Amigos

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Amigos. 

¿Cómo describir la palabra "amigos"? No lo sé, yo no tengo amigos, sólo conocidos que vienen y van.

Sí, ya sé que anteriormente había dicho que tenía pocos "amigos" en diferentes grupos, pero es sólo mi manera de llamar a esos conocidos para que todo sea más entendible cuando hablo con demás personas.

A veces es confuso, en muchas ocasiones siento a estos conocidos como "amigos" pero no me apego a la idea, ya que sé que después no me voy a sentir igual. Sí, sé que no son ellos los del problema, soy yo, pero muchas veces el problema deriva de que ellos no me entienden...

Bueno, eso es lo que yo creo y como lo veo, así que siempre les atribuyo la culpa a ellos.

Yo me siento reina, intocable, alguien al cual se le debe alabar constantemente y mientras me siento así, insultaré a todo el que me plazca, le haré daño a quien no me quiera obedecer y le desearé lo más sucio al alma más limpia. 

Pero

A la más mínima evidencia de fragilidad, me vuelvo el perro desnutrido de la calle, la víctima, la omega de la manada o quizás la presa de los lobos. Ahora la desgraciada seré yo, me insultaré, me golpearé y hasta pensaré en lo peor para mi, como si eso me fuese a dar satisfacción en algún punto, como si eso me fuese a hacer sentir mejor, como si me hiciera más fuerte... Como si castigarme me hiciera más fuerte.

Qué raro ¿No?. Había contado que me había enojado con una "amiga" por no tener su amistad y ahora digo que no tengo amistades y prefiero no tenerlas. 

Contradictorio.

Contradictorio como todo lo que digo, como todo lo que hago, como todo lo que pienso y siento.

Y si alguien se mete con este, mi mayor defecto, voy a pensar en suicidarme. 

Puede sonar mal, sí, y hasta te pueda parecer ridículo, pero es para que te quede claro como se siente ser yo, sea quien sea que me esté leyendo. 

Me encanta estar sola, sola en mi casa, sin hablar con nadie, escuchando música que me gusta, me encanta salir, me gusta bailar, me gusta conversar, me gusta sentirme cercana a mis conocidos, me gusto a mi misma, siento que tengo talento. 

No me gusta estar sola, no me gusta que no me escuchen, no me gusta que me dejen a un lado en las conversaciones grupales, no me gusta que me vean como "la ___ de fulanito/a" en vez de verme como "Flor Méndez, la chama que pinta" o "Flor, la de pelo negro", no me gusta que no me incluyan, no me gusta que me hablen mucho,  no me gusta que averigüen mi vida, no me gusta ser el centro de atención, no me gusto a mi misma.

¿Puedes relacionar estos dos últimos párrafos? ¿Dirías que que tienen algo en común? ¿Y que tal si te digo que todos estos pensamientos pasan por la cabeza de una misma persona a diario?

Sí, una sola persona, una persona intermitente.

Cuando perdí la cercanía de Gabriela me dejé de sentir "reina". El alejamiento de Gabriela expuso mi debilidad y me caí por un acantilado desde que deje de ser cercana para ella. El alejamiento de Gabriela se sumó a mis inseguridades y ahora lo uso como excusa en mi mente para ser desconfiada.

- ¿Quieres amigos? - Me preguntó mi terapeuta la semana de el problema con Gabriela.

- No, yo no quiero depender de personas en las cuales no se puede confiar, prefiero tener conocidos de lejos, me siento sola, pero me imagino que me tendré que acostumbrar, ya no creo en los amigos. - Le dije, muy segura.

- ¿Quieres amigos? - Me volvió a preguntar mi terapeuta la semana siguiente.

- Sí, necesito amigos, alguien con quien hablar, compartir opiniones sobre películas, me siento muy sola, yo sé que no tengo amigos por culpa de la gente, la gente me ve como una intensa y por eso no me quieren tener en su circulo social, me quiero mudar y rehacer mi vida. - Dije.

- ¿Estás segura de que es la gente la que piensa así de ti? - Dijo él.

- Estoy segura de que tengo problemas.

La luna en tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora