Jhon & Clyde: Mundos paralelos

Los Good

Eran días cálidos de verano, corría el año de 1966 y en beaumont california todo era paz y tranquilidad.

En aquel tiempo el entonces gobernador de california Jackson Good vivía en la mansión heart, que se encontraba a las afueras de la ciudad, Jackson Good era un hombre sencillo, simple y carismático, todo lo que un buen gobernador debe ser, y junto a su esposa Lissa Little y sus dos hijos Ema y Kite Good formaban una hermosa familia feliz. Pero toda esta felicidad estaba a punto de terminar.

Un domingo 24 de diciembre, los hijos de jackson decidieron sacar a pasear al perro,(esto no era mayor problema, ya que la propiedad contaba con un extenso jardín que rodeaba la mansión) y mientras Ema y Kite se divertían, Lissa y Jackson se sentaban a platicar y observar a sus hijos desde la sillas mecedoras del jardín con una dulce taza de café.

Después de un largo rato paseando al perro, Ema y Kite estaban cansados, Kite le dio la correa con el perro a Ema y se dirigieron a la mansión, pero, en un descuido de Ema la correa se soltó y el perro salio corriendo, en ese mismo momento Kite salio detrás del perro y Ema los siguió. El perro corría hacia la puerta principal de la propiedad Good y los hijos de Jackson iban detrás de el, este perro era demasiado rápido, pero Ema y Kite no perdieron la esperanza y siguieron corriendo; Mientras tanto Jackson y Lissa se levantaron rápidamente y trataron de alcanzar a sus hijos, sin embargo estos ya se encontraban a punto de salir de la propiedad, entonces Jackson grito con todas sus fuerzas para decirles que volvieran antes de la cena (ya que ese mismo día era la cena de gala de noche buena), entonces se escucho la voz de los hijos de Jackson gritar "¡volveremos antes de la cena!". Poco o nada sabia Jackson Good que esta frase lo perseguiría por el resto de su vida y la vida siguiente. Paso un largo rato, cayo la noche y los hijos de Jackson no volvieron, sin embargo este se visto de traje y se paro juntos a la puerta principal esperando a que sus hijos volvieran a casa.

Pasaron duros inviernos, cálidos veranos, hermosas primaveras y largos otoños, pero los Good jamas se recuperaron de la perdida de sus hijos. Jackson paso el resto de su vida esperando juntos a la puerta principal, el fue un gran hombre, pero el amor lo llevo a la locura, y tiempo después, a la muerte. Lissa por su parte quedo devastada, dejo de comer, empezó a tomar medicamentos para dormir y paso el resto de su vida en depresión. Fue un milagro que se mantuviera en este estado de salud durante tres largos años, pero un día, sucedió.

Lissa colapso en un frió pasillo de la mansión, sus piernas al igual que sus brazos temblaban de una manera poco común, su mirada se perdió observando al final del pasillo y finalmente su corazón se detuvo, los mayordomos que la ayudaban rápidamente llamaron a emergencias y minutos después la policía y un equipo forense llegaron al lugar. Los policías trataron de interrogar a jackson (quien se encontraba fuera de la política desde hace ya varios años) pero este solo repetía la misma frase una y otra vez "ellos volverán". Los policías al ver que este no se encontraba en condiciones de vivir solo, trataron de subirlo al veiculo para llevarlo al centro psiquiatrico de la ciudad, pero, cuanto trataron de subirlo este cayo al suelo y murió de un repentino ataque al corazón frente a la puerta principal.

Finalmente la mansión fue desalojada y como se detallaba en el testamento de Jackson, el y su esposa fueron enterrados en el jardín de la mansión, Jackson también redacto que al momento de morir el Jackson Good y su esposa Lissa Little, los vienes y la mansión pasarían a ser parte de el estado de california y la mansión se convertiría en un orfanato el cual llevaría por nombre Good Heart (haciendo referencia a la familia Good y la mansión heart).

Por otra parte la búsqueda de Ema y kite Good jamas concluyo, pero el equipo de búsqueda que trato de determinar su paradero, kilómetros a la redonda de la mansión encontró el cadáver del perro, este se encontraba completamente descuartizado y según forenses fue a causa de algo con grandes dientes, nunca se supo con exactitud que fue, y según dicen, cada 24 de diciembre al pie de la montaña pueden escucharse voces y desgarradores gritos, gritos de niños.

-¿sabes como se todo esto?- Dijo Janna

-No, y no lo entiendo.- Conteste muy confundido

-¡Ellos me lo dijeron!- Me dijo con una sonrisa

-¿Ellos?- Pregunte aun mas confundido

-Si, los Good.

Entonces, a mi corta edad trate de comprender lo que ella me decía, Janna podía hablar con fantasmas, con entes del mas haya, y ellos ayudaban cuando realmente era necesario.

Pasaron algunos meses y Clyde pronto cumpliría la mayoría de edad, pronto podría reclamar mi custodia y nos iríamos de ese sombrío orfanato, pero, ¿realmente quería irme?...