Narra Laura:
Estaba golpeteando mi pupitre con mi lápiz esperando a que toque el timbre para salir de este infierno.
-Señorita Clark, podría dejar de hacer ruido imcomoda a la clase.
-OK - Dije distraídamente.
Inmediatamente empecé a golpear el suelo con mi pie.
-Señorita Cla...
La maestra no terminó de llamarme la antención ya que sonó el glorioso timbre, y lo único que pronuncie antes de salir fue:
-¡Libertad!
Y salí de esa cárcel estudiantil.
***
Ya había salido de la escuela y me encontraba sentada en una banca del parque esperando a mi hermana.
-Donde está esa Idiota.. - Susurré
Ya había pasado una hora, y estaba convencida de que la idio... digo Emma no llegaría.
No es que le tenga rencor ni nada por el estilo, en realidad, la quiero demasiado, solo que no se lo demuestro muy seguido...
Revisé mis bolsillos, y no encontré ni un puto centavo.
Empezé a caminar en dirección a mi casa y vi que de lejos un chico muy lindo se acercaba.
El chico se tropezó y se abalanzó sobre mí. Con un rápido movimiento lo esquivé, el chico se cayó de cara y le dije:
-Lo siento, son una chica ANTI-CLICHÉ - y seguí mi camino.
***
Llegué a mi casa y la idiota de Emma no estaba y me rugía el estómago asi que decidí hacer mi almuerzo.
Dejé todo en la sartén y fuí a leer Divergente, me coloqué mis audífonos, y me desconecté de ese mundo, y sí, soy la chica rara que lee con audífonos.
Luego de media hora sentí un olor raro.
-Huele a..¿quemado?...¿pero qué?...¡¡La comida!!
Salí corriendo hacia las escaleras y cuando entre a la cocina, estaba toda incendiada, salí a la calle, habían vecinos al rededor y se escuchaba la sirena del camión de bomberos y creo que una de una patrulla de oficiales.
-Tengo hambre... - Dije haciendo un puchero.
Narra Emma:
Corrí hacia mi casa a buscar a Laura.
-Señorita, no puede pasar - Dijo el oficial de policía.
-¡Acaso no ves que yo soy la dueña de esta casa! ¡Dejáme pasar! ¡Gorila descerebrado!
Pero no me dejaron entrar. El policía me ignoro completamente. Iba a protestar pero escuche que alguien me llamaba, volteé y era ¡Laura!.
-¡Laura! ¡Hija de Snow! ¡Incendiaste la casa, Idiota!.
Laura se acercó lentamente a mí y dijo:
-Tengo hambre...
-Sí, yo igual, ¡vallamos por una pizza!.
Y nos fuimos a tragar.
Mientras caminabamos de camino a la pizzería, oímos gritos, eran como de...¿un gato pariendo?.
-¡Ayuda, porfavor! - Chilló aquella persona.
Nos dirijimos a donde provenía los alaridos. Mejor dicho yo iba detrás de Laura sin despegar la vista de mi teléfono.
Encontramos a un chico, sentado en una banca del parque, gritando de dolor, pero Laura lo miró atenta.
-¡Ey!, eres el chico que se cayó! - Dijo con una sonrisa - Pero...¿qué haces aquí?.
-¡Estoy cazando elefantes! ¡¿Qué crees qué estoy haciendo?!.
-Tal vez...¿imitando a un gato pariendo?.
Levanté mi mano y choqué los cinco con Laura, sin despegar, aún, la vista de mi teléfono.
-¡No!, cuando te cruzaste, me caí y creo que me fracture el tobillo.
Apenas escuché esa frase levanté la vista de mi teléfono, y cuando ví al chico, lo fulminé con la mirada.
-¿Sucede algo Emma? - preguntó Laura confundida.
Mientras miraba al chico la única palabra que logré gesticular fue:
-¡¡Tú!! - Dije mientras lo fulminaba con la mirada.
N/AS:
¡Jelou!, esperamos que les haya gustado este capítulo, ¿a quién habrá visto Emma? ¿Qué hará al respecto? ¿Su casa se habrá quemado completamente? ¿El chico en verdad tiene una fractura en el tobillo? ¿Emma y Laura lograran comer su pizza? ¡no lo sé! Tendrán que leer el próximo capítulo.
Voten y comenten, nos harían muy felices :').
Psdt.: Laura en multimedia.
A y R
