seventy seven.

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seventy seven.

liz explicó rápidamente la situación mientras michael tomaba asiento en el sillón, sintiéndose como la mierda.

todos habían ido a la cocina, dándole un poco de espacio al chico pelirrojo.

sabía lo mucho que luke quería a su familia y también sabía lo mucho que su familia lo quería a él.

veía cuánto se habían esforzado por preparar la velada y por culpa de él todo estaba arruinado. 

notó como su novio se ponía de cuclillas frente a él con lo que supuso que era una bolsa de hielo envuelta en una toalla. el rubio procedió a tomar el mentón de michael con cuidado y puso el hielo sobre la mejilla del chico por unos minutos, luego lo colocó rápidamente sobre el labio lastimado del pelirrojo. 

el oji-verde se estremeció por el frío contacto de la toalla contra su pálida piel y fijó su mirada en la de luke. 

lucía extremadamente preocupado.

"luke," habló tomando la toalla en sus manos y alejándola de su rostro. "ve con tu familia. ellos han estado esperándote por meses y a mi me tuviste todo el tiempo, se esforzaron demasiado preparando todo esto" hizo una pausa, señalando la sala decorada con globos y carteles de 'bienvenido a casa, luke'. "como para que estés aquí. subiré y dejaré de ser un estorbo para que puedas disfrutar con ellos." le dio un fugaz beso y rápidamente se levantó del sillón, subiendo las escaleras de la misma manera.

entró en la habitación de luke y se tiró sobre la cama boca abajo, sintiendo todas las lágrimas que había estado guardando avecinándose a  salir en cualquier momento. 

respiró profundamente y se quebró, dejándolo salir todo sobre la almohada que olía asquerosamente a suavizante y que mantenía el delicioso aroma de su novio. 

el colchón se hundió a su lado y de inmediato supo que era luke quien estaba allí por como comenzó a acariciar su cabello, poniendo su cabeza sobre su espalda mientras que él sollozaba realmente duro. 

"no eres un estorbo y nunca lo serás, mikey. ellos lo entienden, me necesitas y aquí estoy. no voy a irme." buscó una de sus manos y le tomó, dándole un pequeño apretón. "estoy aquí y te amo." lo abrazó, hablando contra su oído. "maldita sea, te amo demasiado, michael. no quiero seguir viéndote llorar." besó cariñosamente la nuca de michael.

y aunque luke no lo quisiera, lo dejó llorar, porque sabía que eso era todo lo que su chico necesitaba en  ese momento.

-

me voy.

love y'all


hotel room. mgc+lrhDonde viven las historias. Descúbrelo ahora