Su estúpida sonrisa.

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"Recuerdo un día gris, una noche que nunca acababa, un lobo aullando a la luna, enamorado de ella, de su luz, y aunque la luna a veces le acariciaba el rostro, el sabía que jamás podría tenerla entre sus garras".

Siempre fui un chico soñador, uno de esos pocos de los que piensan en el amor y creen en él, recuerdo que mientras unos hablaban de coches, de matriculas, de tetas y demás cosas normales de esa edad, yo leía a Machado, escuchaba a Sabina y suspiraba por encontrar a esa musa, a ese gran amor que haría que todos mis problemas fueran menos, pero como el que cree en dios, mi fe por el amor era fuerte, pero en 20 años, jamás lo había presenciado y poco a poco, fui perdiendo la esperanza de que hubiese alguien, sentada en la parada de aquella estación, esperando a que yo apareciera.

Reconozco que hubo tiempos oscuros, en los que la vida me superaba, en lo que pensaba que no había salida, en los que incluso pensé que me rendiría, de hecho, ella apareció en uno de esos momentos, uno de esos oscuros, de los que la única salida que ves es meterte la pistola en la boca, cerrar los ojos y escuchar a extremoduro mientras la vida se te escapa de la manos...

Llegó, si y llegó para quedarse, no tenía nada, lo había agotado todo, quizás me quedaban un par de sueños rotos, esparcidos por el suelo, un par de recuerdos de alguien que ya no era yo y puede que me quedase un pequeño trozo de corazón, guardado en un lugar, que ni yo mismo sabia donde se encontraba, pero eso a ella no le importó, supo ver más allá de lo que se veía a simple vista, me recogió del suelo, saco un corazón nuevo de su mismo bolsillo y me recompuso los sueños, todo pasó muy rápido como se suele decir, la vi sonreír y ya no hubo vuelta atrás.

Ella no buscaba nada, es más su corazón también estaba roto, tenía miedo del mundo y del desgaste que era amar a otra persona, me contó que no, que no lo había pasado nunca mal, pero yo sabía que no, que eso no era cierto, también me contó que no quería enamorarse, que el amor ya no era para ella algo necesario, parecía tener las ideas transparentes, pero lo que ella no sabía es que yo ya la conocía, porque ella era yo. Vi el miedo reflejado en sus ojos, vi que su corazón estaba lleno de arañazos y de remiendos por todos lados, aparentaba ser la chica más fuerte del mundo, pero por dentro era del más suave terciopelo, yo la llamaba la chica del corazón de hierro para mis adentro, confieso que llegué a pensar que jamás tendría la suerte de que una chica así, se fijara en un Dani como yo, pero pasó y pasó como todas las cosas importantes en este mundo, "sin darnos cuenta".

Desde el momento que la vi, supe que estaba perdido, intente que se fijara en mi, llamaba su atención, pero nada resultaba, poco a poco conseguí hacerme notar, pero no era suficiente, perdía la cabeza, mi interés empezó a ser, necesidad y la necesidad, drogodependencia, a ella y a su estúpida sonrisa.

Poco a poco la chica de la estúpida sonrisa, me fue conquistando, me contó sus sueños, como ese de pasear de la mano de la persona que quería, por la orilla de la playa a media noche, sus ilusiones, sus manías, sus gustos por las cosas y series frikis, como Death Note, su adicción por la novia cadáver y su increíble amor hacía los gatos y a decir verdad jamás imagine que una persona podría enseñarme tanto, en tan poco tiempo, me enseñó el valor de los sueños, el quererse a uno mismo sobre todas las cosas, me enseñó que si luchas por lo que quieres al final siempre lo consigues, por muy duro y oscuro que sea el camino siempre hay una luz al final del túnel, pero lo más importante que me enseñó, es lo que significa la palabra amor.

Y se que leerás esto, así que me gustaría decirte una cosa y es que me encanta esa forma que tienes de ponerte nerviosa cuando te miro fijamente, me encanta cuando hablamos por Skype o por teléfono y no puedes evitar colgarme, porque sientes que vas a chillar de todo lo que sientes, me encanta esa forma tan particular que tienes de decirme te quiero entre suspiros mientras te hago rozar por unos minutos el cielo, adoro esas carcajadas descontroladas que te sale cuando no puedes parar de reír (quizás pienses que no me gusta porque suena a cerdito, pero me vuelve loco), añoro como buscabas mi mano para agarrarla fuerte y me hace perder la cabeza, que tus ojos sean lo primero que vea al despertar y que tu voz sea lo que escuche.

En definitiva, "amiga" si hoy soy lo que soy es por ti, se que este texto no te hace honor, ni mucho menos, pero quería que supieras todo lo que has hecho por mi, sin ni si quiera saberlo, se que no se ni una décima parte de ti, pero espero que me dejes descubrir todo eso que me queda por saber, porque tu me has salvado y quiero que sepas que desde que besé tu espalda, no me imagino viviendo en otro sitio, gracias por aparecer y espero que jamás me faltes, porque eres la suerte de mi vida.


"Un sueño hay en mi corazón, que estás junto a mi, que junto a ti estoy.

Le pido a la Tierra, el Cielo y el Mar, que mande a alguien para amar".


Atentamente, tu jugador uno para su jugadora numero dos, para siempre.


¿Qué es el amor para mi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora