No recuerdan ni como sucedió, todo se fue dando, Laura y Diego se hablaban todo el tiempo, se amanecían con sus mensajes de texto, ya se habían dicho lo mucho que se gustaban, ella no podía creerlo, le gustaba a más no poder.
Las vacaciones terminaron y con ellas llegaron las desilusiones.
-No quiero que nadie se entere de lo nuestro- le dijo Diego.
- ¿Por qué no? No tiene nada de malo- dijo ella con un poco de amargura en su voz.
-Porque nos van a molestar y no quiero, a nadie le cuentes, ni a tus amigas- sentenció mirandola a los ojos.
-Está bien, pero más adelante lo contamos- dijo ella confundida ante su petición.
-Sí, dale- dijo, luego besó su mejillas y se fue.
Las horas y los recreos pasaban, ellos no tenían ni el más mínimo contacto, ella estaba cansada por la situación pero lo quería tanto como para decirle basta. ¿Tonta? Tal vez, pero lo quería demasiado para su gusto.
Era una persona difícil de llevar, pero él pasaba por momentos dolorosos, discusiones, familia ausente ... No es sencillo llevar adelante ese tipo de cosas, él era más débil de lo que cualquiera podría creer y ella lo sabía, se cubría con una coraza falsa que todos criticaban y se creían, nadie se acercaba lo suficiente para conocerlo, solo lo criticaban, era más fácil para el resto. Era de buen corazón, había sufrido demasiado, había perdido confianza en las personas por ese motivo reaccionaba como lo hacia pero ella nunca entenderá porqué le causó tanto daño.
Las discusiones comenzaron, ella quería hacerse valer, él la llenaba de mensajes que ella no respondía, rumores comenzaron a extenderse, él y otra chica involucrados, ella comenzaba a atar cabos, ya que esa podía ser una de las causas por las cuales él no quería que nadie supiera.
Comenzaron a hablar nuevamente, tenían una fiesta a la cual asistieron los dos, él le había dicho que moría por besarla pero ella estaba insegura, él con su caradurez fue a buscarla, quería ese beso pero ella se negó, algo adentro suyo le decía que no. Esa noche charlaron de muchas cosas y se rieron, pero la diversión y el bienestar duró poco.
En un acto de colación, al cual asistió Luna con su mejor amiga, se encontraron con él, aunque mantuvieron la distancia. Pasadas varias horas, ellas decidieron ir al baño y mientras iban se encontró con una imagen que nunca olvidará, Diego con la supuesta chica del rumor muy cerca, lejos de todos en el otro patio, casi a oscuras, su mirada se entristeció, había recibido varias advertencias sobre esto, sobre él, pero ella nunca escuchó y decidió confiar, una nueva desilusión, un corazón que había comenzado a destruirse y lo hizo por completo.
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Unidos por el dolor.
Teen FictionY allí se encontraban... Dos almas unidas por el dolor, ya no lo soportaban y ese amor que creció los sorprendió, cambiando sus vidas. ¿Alguno de los dos se lo esperaba? Claro que no, solo sucedió, y allí se encontraban, perdidos. ¿Enamorados? No lo...