La marca del semidiós

Lacy Grace

Ella estaba viendo la pelea de Cast y de Alexander, pero no alcanzo a ver el final de la pelea ya que escucho que le hablaban, se dio la vuelta y fue de dónde provenía su nombre, desgraciadamente los gritos venían del bosque, ella se adentró en el bosque, posiblemente alguien estaba herido y necesitaban ayuda. Siguió los sollozos y gritos. Cuando llego a una gran cueva. Escucho otro grito que decía su nombre.

-Lacy, Ayuda!!!- parecía ser la voz de Cast.

Lacy se apresuró más, llego al punto donde no se veía nada, todo estaba oscuro, luego sintió que alguien estaba atrás, volteo rápidamente y vio a un ser enorme, Lacy intento correr pero no pudo ya que la atraparon, sintió que la amarraban a un poste, le amarraron las manos y los pies y la ataron en un poste de madera, alcanzo a ver que había otro poste, se preguntaba para quien era. Después escucho un aullido de lobo, vio a otros dos seres un poco más pequeños que el primero que la atrapo, llevaban a alguien en sus brazo, le llego una gran sorpresa al ver que la persona que cargaban los seres era Ethan, parecía estar inconsciente esperaba que no estuviera muerto.

-¿Qué le hicieron?!?!- dijo Lacy forcejeando para desatarse del poste.

-Esta sedado- dijo el ser que cargaba a Ethan- Si, esta sedado-afirmo el otro ser que estaba al lado.

-Atenlo al poste- dijo el ser más grande. Tenía la voz de una mujer, pero la voz era áspera- Sédenla a ella también- dijo señalando a Lacy.

El que cargaba a Ethan lo ato al poste, mientras el otro tenía una jeringa, se acercaron a ella y le inyectaron el sedante en una pierna. Después empezó a ver borroso y cayó rendida. Cuando volvió a reaccionar vio que a Ethan ya se le había pasado el efecto del sedante. Ethan parecía estar asustado, se preguntaba si Cast era igual. Cast!!! Claro, se había olvidado de Cast, posiblemente ya esté buscándolos. Se escuchó una jauría de lobos muy cerca, talvez morirían en las garras de los lobos. A lo lejos se veían una manada de lobos con unos ojos tan amarillos que con solo verlos te quedaría paralizado. Levaban arrastrando a alguien, se preguntaba quien a más secuestraría esa noche. Había pasado tanto tiempo sedada que se hizo de noche. Los lobos se acercaron hasta llegar a la cueva, dejaron a la persona ahí tirada cerca de Ethan. Se dio cuenta que era un chico, tenía el pelo güero corto y despeinado, llevaba la camiseta del campamento mestizo, estaba lleno de barro como si hubiera tenía una lucha con el suelo. Se dio cuenta que Cast, a Lacy también le llamaba la atención Cast, posiblemente también estaba sedado porque no se movía para nada. Esperaba que no estuviera muerto, no soportaría ver a la persona que amaba estuviera muerto.

-¿Qué hicieron con él?!?!- grito Lacy desesperada.

-Tranquila cariño, sigue vivo, pero no por mucho tiempo al igual que tú y tu otro amigo- dijo la mujer de voz áspera.

Cast estaba en muy mal estado, tenía rasguños por toda la cara. Todo estaba muy oscuro para poder ver bien. Solo había una antorcha encendida en la cueva. Parecía que le hubieran leído la mente, porque después empezaron a encender más antorchas. Se llevó la peor sorpresa, los seres que los habían capturado solo tenían un ojo, eran Ciclopes.

-So..son Ciclopes!!!!- dijo Lacy, la ciclope más grande se acercó a ella- Claro que somos ciclopes niña estúpida- dijo la ciclope- Yo soy Ma Gasket y ellos son mis hijos Torque y Sump. Los dos ciclopes restantes eran muy parecidos, se podía decir que eran gemelos, los dos hicieron una reverencia.

-Ahh...ayuda-se quejó Cast, mostro su pierna, en su short se veía una gran mancha de sangre, Lacy grito lo más que pudo, no podía soportar ver a la persona que amaba en ese estado, necesitaba ayuda de inmediato.

-Oye, ¿No te eh visto antes?, te me haces conocida- dijo Ma Gasket.

-No sé, no creo, talvez conociste a mis padres.