La corriente.

14 3 2
                                    

Estoy corriendo con mucha desesperación y urgencia, la busco pero sólo hay árboles. Tengo la sensación de que los árboles me están rodeando sin dejarme pasar.

Grito para que me ayuden e ir en su busca, pero de mi no sale ningún sonido. En cambio si escucho como me llama en busca de ayuda sin yo poder hacer nada.

Lo intento una y otra vez, cuando ya tengo la garganta desgarrada me rindo y continuo corriendo.

Escucho el agua correr, el río.

El sonido de agua se mezcla con los gritos de socorro, mi corazón va tan rápido que duele.

─Mamá ayúdanos─ susurro apoyada en un árbol, ya exhausta de tanto esfuerzo.

Los gritos cesan, el silencio es total. Tal es el silencio que escucho latir a mi corazón, pienso que se puede escuchar a tres metros o más de distancia.

Me siento con las rodillas pegadas a mí, dejando correr a mis lágrimas libremente.

─Todo ha sido mi culpa, lo siento. Perdóname.─ grito al aire mirando hacia el cielo.

Estaba temblando, sentía un frío sudor recorrer mi espalda.

Me fijé en mi entrono, y me di cuenta que Lisa me miraba bastante asustada.

─Tranquila, ha sido una pesadilla.─ le dije para calmarla. Tenía la voz ronca, había gritado mientras dormía.

─Pero es que estabas gritando y llorando, los papás no sé si se han despertado. ¿Los llamo?─ se bajó de su cama y fue a abrir la puerta. Yo la paré bajándome de la cama.

Le cogí de la mano y la volví a llevar a la cama.

─Vuélvete a dormir, que ya estoy mejor. Si eso ya voy a hablar con ellos.─ dije dándole un beso en la frente. No había necesidad de despertarlos, estaban reventados del viaje.

Yo intenté volver a dormir pero no me fue posible.

Salí de forma silenciosa de la habitación, me dirigí hacia el cuarto de baño.

Me mojé la cara e intenté no pensar en la pesadilla.

Hacía tiempo que no la tenía, pero las buenas costumbres no se pierden, ¿no?

Cuando me sentí más tranquila me fui al salón, más concretamente al sofá.

Este estaba al lado de la ventana, con cuidado retiré unos centímetros la cortina. El sol estaba en su pleno apogeo, era bastante tarde.

Sabía que por culpa de la pesadilla no iba a poder seguir durmiendo.

Me comencé a agobiar. Sentía claustrofobia en este apartamento. Aunque en realidad era bastante grande.

Por lo que planeé una pequeña escapada. Volví silenciosamente a mi habitación, cogí y me puse lo que me iba a hacer falta.

Busqué las llaves del apartamento, y las encontré en la mesa de la cocina.

Metí las cosas en mi mochila, pero antes saqué el protector especial de la mochila.

El protector, nos medio protegía. Ya que nosotros al tener pocas cantidades de melanina, el sol nos causaba quemadoras en la piel, si estabas más de una hora y media sin protector alguno podrías tener una quemadura de segundo grado en las zonas expuestas al sol.

Y por todo esto me tenía que llevar el protector si o si.

Me lo unté en toda la piel que no estaba cubierta por ropa.

Una vez terminé salí, pero dejé una nota en la cocina por si no volvía antes de que se despertaran.

Corrí para coger impulso y volar.

No solía volar, mis padres no me dejaban pero algunas mañanas me escapaba y disfrutaba del placer que me hacia volar.

Sentir el viento en la cara y ver desde arriba como el sol alumbraba las calles dando color a la ciudad, me encantaba. Era precioso.

Una vez despegué y ya estaba suficientemente alto, me fui en dirección a donde por la noche había visto el precioso paisaje desde el coche.

El verde me encantaba, era mi color favorito. Y aquí podía observar como todo estaba salpicado en múltiples tonos de ese color.

Los caminos no eran tan grandes como los de donde yo vivía, las casitas estaban alejadas unas de otras pero por medio habían campos de cultivo, cada uno tenía un color distinto.

La vida de ese pueblo era muy humilde, y eso me encantaba. Yo siempre imaginé vivir en un pueblecito, donde crear una familia y los niños corriendo por todo el campo, sin ese aire tan contaminado de la ciudad. Mis hijos podrían volar libremente y disfrutar al igual que yo del paisaje tanto de noche como de día.

Aunque la vida en el campo no es tan fácil como en las ciudades, pero aprendería.

Seguí volando por los al rededores, no había ni un alma por las calles.

Algo se me hacía familiar.

Me fui hacia el rio y aterricé acerca del rio. Dejé la mochila en el suelo, me quité la ropa y me quedé en bikini.

Puse la mirada en el cielo y vi que el sol ya no estaba tan alto pero serían las 4, me daba tiempo de refrescarme y de volver al apartamento.

Me volví a echar protector. Y me zambullí en el río.

El agua ahora estaba unos grados más caliente, pero estaba perfecta.

La corriente del río en este pueblo iba muy despacio.

Me puse a flotar intentando dejar la mente en blanco. Cerré los ojos y me concentré en como el agua me llevaba lentamente.

El sonido de la naturaleza me relajó. Los pájaros piando, las hojas de los arboles moviéndose por los soplos del viento, el sonido del agua moviéndose poco a poco...

Estaba casi durmiéndome, hasta que noté que la corriente empezó a ser más fuerte y el agua me tragaba hacia dentro.

Intenté salir fuera, pero el agua parecía que me hubiera cogido las piernas. Sentía como si tuviera unas pesas atadas a los tobillos.

Tragaba agua y los ojos comenzaban a picarme. Seguí nadando, los brazos ya los tenía muy cansados pero no me rendí.

La corriente empezó a correr mucho más rápido, no podía respirar. Sentía que ese iba a ser mi final.

Al final no puede más, me rendí y el agua me tragó. Yo seguía con los ojos abiertos y dentro del agua revuelta creí ver a mi hermana.

Extendí los brazos para poderla coger y grité gastando el poco oxigeno que me quedaba─ ¡Jane perdóname!

Y todo se volvió negro.

-----------------------------
A partir de este capítulo empieza lo mejor *aplausos*

Comentar y darle a la estrellita, plz.

Comentar y decirme que os va pareciendo la historia que no me decís nada. Jummm

¡Gracias por pasaros por aquí!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 25, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

In other words, in other world. (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora