Todos los caminos llevan a Roma

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A lo largo de Tantas horas por fin aterriza en el aeropuerto de Roma Fiumicino.

Alli le espera una guagua para turistas que la dejara cerca de donde será ahora y durante este tiempo su nuevo hogar.

Tras unas pocas horas de trayecto llego a su hostal.
Era un lugar normal, no tenia nada de lujos. Más bien era antiguo, llevado por una pareja de italianos bastante mayores, sobre unos 67 o 70 años quizas. Hablaban muy brusco y con la voz muy alzada. Puede ser que estuvieran discutiendo o simplemente estaban acostumbrados a hablar así.
Aylén al no dominar mucho el idioma no lo sabía.
Llevaba consigo un diccionario de italiano puesto que, era la unica forma de poder comunicarse.

Al llegar a l habitación se encontró con una cama con sábanas marrones. El piso era de madera y las paredes tenian azulejos de color beis. El baño era pequeño, pero para ella estaba bien. No iba a empezar a poner pegas. Se trataba de relajarse y desconectar. Mañana sería otra día y empezaría a ver Roma en sí. Hoy ha sido un día movido por lo que Aylén solo quiere tumbarse para descansar.

9:00

La joven de 22 años Hace poco Que se levanto para  preparse e ir de excursión por Roma. Aunque No se ha Levantado Demasiado Temprano Como para Darle tiempo a desayunar. Ya desayunará por los alrededores.

Rapidamente baja las escaleras del hostal y se dirije a la parada donde la guagua turística empezará su ruta.

Se direjen al Vaticano. Algo que un Aylén le desagrada Porque es Atea y Tiene SUS Argumentos párrafo sin Asistir Alli. Por lo que ella se queda en los alrededores y consigue ver una heladería.
Sin más dilación se acerca a comprarse un helado. Y de la nada, le dan un tirón y le roban el bolso.

-¡Mi bolso! ¡Me han robado el bolso!.-Grita asustada.

Aylén jadeante y sin aliento da su bolso por perdido, tenia Donde su Documentación, Móvil y su dinero. Seguido Acto muchacho ONU atraparle CONSIGUE y ella corre una por su bolso. 

-muchas gracias de verdad. Grazie tante- Dijo con voz desesperada.

El chico que recuperó su bolso la observo para ver si estaba bien. LUEGO asintió y se fue.

Aylén muy enfadada, miro con desprecio al ladrón que aún seguía en el suelo intentado levantarse. Al levantarse vieron las caras. Aylén al verle le escupió y le insultó. El ladrón la observó y se hechó a reir.

-Se Perfectamente Hablar español. Bilingue soja, hablo Italiano y Español.

-Me Da igual hables Que Lo. Mejor Para Mí si me entiendes. Lo que no entiendo es que haces robando una los Pobres Turistas como yo. ¿Te Falta Hace esquina robar párrafo? o simplemente quieres ser el mejor en tu Grupo de Amigos? -dijo con tono de repugnancia y burla.-Eres el tipo de Más Que estúpido que visto. Me das asco.

-¡Vaya! Menuda malcriada ... que lengua Tienes ¿eh ?. Para Ser muy amargada Estás turista. Ah, y por Cierto pretendía solitario robarte el Movil párrafo revenderlo Poder y ganarme la ONU dinero extra. Lo demás te lo pensaba Devolver. ¿A que no te parezco Ahora malo bronceado?

-Eres un chulo prepotente. Si quieres ganar dinero ponte a trabajar y deja de robar a personas que ganan dinero dignamente-.Sus palabras ya no eran de enfado, eran de indignación y decepción. No paraba de preguntarse como puede haber gente así y peor. Que robes por necesidad para dar de comer a tus hijos, a tu familia, lo puede llegar a comprender aunque sigue estando mal, pero el alimento es una necesidad vital. Pero que robes por puro vicio... no lo entendía.

-¿Ya te vas?. Nos veremos pronto bella bambina.

Sus palabras se quedaron en el aire. Aylén se alejaba y el ladrón no paraba de mirarla.

-Menudo susto...-pensó. 
Miró todas sus pertenencias. Necesitaba contarselo a alguién para que la apoyara con sus palabras, pero no queria asustar a sus padres así que decidió quedarse callada.
Decidió comprarse el dichoso helado que casi le cuesta su maldito bolso. Probablemente fuera por el susto, pero ha sido el mejor helado de chocolate que se ha comido.

También fue a una pizzeria que estaba para chuparse los dedos. Si viviera ahí se pondría como una auténtica foca.
Se ha hecho un miniturismo ella sola, es hora de volver con los demás... ¿Y la guagua?. Menudo día.
La guagua se había ido sin ella. Su mini turismo le costó el único medio seguro que tenía para ir y venir a su hostal.

-Me la estás devolviendo por no entrar al Vaticano ¿no?. Te tendrás que estar riendo de mí lo que no está escrito- Susurró mirando al cielo.

Aylén decidió indagar por cuenta propi buscando y buscando como llegar a su hostal e intentado preguntar a italianos como puede llegar. Pero es una misión imposible. Son las 17:00 de la tarde y no queda nada para que anochezca. Sólo le falta llorar porque desesperada ya lo está hace bastante.

Una pareja de italianos le dieron un mapa para que se intentase ubicar, aunque era todo un poco dificil. Caminaba sin dejar de mirar el mapa, ya son las 17:30. Debe darse prisa en encontrar una referencia que la lleve a su nuevo hogar. De repente se tropieza con alguién.

-¡Uy! excuse me

-Que simpática te has vuelto

Esa voz le sonaba. Alzó la vista y vió ese pelo castaño, esos ojos verdes, esos dientes blancos perfectamente alineados, esa sudadera roja...¿de qué le suena tanto?... ¡El ladrón de su bolso!

-Mira que hay gente en Italia para toparme con el mismo pelmazo. ¿Me dejas pasar, por favor?. Gracias.

-Espero que ese carácter solo sea porque estas perdida y no porque no me puedas soportar-Sonrió a la vez que arqueó las cejas.

-¿Quién te ha dicho que estoy perdida?. ¿Ves? Es que aparte de cleptómano te las das de listo.

-No me lo ha dicho nadie, me lo supuse porque tienes el mapa alrevés.

Aylén se sonroja. Menudo corte le acaba de dar.

-Bueno tal vez me haya perdido un poquito. Pero encontraré el camino. Tu mantente distante no vaya a ser que me robes el movil.

El ladrón soltó una caracajada. Le parecía tan graciosa y tan arisca su forma de hablar que a la vez le hacia una chica interesante aunque muy predecible.

-Dejame ayudarte. Será mi forma de pedirte perdón por el incidente de antes. Si no me dejas te persiguiré y de verdad te robaré todo lo que llevas en ese bolso marrón. ¿Capicchi?.

-No me fio de ti.

-Soy el unico que ahora mísmo puede ayudarte. Hablamos el mismo idioma, vivo en Italia, y ya me conoces. Empezemos de cero. Pasaré de ser un ladrón chalao a un nuevo y educado guía. ¿Trato?

Aylen desconfiaba mucho. Al fin y al cabo era el ladrón que le intentó robar. Pero era su única esperanza.

-Bueno... a mí con tal de que me lleves al hostal me basta. Es el hostal la bruschetta. ¿Sabes donde queda?.

-No tengo ni idea. Pero amore de pelo rubio teñido mío, todos los caminos llevan a Roma. Esto puede ser el comienzo de una gran amistad.

-Si ya empezamos con motes y con comienzos mal vamos. Tu encargarte de llevarme al hostal, que Roma no se construyó en un día.

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⏰ Última actualización: Aug 21, 2015 ⏰

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