XI

45 3 1
                                    

Dejamos de ser niñatos para ser adultos y se nos van miles de sonrisas de la cara.

Las sabanas eran pentagramas que enredaban nuestras pieles dando fruto a un orgasmo que entonabas con nava por desgracia...

Y ahora brillo con más fuerza pues se que no hay nadie capaz de eclipsarme.

Y ya no se cómo volver a ponerme solo de pie, solo se que no hace falta que te pongas en mi piel.

La música me habla y esta es símil a tu voz.

Por ti puse mi mano en el fuego pero me acabé quemando.

La música es la única en la que puedo creer.

One Blood-Kronno

frasesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora