La felicidad de sus labios

197 17 12
                                    

Salí de la casa apurado para que Makoto no permaneciera tanto tiempo en el agua, baje las escaleras con algo de cuidado hasta llegar a la casa de Makoto. Toque la puerta y para mi sorpresa fue su madre quien me atendió:

-Buenas noches -reverencia-

-Nanase-Kun que sorpresa pensé que Makoto estaba contigo

-Sí, no se preocupe solo he venido a recoger algo de ropa por el.

-Entonces pasa

-Disculpe las molestias. 

Entré y me dirigí directamente hacía la habitación de Makoto. Ya conocía esta habitación de memoria, el olor de Makoto esta disperso en todas partes. Abrí su armario inmediatamente y cogí algunas prendas que sabía que eran las favoritas de Makoto. Salí de su habitación y me acerque a la cocina donde se encontraba su madre.

-¿Ya te vas Nanase-kun?

-Sí, Buenas noches, Makoto se quedara esta noche en mi casa

-Que la pasen bien -sonríe-

Su madre siempre me sonreía, desde que tengo memoria recuerdo como siempre estuvo al lado de Makoto apoyándolo en todo, de verdad debe quererlo mucho...

Corrí lo mas rápido que pude teniendo cuidado con las escaleras, se que no había sido mucho rato pero quería ver a Makoto. Siempre me dice que cuando uno pasa mucho tiempo en el agua puede pescar un resfrío aunque a mi nunca me pasaba eso pero tal vez a él si... así que corrí procurando que se encuentre bien.

Al llegar a casa entre al baño y me encontré con Makoto aún todo empapado. Pero no entre a la bañera.

-¿Estás bien? 

Asintió con la cabeza pero sabía que no lo estaba, me acerque aun más a él sin entrar  a la bañera entonces lo mire fijamente.

-Tienes frío, toma 

le extendí mi mano y al principio no me decía nada incluso dudo de si tomármela pero finalmente lo hizo. 

-Vamos, cámbiate

Le señale donde había dejado su ropa y me dispuse a salir del baño para que pudiera cambiarse pero entonces finalmente me hablo.

-H-Haru 

-No te preocupes, no fue nada 

Agacho la cabeza apenado, entendía a Makoto perfectamente sin necesidad de que me lo dijera y él también me entendía perfectamente. 

-Makoto, te espero en mi pieza

Le dije antes de irme pero no me respondió.

Pasaron unos minutos y yo ya estaba en la pieza esperando a Makoto hasta que entro por la puerta y se sentó a mi lado.

-Makoto, acuéstate 

-¿¡Ahh!?

-Le dije a tu madre que esta noche te ibas a quedar conmigo.

Makoto empezó a desvestirse en frente mio y yo hice lo mismo. Ambos nos tumbamos en la cama, yo en el borde y el mirando hacia la pared. Me di vuelta para observar a Makoto.

-¿Tienes frío?

rose mis pies con los de Makoto que estaban bastante helados. 

-Haru, tus pies...se sienten tan bien n///n

Makoto puso una expresión totalmente placentera lo cual me sorprendió e hizo que me ardiera un poco la cara.

-Haru... tu cara... esta roja o-o

-No es nada.-me di vuelta en un solo movimiento evitando así que Makoto me mirara a la cara. Pero enseguida me di vuelta para ver si el seguía mirándome y efectivamente él me estaba mirando con una sonrisa, con esa sonrisa que siempre tenía en el rostro y a pesar de siempre estar a mi lado nunca me fije en la felicidad que emanaban esos labios. 

-Makoto...tú...estas temblando...

-Hace frío Haru-Chan u///u 

-Solo debes apegarte más a mi cuerpo 

-A-AHH? 

-Así ya no tendrás frío 

Me acerque a Makoto apegandome a él, sintiendo como sus brazos me rodeaban por la espalda entonces me di vuelta pero Makoto estaba totalmente dormido con una sonrisa conmovedora, totalmente placida. 

Una eternidad efímeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora