los ratros

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Eh aqui damas y caballeros la chica mentirosa despertaba algo cansada después de todo ese alboroto que sin duda me proporcionó guardias de seguridad para todo aquel que quisiera hacerme daño.

Era la primera vez que le mentí a mis padres había jugado un tremendo papel de víctima de las llamas del incendio de ayer en mi jardín, es la primera vez que hacia algo como eso, las mentiras no estaban en mi anatomía pero sucedió siendo la primera con exageración, aunque después considere que tenía una gran justificación, aún así me preguntaba quien era la persona que observaba mis movimientos un tanto escondido, y lo más importante huyó de mi cuando me acerqué lentamente, mi miedo no dejó que fuera hasta la esquina, borré eso de mi mente.

Al poco tiempo decidí mandarle mis últimas evidencias a shuck y el incendio más una carta de explicación la cual había redactado, mi justificación sobre lo que paso la noche anterior del incendio.

Termine de enviarselo y decidí darme una ducha para despesjar mi mente, tenía que encontrar algún otro lugar por más evidencias, tendría que hacerlo antes de que pasarán 6 días, era el tiempo en que los guardias de la policía nos vigilarán, dando oportunidad a investigar más a fondo sin ser atacada por el de nuevo o sea quien haya sido la persona que me vigilaba en ese momento.

Mientras caía el agua por todo mi cuerpo en la regadera, empecé a tener una platica con mi voz interior.

"Ahora en donde consigo evidencias, podré seguir hasta el final, piensa donde podría ver otras pruebas!!.....
Ya se! Cierto me falta muchos lugares como la biblioteca o la encargada de la biblioteca, la habitación de robt y la de Steven y sobre todo la escena del crimen, el aula que ahora se mantenía cerrada.

Salí de la regadera entusiasmada entonces sabría que ahora tenía que ir preparada a la escena del crimen, me vestí con el uniforme del Instituto, tenía sólo este día para avanzar rápido, me hiría por todo el fin de semana y me retrasará un poco en la investigación, tengo que ser cautelosa, no levantar sospechas y para cuando regrese, las evidencias sigan en los lugares en donde las dejaron.

Cambie mi bolsa de una sola gasa por una de dos, más amplia, tendría que llevar objetos de mi equipo de investigacion mas el de espias o al menos frascos y bolsas de prueba.

Salí al comedor algo alterada, porque Papa no se apresuraba a comer, entonces mire mi reloj de mano, y era demaciado tarde, revisar el aula en la mañana ya no era una buena opción, pensé que tal ves tendría que buscar otra oportunidad para entrar, pero las cámaras me dectectarian, recordé a la enfermera de la escuela y supe que tenía que pedirle algo de ayuda para que bloqueará las cámaras de seguridad del pasillo del salón y algunas más por donde yo caminaria para llegar ahí.

7:42am día viernes en el auto.

Papa me deseperaba por su forma tan lenta de conducir hasta el Instituto, mi manos se notaban algo nerviosas.

- Te Sucede algo cariño? - Papa entono su voz  tipo  broma y me pregunta si me habia gustado.
- No padre sólo conduce - con mi voz un tanto molesta.
- creo que mi pequeña no se despertó de buen humor hoy- burlándose.
- Cuantos años crees que tengo para que me hables de esa manera, ah! - mirando hacia la ventana ignorando a mi padre. El sólo comenzo a burlarse, por algunos segundos después de eso llegamos al Instituto, Papa se despidió de mi y yo sólo le dije como sea. Cerré la puerta del auto y me dirigí hacia mi aula, estaba algo vacía así que sólo pensé y pensé la hora exacta para entrar, no había forma alguna de ser vista por alguien.

Después de algunos tantos minutos la profesora se hizo presente en la clase, un tanto retrasada de tiempo y algo cansada.
Ella dijo algo como esto:
"Chicos hoy habrá una reunión en el gimnasio toda la escuela debe de estar a las 10:00am exactamente". Y comenzó con la clase de literatura, yo seguía divagando e ideando un plan Perfecto para entrar en unos minutos después al aula, así todos estarían en el gimnasio.

the secretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora