- Nymphadora Tonks.- Dijo Sirius. Remus no podía moverse. De pronto recordó esos ojos grises, esa sonrisa entre tierna y traviesa, recordó haberle robado a esa chica algo que jamás recupero. Pero el no fue el único, pues ella también le había robado algo.- Nymphadora, Remus, Remus, Nymphadora.
- Sirius, ya nos conocemos.- Aseguró Tonks.- Y no me vuelvas a llamar Nymphadora.-
- ¿Tu me recuerdas?- Preguntó Remus con el ceño fruncido. Tonks asintió.
- Claro, tu eras el Sr. Chocolate.- Dijo Tonks.
- Ya bésense- Dijo Sirius riendo.
- ¿Sr. Chocolate?- Preguntó Remus para evadir el comentario de Sirius.
- Si, bueno, tu siempre olías a chocolate, te gustaba el chocolate y me dabas chocolate, me encantabas...- Tonks se dio cuenta de lo que había dicho y trato de arreglarlo- Me encantaba tu chocolate - "Eso suena aun peor, Tonks" Pensó mientras reía.
- Eres una pervertida- Dijo Sirius escandalizado. Remus sonrió a una Tonks completamente roja, desde sus mejillas hasta su cabello.
- No me refería a eso- Dijo a Remus.
- Lo sé- Respondió.
- Que hermosa pareja- Se burlo Sirius.
- ¿Y cómo has estado, Sirius?- Preguntó Tonks.
- Tengo salud, Tonks- Dijo Sirius.
- ¿Tan mal has estado?- Preguntó a Sirius pero viendo a Remus, el cual asintió.
- Algo- Dijo Sirius.
- Y ¿Tonks, cómo has estado? - Preguntó Remus para cambiar de conversación.
- Pues... Bien, soy auror.- Dijo Tonks orgullosa.
- ¿Hablas enserio?- Preguntó Remus atónito.
- Si, se que sorprende que lo sea.- Dijo Tonks.
- No me mal interpretes. No me refería a eso... - Dijo Remus auto-castigándose por haber dicho eso.
- No te preocupes.- Dijo Tonks con una sonrisa. - Tengo que regresar a casa, nos vemos. - Dijo levantándose, beso la mejilla de Sirius e intento hacer lo mismo con Remus pero los nervios le ganaron y justo antes de llegar a Remus resbalo pero no alcanzo a tocar el suelo porque un par de manos la detuvieron.
- Ya te estabas tardando- Rio Remus enderezando la.- Recuerdo cada una de las veces que he evitado que termines en el suelo.
- Gra.. Gracias.- Dijo Tonks con un tono de cabello rojizo. Sirius que noto el cambio sonrío para Tonks, la cual se preguntó porqué después de tanto tiempo aun aquella sonrisa la seguía poniendo nerviosa. - Creo que mejor me voy.
- ¿Crees que te iras tu sola?- Preguntó Sirius. Tonks rió.
- ¿Piensas acompañarme tu?- Preguntó con una ceja alzada.
- Am.. No, Remus acompáñala.- Ordenó Sirius.
- No hay necesidad, puedo ir sola. - Aseguró Tonks sabiendo que podría caerse aun mas si lo seguía viendo.- Aun no anochece.- Dijo segura de si, volteo y vio el reloj de pared que marcaba las 10 en punto. - Diablos!
- Esta bien, Romeo no te acompañara- Dijo Sirius burlón. Tonks que tenía conocimientos limitados en libros muggles no dijo nada, pero Remus si entendió el mensaje y negó.
- Te acompaño.- Dijo Remus teniendo que Tonks comprendiera algo.
- Gracias. Adiós de nuevo Sirius, después me explicas quién es Romeo.- Se despidió Tonks.
- Tu lo deducirás sola- Gritó Sirius cuando Tonks abrió la puerta hacia la calle.
Remus y Tonks caminaron en silencio por un par de minutos, cada uno enfrascado en sus pensamientos.
Tonks:
" ¿Por qué? Pensé que ya había pasado, pensé que sólo había sido un gusto adolescente, ¡algo pasajero!."
Remus:
" ¿Y ahora que digo?"
- Y... ¿Tienes hijos?- Preguntó Tonks sin rodeos. Remus sonrió y negó.
- Para mi buena suerte no.- Aseguró no tan convencido.
- ¿Buena suerte? Tu esposa te matara si se entera- Dijo Tonks riendo nerviosa y rogándole a Merlin que dijera que no tenía esposa. Remus soltó una carcajada.
- No estoy casado- Dijo Remus aun riendo.
- Tienes razón, eres muy joven para estar casado- Dijo Tonks pensativa pero mas que feliz de que dijera eso.- Entonces ¿Tu prometida?
- Es broma, ¿no?- Preguntó Remus riendo.
- No- Aseguró Tonks.
- Bien, entonces... No estoy casado, no tengo hijos, no tengo prometida, no tengo novia y no, no tengo ni siquiera una mascota.- Dijo Remus.
- Mejor para mi- Susurro Tonks para si misma.
