1- Primer día

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-Nombre -se escucha una voz- Nombre -repitió esperando una respuesta- ¡Nombre!

-Sarah Ocampo.

-Edad- volvió a preguntar.

-16 años.

-Bien, firma acá y estará hecho - hice lo que me indicó aquella señora- Bueno, bienvenida a la Academia O' Connor

-Gracias- me levanté de la silla y me fui. Caminé por el pasillo de aquella nueva escuela, sin embargo no era la gran cosa.

Yo trabajé todo el año para poder quedar en esa escuela ya que el año anterior había dado la prueba y no entre, quedé de primera en la lista de espera, frustrante lo sé; es lo que siempre he soñado en un solo edificio, aunque los rumores que se escuchan no son siempre los mas acertados, a mi me gusta, así que le daré el beneficio de la duda.

Pero no, no seré la chica nueva de las típicas historias que no conoce a nadie y luego encuentra al chico malo del cual queda enamorada blah,blah,blah; Mi mejor amiga también quedó en esa escuela y conocemos a casi todo el salón en donde estudiaremos, así que no será problema.

Me monté en la camioneta de mi mamá y tuvimos una conversación normal por así decirlo. Llegamos a casa y como siempre cada quien por su lado, cada quien a su habitación. Me acosté en mi cama, encendí la televisión y tomé mi teléfono.

-Hija mañana es el primer día- subí la mirada de mi celular- ordena tus cosas.

-Si mamá- Ella se fue de la habitación y de inmediato le escribí a mi mejor amiga.

Sarah: Hola holaaa

Melissa: Heeeeey ¿Cómo estás?

Sarah: Emocionada por mañana ¿Cómo te preparas? Ya quiero que llegue mañana.

Melissa: Hablando de mañana...

Sarah: Mel si me dices que no vas a ir enserio necesitaré una muy buena excusa, es decir es el primer día, nueva escuela ¡Tienes que ir!

Melissa: Si bueno es que acabo de llegar de la playa y estaré cansada y bueno

Sarah: ¿Y bueno? ¡Que clase de excusa barata es esa! Soñamos con esto desde hace mucho tiempo.

Melissa: Lo se pero es estúpido nadie va el primer día

Sarah: Sabes si quieres ir ve si no haz lo que quieras

Melissa: Iré por ti.

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-Hija.

-Mamá.

-Despierta.

-Estoy despierta si no como estaría hablándote.

-Primer día de escuela- dijo cantando.

-¡Si!- dije celebrando sarcásticamente.

-El desayuno esta listo, vístete, nos vemos abajo.

Cuando mamá salió de la habitación decidí levantarme de la cama para poder ir a tomar una ducha. Busqué la toalla, entre al baño, me desvestí y entre al agua cali... ¡EL AGUA ESTÁ HELADA!

-¡MAMÁ!- empecé a gritar mientras me congelaba.

-¿Si mi amor?- respondió ella.

-¡Me estoy congelando, no hay agua caliente!- me quejé

-¿Que te golpeaste en la frente?- preguntó confundida.

-¡No!- dije estresada - ¡Que no hay agua caliente!

-¿Que no encuentras tus lentes? Mi tesoro no entiendo nada, no me gusta estar gritando mejor dime cuando termines de bañarte.

Suspiré y tomé valor para ducharme con agua totalmente fría a las 6:00 am. Terminé rápidamente para no tener que morir congelada y caminé hasta mi habitación para colocarme el uniforme de la nueva escuela donde estudiaría, no era tan feo pero definitivamente si dependiera de mi no lo usaría.

Luego de estar vestida bajé para así poder desayunar, mamá ya habia comenzado asi que me sente al lado de ella.

-¿Y papá?- le pregunté.

-Bueno él no durmió acá anoche, como pudiste darte cuenta, tenía trabajo hasta tarde y bueno... ya sabes, lo de siempre- dijo y me dio una sonrisa supuestamente reconfortante.Esto pasa seguido, mi padre es un buen hombre pero no se si es totalmente honesto, me cuesta pensar que engaña a mi mamá, aunque si unimos las piezas eso es lo que parece. Si a ver vamos eso no es asunto mío, si madre no es capaz de pensar eso ¿Por qué yo lo haría?

Terminamos de desayunar, ordenamos todo y fui al baño para peinarme y cepillarme los dientes. Todo resulto normal, nos montamos en la camioneta para así poder ir a mi nueva escuela, me preguntaba si Melissa tendría la decencia de venir o esto se convertiría en otra de sus falsas promesas; ella y yo somos amigas desde 4to grado, nos conocimos cuando empecé a estudiar en nuestro anterior colegio y desde ahí no nos separamos nunca. Revisé mi celular a ver si tenia señales de Mel pero nada, no me extrañaba la verdad, revisé su ultima conexión y decía 11:24pm, ella nunca revisaba su celular en la mañana así que aun tenia una pequeña esperanza.

Cada vez nos acercábamos más a ese nuevo lugar, empecé ponerme un poco nerviosa, que estúpida, es decir es mi cuarto colegio, esto ya es rutina; Si, se que cuatro colegios es demasiado pero me han cambiado por distintas razones y de verdad espero quedarme en este hasta que me gradúe.

Cuando menos lo pensaba pude ver el enorme edificio con el nombre Academia O'Connor, ya había entrado cuando fui a inscribirme, pero verlo lleno de gente es completamente diferente.

-Bueno Sarah, hemos llegado-dijo mamá interrumpiendo la música de la radio y mis pensamientos.

-Sep, bueno, que tengas un buen día nos vemos a la salida y..- fuí interrumpida.

-Suerte hija- se acercó a darme un beso enla frente.

-Estaré bien, hasta luego mamá- Me bajé y caminé calmadamente hasta la entrada detallando a las personas que estaban a mi alrededor, me paré justamente en el marco de la puerta principal y suspiré- Aquí vamos.

Academia O'ConnorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora