-¡Deja de gritarme, Mario! -Dije al borde del llanto-.
-Es que no sabes hacer nada bien.-Se exaltó-.
-Y tú no puedes hablar sin herir a otros.
-¿Ahora tienes sentimientos? No olvido que querías asesinar a mí hijo.
-¡Ahora no quiero asesinarlo! Sólo lo quiero fuera de mi vida igual que a t... ¡Mario! ¡El bebé se mue...ve!
Había pasado un mes desde que Mario y yo vivíamos juntos, nos habíamos visto en la necesidad de contratar a alguien pues yo no sabía lavar, ni cocinar,... Ni asear, realmente no sabía hacer mucho. Y Mario vivía estresado todo el tiempo. Ahora el bebé está por cumplir cuatro meses de gestación.Mario y yo habíamos cambiado, desde el beso en el auto no nos dábamos el mínimo afecto, no abrazos, no besos, ni siquiera un apretón de manos. Él ya no me buscaba ni me recordaba que me amaba, era distante. Era fastidio puro. Era como vivir con alguien que grita todo el tiempo, y cuando no lo hace mantiene su tono frío y seco. Ya ni siquiera compartíamos habitación, yo me quedaba en la principal y Mario dormía en la habitación para el servicio, la cual no necesitábamos. Era un pequeño departamento con dos habitaciones (una más lujosa que otra, obviamente) un baño en cada una de estas, una cocina, un comedor, una sala de estar y un pequeño balcón. Sin duda alguna este sería un lugar muy pequeño para el bebé cuando empezara a crecer. Mario no sabe que yo quiero al bebé, pero hasta el momento él ha insistido en esperar su nacimiento para darlo en adopción y finalmente que cada uno siguiera el estilo de vida que gustara seguir. Me sorprende la actitud de Mario, él era el más entusiasmado con la llegada de bebé, supongo que su odio hacia mí es más grande. He pensado en conseguir un empleo en las oficinas de mi tía Jennifer. Después juntar un poco de dinero para vivir bebé y yo. Sí, sería lo correcto.
-Ven, siente.- Tomé su mano y la puse en mi abultado vientre. Él dió un respingo-.
-¿Cuando sabremos su sexo?
-Tengo cita mañana, realmente no me importa si vienes o no.- Ahí estaba la insoportable _____.
-No, no iré. Tengo una junta muy importante y...
-No me cuentes tu vida, Alberto. El bebé no te necesita, puedes marcharte cuando gustes, la puerta es muy grande y creo que tus maletas son lo suficientem...
-¿Y qué harías tú sola, eh? -Rió con ironía-. Eres una caprichosa, estás acostumbrada a la buena vida. No sabes hacer absolutamente nada, no sirves ni para ser madre...
-Dime que no dijiste eso, Alberto. ¡Lárgate, si mal no lo recuerdo ésta es mi casa!
-Casa a la que yo mantengo, y si vives aquí vives en mis reglas.
-¡No soy tu puta criada! Me voy, no te soporto. Hubiese preferido que el padre de mi hijo fuese hasta un vago, todos son mejores que tú.
-Tú no te vas... En todo caso, debería irme yo.- ¡MALDITO BIPOLAR!-. Lo siento, preciosa. El trabajo me tiene estresado, el bebé, tú, tus malditos achaques. En 5 meses nace el bebé, y aún no puedo asimilarlo.
-Mi hijo no necesita de un mediocre que se haga llamar su padre...
-Lo llamaste 'mi hijo'. -Respondió sorprendido-.
-Es lo que es, ¿no? Él no morirá, vivirá conmigo, y aunque tú ya no lo quieras yo sí y...
-Jamás vuelvas a decir que no lo quiero, lo amo tanto como a ti.
Mis ojos se abrieron hasta el tope y sentí a Mario tomar mi boca. Era tan dulce, si no fuese como besar a mí hermano realmente estaría disfrutando esto. ¿Por qué no puedo quererte, Bau?
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It's Always Been You.
Fanfiction____ Corona, desde pequeña su mejor amigo, Mario Bautista, a cuidado de ella. Cubriéndola en todas sus "inocentes" travesuras. Jamás imaginó que el por qué de sus cuidados se debían a que "Bau" estaba enamorado de ella desde que ambos tenían memori...