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t r e s

Arrastre mis maletas por el aeropuerto- además de las que tenía colgadas en mi hombro- hasta el auto de Kylie.

- debes estar bromeando. -ella negó aun con la vista en la carretera. -¡Kylie eso es genial! Felicidades.

- si bueno eres la primera en saberlo. -se encogió de hombros y me dirigió una rápida mirada antes de volver su vista al frente. -no quiero que le digas ninguna palabra a Jake.

- claro que no, soy una tumba lo juro. -le sonreí. - ¿Cuánto tienes?

- un mes. Pero bueno luego habrá tiempo para hablar sobre mi embarazo ahora tu cuéntame cómo te fue en Londres.

- Kylie te lo dije todo por teléfono, enserio todo.

- ¿no hubo algún amor?-movió sus cejas rápidamente.

- huum... no, no hubo nada serio.

- nada serio? Ósea que si hubo algo. -puse los ojos en blanco.

- ya sabes algunas citas pero nada más.

- estuviste dos años en Londres y solo tuviste citas? -pregunto incrédula. -que aburrida tu vida amiga.

- tu definitivamente estás loca.

Ambas reímos, Kylie manejo hasta el que sería mi nuevo departamento -que arrendaría obviamente.- era lindo sencillo, cómodo, perfecto. Sería la primera vez que viviría completamente solo, vivi hasta los 19 años con mis padres y luego me fui a vivir con Justin por tres años hasta que me fui, las primeras semanas fueron terribles lo extrañaba tanto y no digo que en Londres no lo hubiera extrañado pero siento que esa oportunidad me ayudo quizás a olvidarlo un poco mas no completamente.

Es difícil olvidar por completo a alguien que significado tanto en tu vida. y que ahora probablemente tu para el ya no seas nadie porque aunque no quisiera admitirlo yo se que el siempre será el amor de mi vida.

Me fui a Londres cuando me ofrecieron un trabajo viví con una prima en su departamento pero ya era hora de volver.

- ¿segura que estarás bien aquí sola? -pregunto como por décima vez.

- si Kylie deberías de dejar de preocuparte tanto. No soy una niña pequeña.

- lo sé, pero de todas formas debes saber que si te sientes muy sola puedes irte a mi casa.

- gracias. Pero estoy segura que no estaría cómoda en una casa contigo junto a Jake asiendo de mal tercio. -rei. -Escuchándolos por la noche... -Negué con la cabeza.- no definitivamente no. Me traumaría.

- eres una exagerada tu hacias lo mismo con Justin.

Un incómodo silencio nos envolvió a ambas, vale, era raro que Justin saliera a la conversación luego de haber hablado de él por más de un año.

- huum... bueno si eso era antes. -me encogí de hombros tratando de quitarle importancia.

- bueno amiga yo ya me voy ¿si?-beso mi mejilla. -ya sabes cualquier cosa tu solo llámame.