidad, linda, que te recompensarán.

–Está bien– Suspiré– Nos vemos mañana Alessia–

–¡Hasta mañana Lodo!– Colgó.

Luli me miraba atenta preguntándose que era lo que había pasado. Le conté y luego de que me rogara miles de veces que no me vaya seguimos viendo 'Amelie'.

Como se habrán dado cuenta *Y si no se dieron cuenta sabrán ahora* Cambié la imagen de la novela. ¿Les gusta la nueva? La verdad que a mi si me gusta muchísimo porque la anterior la hice sin ganas jajaja 

Bueno, quería agradecer por la paciencia, por los comentarios y votos. 
Espero que me comenten respondiendo a estas preguntas... 

¿Tocan algún instrumento? 

¿Les gusta cantar, bailar o actuar? 

¿Cuál es la canción que las representa en este momento? 

LAS QUIERO Y ESPERO VER SUS RESPUESTAS! -WYWH-