Capítulo 5

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Desperté gracias a David que llamaba a Jack para alimentarlo, el animal me miró y movió su cola.

-¿quieres que te alimente yo? - le pregunté y bajó de la cama - okey

Bajé y vi a David vestido y con la caja de alimento para perros.

-le daré yo - sonreí - ¿irás al colegio de todas formas?

-Grace irá, no quiero que se quede sola

-David, no haz dormido - reí - quédate en casa, Grace estará bien... o puedes invitarla a venir sin que sus padres lo sepan

-Que rebelde - sonrió - pero no creo que quiera hacerlo

-pregúntale - encogí mis hombros

Se alejó de la cocina con su celular en la mano. Le serví el alimento a Jack y luego me hice desayuno.

-dijo que si - sonrió

-okey, ve a despertar a papá para que desayune

-pero tengo que ir por Grace ahora - dijo

-sólo te tomará segundos - rodé mis ojos - ve

Mi hermano desapareció de la cocina y seguí preparando el desayuno, le envié un mensaje a Luce para que no me buscara en la hora libre y ella se enfadó un poco pero luego me dijo que vendría por mi en la tarde.

-Sophia, necesito hacer unas compras - dijo papá mientras desayunabamos - ¿me podrías acompañar?

-claro - dije - ¿que cosas comprarás?

-haré una lista - tomó una hoja y un lápiz que habían en un mueble cerca de él.

David llegó con Grace y se unieron a desayunar.

-iré con Sophia a comprar - dijo papá - nada de hacer cosas de grandes, no quiero llevarme una sorpresa

-papá! - dijo David avergonzado

Reí por la expresión que tenían David y Grace, no podían estar más avergonzados de lo que ya estaban pero aún así papá siguió serio.

-estoy hablando en serio - asintió él

David rodó sus ojos y siguió desayunando.
Cuando terminamos ayudé a papá a limpiar la casa y jugué con Jack, corríamos por los grandes prados que habían. Eso era lo que amaba de este lugar, sólo eramos nosotros y la primera casa estaba a casi 2 kilómetros.
Papá advirtió nuevamente a David cuando fuimos a comprar, puse música en el auto y fui mirando por la ventana, acá todo era tan pasivo y parecía perfecto pero aún así no me sentía completa aquí.
Al llegar a la ciudad nos dirigimos a comprar fertilizantes para papá y mientras hablaba con el vendedor, comencé a mirar pintura, mi habitación era blanca, desde que había llegado a vivir a Carolina del Norte no había querido hacer ningún cambio a esta ya que pensaba que sólo serían unos cortos meses pero no ha sido así, ya llevo dos años viviendo aquí y necesitaba hacer un cambio en casa.
Los colores o eran muy llamativos o no me gustaban, revise casi tres veces la revista de colores y por ninguno me decidía.

-¿que haces? - preguntó papá

-creo que es tiempo de ponerle color a mi habitación - sonreí

Él al escucharme sonrió y se puso a ver los colores junto a mi. Juntos elegimos un color lila pálido.

-supongo que ya estás superando un poco la pérdida - me miró mientras conducía

-no lo creo - suspire - no creo que algún día pueda hacerlo.

Él sólo se quedó en silencio y siguió conduciendo, se dirigió al supermercado y me entregó una gran lista mientras el iba por un carro. Cuando llegó a mi lado comenzamos a buscar los productos.

-aún no me acostumbro a encontrar las cosas - dijo

-¿como?

-aun no sé en que lugares se encuentran los productos - sonrió - allá en Nueva York conocía todos los pasillos y me era fácil encontrar los productos

-oh, entiendo - sonreí - luego te acostumbrarás

-claro - asintió - ¿podrías ir por el aceite de oliva?

-¿donde está? - hice una mueca

-no lo sé - rió - intenta encontrarlo, yo iré por harina

-okey - sonreí

Me aleje de él y comencé a buscar la sección de aceites, papá tenía razón, antes encontrábamos fácilmente los productos al ir a comprar y sobre todo cuando íbamos con mamá, ella se sabía todos los pasillos.

-disculpa - le dije a un guardia - ¿sabes donde están los aceites?

-¿que tipo de aceites? - sonrió

-de cocina - levanté una ceja

-claro - rió - al fondo a la izquierda, pasillo 6

-gracias - dije y me aleje de él

Fui hacia el fondo y luego giré hacia la izquierda, busqué el pasillo 6 y como el guardia había dicho, ahí estaban.
Busqué entre todos los que estaban el de oliva y mientras lo hacía, sentí que alguien me miraba. Giré mi cabeza para ver quien era y me encontré con el mismo chico de la noche pasada.

-¿me estás siguiendo? - pregunté

-ya quisieras - sonrió. Una hermosa sonrisa por cierto

-claro - dije sarcástica y él rió

-entonces, ¿buscas aceite de oliva? - se acercó a mi

-¿como lo sabes? - entre cerré mis ojos

-lo adivine - encogió sus hombros - además, has estado ignorando los otros

-¿hace cuanto me mirabas? - pregunté

-desde que te vi en este pasillo

-¿eres alguna clase de psicópata? - reí

-no - frunció el ceño - es sólo que no estaba seguro de que fueras la chica de la noche pasada, tu ropa ya no es negra

Rodé mis ojos y tomé el aceite de oliva.

-por cierto - dijo - has tomado un aceite que ya está vencido

frunci el ceño y vi la fecha de vencimiento, efectivamente lo estaba.

-¿como lo sabías? - pregunté sorprendida y confundida a la vez

-acababa de tomar ese aceite, pero soy un poco menos despistado que tu - encogió sus hombros

-bueno - levanté mis cejas - supongo que debo decir gracias

-da igual - volvió a encoger sus hombros

Asentí lentamente y me aleje de él, busqué a papá y al encontrarlo le entregué el aceite. Seguimos comprando las demás cosas hablando sobre diferentes asuntos.

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Deep loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora