Cap.1

15 0 0
                                    

8 mayo del 2015

Creó que el asunto esta enmarañoso, bueno, decidí enviarle una solicitud para ser amigas por una red social.
Acepto, hable con ella, muy afable la chica, muy agradable, sabía que esto hiba a terminar mal .

Y efectivamente, terminó mal, le propuse un juego, le hiba a regalar algo cada día que la viera sonreir, le agradó la idea, pero pensó que yo estaba jugando.
Mis palabras son de armas tomar.
Desgraciadamente no salió tan bien como esperaba, sus amig@s empezaron con la preguntas -¿te gusta?- o -¿por qué le regalas cosas?- y no solo fueron sus amistades ,si no también las mias, ya no supe que decir.
Los dias se me pasaron rápido, querido poli.
Para ser honesta, recuerdo que entre sus amistades de la chica con apellido al cuadrado había una muchachita muy rara, nisiquiera la conocía, la forma en la que termine hablandole fue por un compañero, este nos junto para hacer un colectivo de trabajo, de echo no tenía ni la mas mínima idea de que esa tarde terminaría haciendome su amiga, bueno fue extraño.
La primera platica que tuve con ella fue por Messenger y de echo la recuerdo bien, todavía.
-oye, en persona te vez muy seria- le dije.
-es que no me conoces bien- me contestó.
-bueno, entonces me dedicaré a conocerte- le respondí.
-jajajaja enserio?- con su ironía me dijo.
-Claro- y me fui.
No quiero mentir, la niña esta, se me hizo muy buena persona, mi relación con ella se volvió un poco más compleja, le preguntaba sobre la chica al cuadrado y sus gustos, platicaba mucho con ella más que con la lentes rosados, de echo me caía mejor que la tipa de la tableta.

105 razones para quererlaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora