Lulu y Veigar

Conociendo a nuevos amigos

Ya hacia 1 semana que  Lulu se había unido a la liga, habían anunciado su lanzamiento y varios la usaban, llevándola en diferentes roles, por lo cual estaba un poco exhausta. 

Había intentado hablar nuevamente con los Yordles que compartían el edificio con ella; Teemo, Tristana, Rumble. Pero al parecer ninguno estaba interesado. Con el único que había tenido "comunicación" era con Veigar, y eso era nada mas que un "Hola" cuando el ya quería retirarse del lugar en donde estaba ella.

La hora de la comida había llegado y ella estaba formada en la fila que se había hecho en el comedor para comprar la comida, sostenía una charola y buscaba con la mirada a Veigar. Cuando comía sola simplemente se ponía a jugar con la comida, riendo ella sola y contándole uno que otro chiste a Pix para alegrar la comida, pero nunca venia mal mas compañía.

Después de recoger su comida camino hacia las mesas, donde los demás campeones hablaban y reían animadamente mientras comían, les envidiaba un poco. Al no encontrar giro hacia la salida cuando vio a 2 chicos, eran de su estatura y parecía que el que estaba rodeado de vendajes estaba bastante triste mientras la pelirosada trataba de animarlo haciendo muecas y todo tipo de aspavientos. Lulu se acerco curiosa a la mesa donde se encontraban.

¿Puedo sentarme?- Pregunto un poco nerviosa, con una pequeña sonrisa en su rostro. 

Ah, tu debes ser Lulu, ¿no? Siéntate- Le dijo la niña con una sonrisa, esperando a que la Yordle se sentara y continuo- Yo me llamo Annie y el es Amumu.

Lulu los siguió mirando, inspeccionándolos con la mirada, su cabello, sus ojos, la ropa que llevaban, aunque Amumu era una momia, le parecía un poco gracioso el vendaje que tenia. 

Si, yo soy Lulu, encantada de conocerlos- Les dijo ensanchando un poco mas la sonrisa, habían sido los primeros en hablarle abiertamente sin preguntarle cosas extrañas que ella ni siquiera entendía.

¿Como te han tratado los demás?- Pregunto Annie metiéndose un bocadillo a la boca, tratando de convencer a Amumu de que lo probara.

Ah... no he hablado con nadie... aparte de los de mi especie... mas que a Veigar- Dijo ella un poco nerviosa. Realmente los "humanos" se veían bastante temibles, en especial los provenientes de Noxus.

¿Veigar?- Pregunto Annie para soltar una risa. Por fin había logrado que Amumu probara las galletas.

Si, es un poco... difícil hablarle, pero al menos ya logro hacer que me devuelva el saludo cuando nos encontramos- Dijo como si estuviera orgullosa por haber logrado eso.

Annie la miraba sin quitar su sonrisa cuando volteo la mirada y se encontró con Sona, la virtuosa de las cuerdas- ¡Hey! ¡Sona!- Grito ella alegre alzando y moviendo las manos para lograr obtener la atención de la hermosa joven de cabello azul.

Sona camino hacia ellos y saludo a Lulu moviendo la mano de un lado a otro con ligereza.

Ah, hola- Dijo Lulu viendo su instrumento con bastante curiosidad. 

Se llama etwahl, ¿te gusta?- Se escucho una voz en la cabeza de la Yordle, la cual volteo alterada hacia todos lados para encontrar de quien había sido aquella voz. Sona solo sonrió divertida y se sentó con ellos- Tranquila Lulu, me puedo comunicar contigo a través de la mente, de mi cabeza a la tuya.

Ah, ya veo- Dijo Lulu no muy convencida por la explicación de la joven, pero dejo de tomarle mucha importancia.

Y asi se paso la hora de la comida, platicando con todos y riendo, incluso Pix estaba participando en las bromas que Lulu hacia jugando con la comida o haciendo muecas

Después de esa agradable compañía de nuevo volvía a la grieta, se estaba haciendo un poco aburrido, de vez en cuando le tocaba algún invocador que la paseaba por el bosque.... ah el bosque, como comenzaba a extrañar el claro la pequeña Yordle, pero no debía pensar mucho en eso, Pix le había repetido varias veces que debía hacer mas amigos.

Y así paso el día, dejando que invocador tras invocador la manejara hasta que por fin pudo descansar a altas horas de la noche, estaba exhausta.

Dormir, dormir, quiero dormir~- Canturreaba dando saltitos por los pasillos con Pix a su lado, directo a su habitación.

¡Rum, rum!- Dijo abriendo rápidamente la puerta de su habitación y dando un gran salto hacia su cama, dejando que Pix cerrara la puerta.

Me pregunto si los volveré a ver mañana...- Balbuceo para dar un gran bostezo y se quedo profundamente dormida.