Come back, please. (h.s.)

IX

Harry.

- Y bien?...- pregunto mientras saliamos del parque.
Sinceramente no tenia ni la menor idea de donde iríamos.
Habia sido algo rápido, ni siquiera habia tenido la oportunidad de retractarme.
- No lo se... Quieres ir a Larry's?- me encogí de hombros y guarde mis manos en los bolsillos de mis jeans.
- Es en serio? No debes preguntarlo dos veces.- sonrio, y senti un leve cosquilleo nuevamente.
Estupideces.

De todos los lugares con maquinas de juegos, Larry's era el mejor.
Cada mes sorprendían a todos con alguna atracción recién traida desde china, o algún otro lugar.
Y a pesar de sorprender a todos con ello, no olvidaban los viejos clásicos como Pacman y Triangle's War.

No era el lugar adecuado para traer a una cita, pero de todas formas, Sally y yo no estabamos en una.
Quizas mi subconsciente hizo todo a proposito.

- Quiero ir a los autos chocadores!- grito mientras corria hacia el sujeto de los tickets.
No pude evitar sonreir ante ello.
Se veia tan feliz, tan ajena a todo lo que le sucedia.
Sacudi mi cabeza y me enfoque en el trasero de la rubia que acababa de pasar, tenia que quitar esas estupideces de mi cabeza.
Pronto.
Camine hacia ella justo cuando se abrochaba el cinturon de seguridad.
- Oye...- Tome su brazo con extrema delicadeza. - Estas segura de querer hacer esto?.. No es... Peligroso?..- Rodo los ojos y bufo.
- Harry... Salir a la calle también lo es...- me sonrio y sacudió su mano en forma de saludo cuando el juego arranco.
Me apoye sobre el barandal y le sonrei.
Nunca habia tenido una cita como aquella.
Sin manoseos o besos de por medio.
Sin tratar de conseguir algo.
La verdad era que lo unico importante en ese momento era que ella la pasara bien.
Queria compensarla por ser un idiota con ella.
Las luces brillantes iluminaron la pista; un niño choco contra otro y asi durante algunos minutos.
Los gritos y risas se incrementaban.
Sally parecia ser la mayor hasta que me enfoque en aquella cabellera rubia.
Fácilmente tendria mi edad o quizas un año menos.
Sonreia malicioso mientras quitaba de juego al algunos niños.
Sally tambien sonreia, pero a la vez gritaba un "Lo siento" por cada niño que chocaba.
Capté justo el momento en el que el rubio clavo su vista en Sally, que se encontraba al otro lado de la pista, sonriendo como nunca.
Tambien cuando piso su acelerador y avanzo violentamente contra su objetivo.
Una aguda voz grito "Niña, el de atras!" posiblemente la de algun pequeño espectador esperando por su turno.
La chica de ojos azules apenas alcanzo a girar un cuarto su volante cuando se vio sorprendida por el fuerte y violento impacto del rubio sombrio.
Todo fue muy rápido, solo pude verla tambalearse y desvanecerse antes de caer en la cuenta de que habia saltado el barandal y que me hallaba corriendo hacia el pequeño auto.
El silencio de los espectadores era temeroso, como si no supieran que hacer.
Arranque el cinturon de seguridad de su cuerpo y la levante sin mucha dificultad.
- Sall?..- habia un leve e incomprensible temblor en mi voz.
Mi vista se volteo hacia el rubio, que respiraba con dificultad, asustado y confundido.
- L-lo siento... Yo... Yo...- queria golpearlo.
Vaya que queria hacerlo.
Pero el casi nulo peso de Sally sobre mis brazos me recordo que tenia que conseguir ayuda.
- Ya llamamos a una ambulancia hijo!- grito el sujeto de los controles.
Y yo solo me dedique a salir de la pista y recargar el inmóvil cuerpo de la oji-azul sobre el mio.
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Perdón por la demora, pero espero que les guste el capítulo, de verdad les agradeceria si votaran y me dejaran sus opiniones.
Besos.
Xx.