Capitulo 3

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Cada lunes decidimos hacer una cena especial de Nueva York, este lunes es tema era mexicano, Olivia iba vestida con un gorro mexicano muy gracioso. Desde que empezó la cena note un poco extraña a Olivia, tenía la piel de gallina y le salía esa risilla tonta como intentando contar alguna sorpresa importante, yo le decía "¿te pasa algo?" pero ella me lo negaba rotundamente. Comíamos unos tacos picantes, Olivia y yo adoramos la comida picante, en mi cabeza rondaban muchas cosas, lo que hacia que me distrajera continuamente hasta tirar un baso de agua al suelo. Olivia me pregunto si me ocurría algo, estaba agotado y un poco cansado nada mas, la verdad es que Kassandra mi profesora de baile me mete mucha caña, no se que le pasa conmigo, me tiene como manía, no para de llamarme Joey como el de "Friends" según ella estoy igual de empanado y le hago recordar a el, ya os he dicho que es un monstruo. Aprovechando mi cansancio, Olivia decidió contarme su secreto, "¿estas preparado?" Me decía una y otra vez, tiene que ser algo importante porque se le ve entusiasmada. Al parecer cuando Olivia estaba persiguiendo a la señora del bolso, llego hasta Vogue.com, estuvo buscando una manera de colarse, necesitaba encontrar ese bolso. Olivia tiene una mente privilegiada para hacer de agente secreto o algo, según ella sedujo al portero de atrás, y la dejo pasar, tuvo que superar distintos obstáculos como rayos láser, ya os he comentado que Olivia tiene mucha imaginación, hasta que al final llego allí, al despacho de aquella señora del bolso "súper monísimo", que locura me contaba Olivia, estaba en el despacho de Sara Elivanders, la directora jefe de Vogue.com, un bolso como ese solo se lo puede permitir ella. Olivia entro en su despacho y le contó que estaba siguiendo a ese bolso tan "monísimo" desde hace rato, me imagino la cara de Sara al entrar una desconocida a su despacho diciéndole que esta buscando su bolso "super monísimo", pero al parecer a Sara le hizo gracia que se hubiese tomado tantas molestias por ello. Olivia me repetía una y otra vez la cantidad de veces que Sara le decía que tenía talento para la moda, no se donde quiere llegar Olivia pero si no me cuenta la noticia no podré dormir tranquilo esta noche. Olivia se animo a decir que que Sara Elivanders, le había ofrecido un puesto de becaria en Vogue.com, se le veía tan contenta, cogí el champán y dije esto hay que celebrarlo. Estoy muy contento por Olivia, ambos vinimos a Nueva York por un sueño y ambos lo estamos cumpliendo.

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