Tutto accade in Italia

Benjamin

- Por favor joven, no se pueden tomar fotos en este lugar.- me regaño un hombre estirado de saco y moño.

- Y ¿Por que razón no puedo señor?- dije sin darle importancia y seguí tomando fotografías a unos cuadros.

- Porque esas son las reglas, tengo que pedirle que se retire del museo. Lo mire de mala manera y me retire para no causar mas problemas.

Primer día en Florencia y ya me regañan, buena manera de comenzar mi nueva vida... Wow... Nuevo fotógrafo del periódico "Oggi", es algo que esperaba desde que tengo mi diploma en mano, cuando me informaron que me aceptaron fue algo genial, no lo podía creer, tome mis cosas y vine para aquí, vine a Florencia, la ciudad de los museos y las artes, un sueño. Que me esperara esta hermosa ciudad.

Tengo todo el día libre, mañana sería mi primer día en el trabajo. Y como ya me hecharon de dos museos seguidos no iba a hacer que sean tres. Decidí pasar por el edificio, no me quedaba lejos así que comencé a caminar con mi cámara en la mano, por si podía fotografiar algo. Cuando llegue mire hacia arriba, luego, atrás de esa gran puerta de vidrio divise a muchas personas llendo y volviendo, aquí no es ninguna broma, es unos de los diarios mas modernos e importantes de la ciudad, y yo soy su fotógrafo; estoy súper emocionado.

Me quede ahí parado viendo todo, cuando sentí que alguien me había empujado logrando moverme un poco, me di vuelta y note a una chica, muy linda podría decir, con papeles a su alrededor, actúe rápido y la ayude a levantarse.

-Perdona no te vi- dijo ella, con una dulce voz.

-No, no, esta bien tranquila, fue mi culpa- me agache a recoger sus hojas y luego me levante para estirar mi mano y tomar la suya. Ella me miro con eso penetrantes ojos cafés y sus ruborizadas mejillas por la vergüenza de su caída. La tomo y se puso de pie, arreglo rápido su falda y su camisa casi escotada.

- Muchas gracias...-

- Benjamín, Benjamín Morelli- volví a extender mi mano.

- Ahh eres el nuevo fotógrafo de Roma- sonrio y me miro de pies a cabeza mientras agitaba su mano con la mía.

- Con que ya han hablado de mi - devolvi la sonrisa.

- Emm si algo así - tenia una mirada tierna - Bueno, tengo que ir a trabajar Señor Morelli...

- Solo Benjamín

- De acuerdo Solo Benjamín- dijo picara- yo soy Ángela Loreti, un gusto.

- En gusto es mio - le dedique mi ultima sonrisa hasta que entro al edificio, me moví del lugar cuando vi que la dama desapareció.

Esa mujer fue la primera persona con la que hablo y no me regaña, era de baja de estatura, con grandes ojos color miel, delgada y cabellos negros a la altura de su torso, una princesa a mi gusto.

Comencé a caminar por los senderos de la misma cuadra de la torre "Oggi", pensando en como seria todo aquí, nuevos amigos, nuevos jefes, a lo mejor alguna novia, aunque no creo que tenga tiempo para eso. Pero la imagen de Ángela giraba por mi mente... Ángela Loreti, mi nueva compañera de trabajo.