The amazing Spider-man: Tu eres mi motivo de vivir

Un mal dia

Peter empezó a seguir al Doctor Connors, por encima de los edificios, para que no lo viera con sus delirios de persecución que traía el Doctor Connors en estos momentos, protegía de manera muy alarmante el portafolios que sostenía con fuerza debajo del brazo. Lo estuvo siguiendo por varias cuadras, hasta llegar a un callejón, donde el Doctor Connors levanto una de las alcantarillas, con una fuerza que sorprendió a Peter de cómo lo levanto y más considerando que tenía un solo brazo, para desaparecer en la alcantarilla.

Peter se puso el traje de Spiderman, estaba sorprendido de que el Doctor Connors se hubiera metido q una alcantarilla y la misión de que estaba realizando le parecía de una películas de espías, cuando termino de ponerse el traje, decidió llevarse la cámara fotográfica por si tenía que tomar fotos de algo espectacular que sucediera en las alcantarillas, tal vez podría localizar al misterioso lagarto y sacar esas codiciadas fotografías, deseaba con todo el corazón que el doctor Connors no fuera el lagarto. Descendió lentamente hasta el entrar a las alcantarilla, de las dos veces que había peleado contra grandes villanos, prefería claramente enfrentarlos en una bodega dado a que no había nada que amenazara con destruir la ciudad, además seria misión casi imposible quitarse el mal olor del traje de spider-man. Siguió caminando pensando en que estaba perdiendo su tiempo, no había nada de interés en esa zona del drenaje, empezó a caminar por el ducto del drenaje, sufriendo en algunas ocasiones un golpe de agua de dudosa procedencia venir de alguno de los edificios cercanos y caerle encima, sí que había resultado un pésimo día y para el colmo se encontró con una maldita intercepción, para saber por dónde se había ido, sería complicado, tendría que esperarlo ahí empezó a lanzar varias telarañas a cada uno de los túneles para poder oír y sentir las vibraciones por si alguien usaba el túnel, se acostó sobre su telaraña y vio un mensaje de Gwen que le alegro el día

"ten cuidado, ven a la hora que sea para que me digas que pasa, te amo"

Peter colgó la cámara en una pared, se quitó la máscara para poder respirar tranquilamente, la máscara ya olía de forma espantosa dado a las terribles aguas que le cayeron encima olían horrible, se acostó sobre la telaraña y empezó a jugar con su celular. No sabía cuento tiempo el lagarto o el Doctor Connors aparecería caminando por las alcantarillas, no supo cuánto tiempo llevaba ahí después de pasar cientos de niveles de Candy Crush, cuando las telarañas empezaron a temblar y brinco algo asustado, se puso la máscara lo más rápido posible, para evitar que alguien descubriera su identidad secreta, en eso sintió que todas las cuerdas se movían, en eso vio cientos de lagartijas dirigiéndose hacia él, empezó a mover las telarañas para que se empezaran a caer las lagartijas para que no lo molestaran, su cabeza empezó a zumbar de manera muy fuerte, no sabía que podía haber de riesgoso en unas lagartijas molestosas.

Y pronto supo por qué su sentido quedar arácnido lo habia estado molestando, sintió que algo pesado le cayó encima y tomo una foto rápida jalando una de las telarañas, para que se disparara el flash de la cámara. El daile bugle tenía razón en hacerle casos de los rumores del monstro que estaba atacando en la ciudad de Nueva York, era un enorme hombre combinado con lagarto, una piel bastante pegajosa de color verde, apenas logro mover la cabeza para no ser mordido con la enorme mandíbula que este tenía, le soltó un golpe en la cara buscando quitárselo de encima, pero parecía que tenía una tonelada de peso encima y en eso vio que sus brazos estaban apresados por el lagarto podía ver los restos de su ropa como lo eran la bata y los pantalones, era bastante parecido al que tenía el Doctor Connors, Peter estaba asustado al ver los efectos secundarios de la formula, al final gano la parte animal dominando por completo al Doctor Connors.

-No sé quién eres.-Dijo con una voz que daba escalofríos y lo lleno de babas, mientras lo intentaba aplastar aprovechando su peso.-Pero no dejare que te metas en mis planes.