Amor & Música [Nick Jonas] TERMINADA

CAPÍTULO 1

Victoria

Había terminado recién de guardar todo en mis maletas, la casa estaba vacía. Hoy era nuestro último día en Chile.

Al ver el lugar en donde había vivido durante 15 años totalmente desierto, hizo que se me formara un nudo en la garganta y una lágrima corrió por mi mejilla; tantos recuerdos, tantas penas y alegrías vividas en este lugar.

─Tranquila. ─Dijo mi hermano, sacándome de mis pensamientos. ─Vas a ver que todo es para mejor. ─Me voltee para verlo.

─Eso espero Austin, eso espero─. Lo abracé con más fuerza.

Mi hermano siempre estaba conmigo en las buenas, en las malas y en las peores. Él era un gran apoyo para mi, sin él, no sé que hubiera sido de mi vida.

─ ¿Están listos, chicos? ─Preguntó mi papá, entrando a la sala.

─Si papá. ─Le dijo Austin, formando una leve sonrisa en su rostro.

En eso, entra mi madre con los ojos hinchados de tanto llorar. Todos miramos la casa por última vez y nos fuimos.

─Adiós para siempre. ─Fue lo último que dije y cerré la puerta.

Habíamos llegado al aeropuerto, para abordar nuestro avión directo a Los Ángeles. Pasamos los boletos y entramos. Me acomode en mi asiento. Después de un momento el avión despegó, cerré los ojos y soñé con lugares desiertos y despedidas.

Al abrir los ojos, me di cuenta que al fin habíamos llegado a Los Ángeles, luego de 11 horas de vuelo más o menos. Estaba exhausta, y eso que había dormido todo el viaje, pero, a la vez, ansiosa por llegar pronto en donde sería nuestro nuevo hogar.

Hicimos un viaje de algunos minutos para llegar a donde viviríamos. Cuando llegamos a nuestro nuevo hogar, quedamos pasmados de lo enorme que era. Una casa preciosa que estaba rodeada de árboles y una piscina enorme. La casa era gigante. Tenía un cuarto de música, sabía que mi padre lo había hecho por mí; además, había un estudio de edición para mi hermano, ya que él estaba terminando sus estudios en cine, hacía cortos y largometrajes. Estaba todo perfectamente pensado. Mis padres eran muy detallistas.

─Es impresionante. ─Dijo mi hermano boquiabierto, recorriendo la casa con su mirada. ─no lo puedo creer ¿es un estudio de edición y grabación? ─Cerró los ojos y los abrió nuevamente, convenciéndose de que no era un sueño.

─ ¡Victoria! ─Me gritó. Llegue casi corriendo, al entrar quede maravillada. ─Aquí podemos grabar tu música y editar los vídeos. ─Suspiró. ─Podremos hacer todo. ─Le sonreí.

Mi papá nos miraba con satisfacción y alivio, creo que estaba nervioso de cómo íbamos a reaccionar. ─Me encanto el salón de música papá, gracias. ─Le dije mirándolo a los ojos. Él me dio una sonrisa tierna y me abrazó.

─Yo daría todo para que ustedes estén felices. ─Dijo mientras me abrasaba y miraba a mi hermano que estaba eufórico de tanta emoción.

Subimos a nuestros respectivos cuartos, deje mis maletas. Tendría que desempacar pero quería recorrer el lugar antes. Por lo que nos había dicho mi madre, en este lugar vivían varios famosos y gente importante, era un lugar cerrado para guardar la privacidad de quienes viven aquí.

Salí. Iba caminando, admirando este hermoso lugar. Mientras caminaba por un parque choque con alguien que al parecer iba igual de distraído que yo.

─Lo lamento, no te vi. ─Dijo una voz dulce y varonil. ─Déjame ayudarte. ─Me ayudo a levantarme del piso. ─Lo lamento, ¿te encuentras bien? ─Dijo mientras me observaba detenidamente.

Levante mi mirada ─Estoy bien, descuida no fue tu cul...pa. ─En ese momento lo mire fijamente a los ojos, eran de un café hermoso. Al ver que había quedado en estado de shock me sonrió, con esos perfectos labios color rosa.

─Eres Nick Jonas. ─Dije casi en un susurro. Me volvió a sonreír.

─Sí, el mismo. ¿Y tú eres? ─Me miraba directamente a los ojos haciendo que me sonrojara.

─ah, em, yo... eh... soy Victoria González, acabo de mudarme aquí. ─Estaba nerviosa y creo que se noto, toda mi vida había soñado con conocerlo y ahora estaba frente a mí.

─Victoria es un gusto conocerte. ─Dijo estirando su mano para saludarme. Yo la tome temerosa. ─Así que te acabas de mudar, bueno ¡Bienvenida! ─Dijo; mientras rascaba su nuca distraídamente.

En ese momento mi celular comenzó a sonar, lo tome y vi que era una amiga. ─Disculpa, debo contestar. ─asintió. Me aleje un poco y tome la llamada.

─¿Hola? ─Dije lo más calmada que pude.

─ ¡Tori! ¿Cómo estás? ¿Ya llegaste a L.A? ¿Cómo estuvo el viaje? ¿Agotador?

─Hey! Tranquila─. Reí. ─Estoy muy bien, si ya llegue a L.A, ¿el viaje?, bueno fue largo pero no importa y si muy agotador. ─Contesté; respondiendo todas sus preguntas.

─Me parece estupendo que ya hayas llegado. ─Sentí como sonreía a través del celular. ¿Es eso posible? ─ ¿qué te parece si paso por ti en un rato y salimos a recorrer Los Ángeles?

─Demi, el viaje fue largo y yo... ─No me dejo terminar lo que le decía.

─Vamos Tori, hace mucho que no nos vemos, no me puedes decir que no. ─¡Rayos! ¿Cómo era capaz de convencerme hasta por teléfono? ─Di que si. ─Dijo en modo de suplica.

Sonreí. ─Está bien. ─Escuche como gritaba de alegría a través del teléfono. ─Me vas a dejar sorda. ─Protesté.

─Paso por ti en una hora. Dijo, y por lo visto ya sabía donde vivía. ─Dile a Aus que también puede venir, si quiere ─Sabía que Aus tendría que ir con nosotras quisiera o no, Demi puede ser demasiado insistente en algunas ocasiones.

─Claro yo le digo, nos vemos Dem─. Me despedí, ya que tenia a Nick observando hace un buen rato.

─Claro, adiós─. Se despidió y me corto.

─Lo lamento, era una amiga.─Me disculpe, ya que lo había hecho esperar.

─Descuida, no hay problema ─. De verdad es un chico encantador, muy guapo. ─Te gustaría ir...─Comenzó a decir. Mis nervios se dispararon y lo único que pude hacer fue huir.

─Lo siento, no puedo, debo irme, tal vez en otra ocasión. ─Dije, realmente quisiera estar más tiempo con el pero no puedo, esperen que estoy pensando, el es famoso y lo acabo de conocer, ¡Ag! Estoy totalmente loca.

─Está bien, nos vemos Victoria ─Se despidió de mí y siguió su camino. Lo observe por unos segundos y desperté de ese hermoso sueño para volver a la realidad. Demi vendría por mí, así que mejor me apuraba.