Entre rápidamente a su casa, la puerta estaba entreabierta y no había rastro de Julian, corrí a su habitación y estaba ahí, llorando en un rincón con una botella en la mano.
"Dios, Jules que te paso?"
"Mi padre, es el culpable...no quiero arreglar su nudo..."
No entendí nada de lo que decía excepto que su padre tenia que ver con esto, así que me senté en el piso junto a el y me limite a abrazarlo, el comenzó a llorar contra mi pecho. Me rompía el corazón verlo así, de hecho en ese momento me di cuenta por primera vez en mi vida que tenia corazón y no una piedra.
Al otro día me levante de la cama y observe un techo pintado de estridentes colores, cai en la cuenta de que me quede dormida en su casa, el estaba junto a mi con los ojos hinchados de tanto llorar, me levante, me prepare un te y simplemente espere a que despertara para que me contara lo que habia pasado, estaba muy nerviosa y queria saberlo ahora, pero no iba a despertarlo, el necesitaba descansar.