Proyecto A.2

Capítulo 1

*editado

Razón de mi existencia: Ni idea.

Me persiguen.

Hay tres tipos altos siguiéndome. Lo peor es que no tengo a donde ir. Mis padres murieron cuando yo era pequeña, bueno eso es lo que yo creo, quizá me dejaron botada por ahí porque desde que tengo memoria recuerdo de que vivía con ratas y gatos en una casa abandonada. No sé a que vine a este mundo, no sé a donde ir y no sé porque estos hombres me persiguen. Pero algo si sé... no me atraparan tan fácil, voy a luchar porque mi vida depende de eso.

—¡¿Quieres morir?!— grita uno de los hombres.

— ¿ahora mismo? ¡No!— digo corriendo.

—¡pues ahora mismo morirás!— dice otro.

Me voy por la carretera que lleva al central Park. Entro en el césped verde y húmedo, las estrellas brillan más que nunca y hay luna llena. Sigo corriendo, no puedo detenerme, lo más raro es que no tengo hambre ni sed. Nunca he tenido. Estos hombres son diferentes a mi, paran cada 5 minutos a tomar agua y comer. Eso me da ventaja. Miro hacia atrás y no veo a ninguno de los tres ¿se habrán rendido? Nah, llevan 3 meses siguiéndome.

Paro un poco para tomar aire. De repente una mano me tapa la boca, de todos modos sería inútil gritar en este lugar solitario. Otra mano me golpea en el estómago y caigo al suelo. Dos manos me amarran las manos y los pies.

— Ay señor, ¿Qué es lo que quieren de mi, monstruos?- hablo en lo que puedo ya que la mano sigue tapándome la boca.

— Este proyecto fue un éxito - dice un hombre. ¿Qué proyecto? —La llevaremos para allá de inmediato... suelta a la niña, Mark—me desamarran las manos y me levanto, como puedo, lista para pelear, aunque tengo los pies amarrados todavía.

— Ni sueñen con qué...

Antes de que pueda terminar de hablar "Mark" dispara y cae una flecha en mi brazo derecho. En dos segundos siento los efectos. Cierro mis ojos y caigo otra vez.

[...]

—¡el proyecto A.2 ha sido todo un éxito! — dice una voz desconocida— cuando despierte le explicaremos todo y luego la mandaremos a otra prueba, esto no puede terminar aquí, debemos seguir probando... Qué tan eficiente es el... .— abro los ojos de golpe ¿de qué rayos habla este señor? —Hola, buenos días — saluda el hombre de cabello blanco y ojos azules, veo que no es la única persona en la habitación— soy el doctor Edward... Quizás tienes muchas dudas, yo puedo-

— ¿Quiénes son ustedes? ¿Qué hago aquí?¿Por qué me siguieron? y ¿Qué es eso de proyecto A.2? — hablo hasta quedar sin aliento. El hombre, Edward, me mira con una sonrisa despreocupada.

— Primero cálmate, Segundo te explicaré todo pero primero— se da vuelta y le habla al chico detrás de él—Christopher, llama a Jorge y a Sara.

— Sí, señor— responde y luego sale de la sala.

— Anahí— dice el Doctor ¿Anahí?— antes nacer, hicimos que llegaran a ti unos elementos químicos que, con el tiempo, cuando nacieras, causarían efecto... Te envíamos a otra ciudad para que pudieras crecer sin problemas, lejos del laboratorio, etc. Como te dije, el elemento causaría efecto, podía ser positivo o negativo y según las pruebas fue positivo, haz desarrollado cosas anormales y eso es algo... Buenísimo— No entiendo nada de nada— Ah y tus padres vienen en camino.

—¿Pa-padres? Yo no tengo padres— ni nadie cercano a mí—y ¿Qué es eso de "Anahí"?— la señora de la esquina me llamaba huérfanita; el hombre de la coca cola supergirl; yo me llamaba niña y hasta ahí todo.

—Anahí es tu nombre y sí, tienes padres, quizás te-

—No fui a la escuela— aprendí a leer y a escribir gracias a la señora de la esquina y a uno libros que me dio — Pero sé que "padres" son personas que se hacen cargo de sus hijos... Ellos no se preocuparon por mí, estuve sola durante mucho tiempo, viviendo con ratas y en lugares inhumanos ¿Ellos dónde estaban? De seguro comiendo y disfrutando de la vida mientras yo intentaba sobrevivir, definitivamente ellos no son mis padres...-

Puedo ver un poco preocupación en los ojos de Edward. Además me mira serio. Muy serio. De repente entra un hombre y una mujer a la sala, me miran durante segundos que parecen horas, parecieran mirarme con compasión, ternura y me siento incómoda. Ellos no significan nada para mí.

Edward abre la boca para hablar:

— Anahí esta presentando los mismos síntomas que proyecto A.1. No sé que...

— ¿Qué es proyecto A.1?— le interrumpo ignorando a las dos personas que me miran, ¿Por qué hablan de cosas tan raras?

Edward suspira y sabe que no tiene más remedio que explicarme — Proyecto A.1 era un chico. Le inyectamos lo mismo que a ti pero lamentablemente él no sobrevivió. Murió a los 5 años... Por eso decidimos hacer un segundo proyecto— iba a interrumpirlo pero fue más rápido—¡Qué por cierto fue todo un éxito! Felicidades Anahí... Sigue así. Bueno ahora te dejo con tus padres, Jorge y Sara. - Edward se levanta de su silla, agarra unos papeles y sale de la habitación casi corriendo junto con Christopher.

— Anahí — la mujer, que tiene un semblante de tristeza, se acerca a mí— ¿cómo te sientes, hija?

La miro con el ceño fruncido, ¿Quién se cree que es? No tiene derecho a llamarme hija.

— No tengo nada que hablar contigo
— me levanto de la cama en la que había estado sentada y me doy cuenta de que estoy con un traje plateado.¿Qué es esto?

— Anahí— dice el hombre— Intenta hablar con nosotros, cuéntanos que sientes.

¿y qué es lo que siento? — Me siento incómoda, no los conozco y al pensar en ustedes sólo puedo sentir rechazo
— ignorando las lágrimas de la mujer y la mirada seria del hombre, camino hacia el ventanal, para ver la distancia entre el piso este y el suelo.
No es mucho— este pues... Hasta nunca.

Retrocedo algunos pasos y luego corro hacia la ventana protegiendo mi cabeza con los brazos y salto. Rompo el vidrio y caigo al suelo, rodando por este.

— ¡Proyecto A.2!—grita un hombre—¡Activen las alarmas!

Me levanto y miro mis brazos, no tengo ningún rasguño. Miro hacia el gran edificio.

— ¡No me atraparán! — grito a la pareja asombrada que está en la ventana— ¡No volverán a usarme!

Necesito encontrar respuestas y lo haré.