- ¿Perdón?- Preguntó Remus porque no escucho lo que había dicho Tonks
-Que, Que bien por ti.- Aseguró Tonks.
- Gracias. ¿Y tu?- Preguntó Remus.
- ¿Yo?
- ¿Tienes novio? ¿Esposo? ¿Amante? ¿Hijos? -
- No, aún no.-
- ¿Por qué?-
- Es obvio, soy el tipo de chica de la que nadie se enamoraría- Aseguró, Remus dejo de caminar y la vio a los ojos.
- No vuelvas a repetir eso, eres una mujer preciosa e inteligente, entre otras muchas cosas mas. Pero por favor no vuelvas a decir algo igual.- Sentenció.
- Perdón- Dijo Tonks roja pero con la mirada fija en los ojos de Remus.
- Gracias- Dijo Remus comenzando a caminar, Tonks se quedo parada unos segundos mientras analizaba lo que acababa de oír "Eres una mujer preciosa e inteligente!, Remus lo cree!"
- ¿Tonks? No se en donde vives... Necesito que sigas caminando a mi lado- Dijo Remus sacándola de sus pensamientos, ella sonrió y comenzó a caminar dejando a Remus atrás.
- ¿Entonces Remo, como has estado?- Preguntó Tonks.
- ¿Remo? ¿Leíste esa historia muggle?- Preguntó Remus entre risas.
- Si, y Remus en latín es Remo, ¿Te disgusta? - Preguntó Tonks.
- Para nada, pero... Prefiero Remus.- Dijo con una sonrisa, no le gustaba que lo llamaran Remo porqué eso le hacia recordar su licántropia.
- Esta bien, déjame decirte que has cambiado mucho- Aseguró Tonks viendo que ahora estaba aún más fornido que antes, Remus entendió a que se refería pues siguió su mirada hasta sus brazos, río un poco.
- Claro que he cambiado, ahora soy mas viejo.- Dijo Remus.
- En edad, pero no lo aparentas porque... ¿Cuantos años tienes?- Preguntó Tonks.
- Eso es un secreto- Sonrió Remus.
- Claro, lo,siento.-
- ¿Cuantos años se le ven a Severus?- Preguntó Remus.
- Más de 40. - Aseguró Tonks sin entender al principio, después es de algunos microsegundos entendió y comenzó a negar- No puede ser, ¿Tienes la edad de Snape?- Preguntó Tonks.
- Así es.- Dijo Remus.
- Entonces si, ya estas muy viejo- Rió Tonks.
- Si- Dijo Remus.
- Dime la verdad ¿ Cuantos años tienen realmente?- Preguntó Tonks.
- Averígualo tu misma.- Apunto Remus. Tonks dejo de caminar sin que Remus se diera cuenta.
- ¡Hey tu! El de lindo trasero, es aquí.- Dijo Tonks riendo. Remus dejo de caminar pero sin voltearse, estaba completamente rojo.-¿Remus?
- Ya voy- Dijo tratando de bajar el color de sus mejillas, segundos después lo logro.
- ¿Estas rojo?- Preguntó ella mientras se reía de Remus.
- No, ¿Es aquí?
- Si-
- Entonces te dejo- Dijo Remus.
- No, quédate.- Dijo Tonks.
- ¿Qui.. Quieres que me quede?- Preguntó Remus nervioso.
- No te decía a ti, le decía al perro- Dijo Tonks riendo, Remus miro hacia tras y no vio ningún perro. - Es obvio que no hay perro, entra.-
- Gracias- Dijo Remus.
Ambos entraron y lo primero que pensó Remus es que Tonks no podía vivir ahí.
- ¿Enserio,vives aquí? - Preguntó Remus anonadado.
- Si..-
- ¿Cómo es que puedes..?- Comenzó Remus.
- ¿Pagar?- Preguntó Tonks riendo. - Trabajo como auror, estoy soltera, no tengo mascotas, tampoco hijos. ¿Eso responde tu pregunta?- Dijo Tonks. Si departamento era pequeño pero lujoso, limpio a pesar de que Tonks fuese la dueña.
- ¿Quieres algo de beber?- Preguntó Tonks- ¿Agua, café.. Chocolate?-
- ¿No tienes té?-
- Si...-
- Bien por ti, quiero chocolate- Dijo Remus riendo.
- ¿En barra o para beber?-
- ¿Tienes en barra?- Preguntó Remus.
- Es obvio, ¿no? Tu comenzaste mi adición al chocolate.
- No sé qué decir a eso- dijo Remus con una sonrisa.
- Am... Ya regreso.- Dijo Tonks.
Pasaron las horas y ambos seguían hablando, riéndose uno del otro y de vez en cuando sonriéndose como bobos. Remus vio que quedaba solo un chocolate y fue a tomarlo en el mismo momento que Tonks, cuando sus manos rozaron ambos levantaron la vista, sus ojos se toparon, en los de Tonks se podía ver la felicidad, pero no se igualaban a los de Remus, que eran mucho más expresivos que cualquiera que Tonks haya visto. El mundo se detuvo, solo estaban ellos y nadie mas.
