Parte 5: Peor día de la semana: lunes!!

10 1 1
                                    

Despertarme a las siete y media de la mañana, ducharme con agua caliente y estar un ratito embobada en la bañera, ponerme el espantoso uniforme del colegio a regañadientes, mirarme al espejo y suspirar mientras me miro el grano rojo de mi nariz que ha conseguido dos nuevos vecinos demasiado pronto, arreglarme el pelo encrespado como puedo, mirar el móvil y bajar perezosamente a desayunar, saludar a toda mi familia, coger la mochila y esperar a que el autobús venga a por mí. Después, cinco horas con el culo pegado en un silla intentando enterarme de lo que dice la profesora al mismo tiempo que le tiro bolitas de papel a Meggie que está super ultra atenta sin olvidarse de apuntar todo lo que dice esa mujer con enormes gafas de concha.  Luego volver a casa, comer, estudiar, hablar un poco por el teléfono con las amigas, cenar y a meterme en la cama a eso de las diez....luego, despertarme a las siete y media.... y vuelta a empezar!!

Si señores, esa era mi rutina diaria, durante toooooodos los días del año, no hacia otra cosa que ir al instituto... a excepción  de los viernes por la tarde y fines semana que era cuando quedaba con mi pandilla para ir al cine, centro comercial,excursiones.... haciendo cualquier cosa nos lo pasábamos bomba, siempre y cuando no estábamos hasta el cuello de exámenes. Pero supongo que no soy la única  en el planeta tierra que le pasa esto mismo.

Empezar la semana siempre era horrible, tarea por todos lados, clases que acaban a las cinco de la tarde, la mochila que pesaba una tonelada y parecía que ibas a subir el monte Everest con ella, prepararse para una tormenta de exámenes sorpresa que asomaban por el pasillo del colegio......pero sobretodo, lo más horrible, HORRIBLE de todo era despertarte un lunes por la mañana y desear que ya fuera viernes... no, aun peor! Es despertarse un lunes pensando que es viernes. Jajajaja eso si que es bueno!! ¿ A quien nunca le ha pasado eso?

Os diré a quien no le pasó: a mí....o por lo menos hasta esa mañana. Estaba toda ilusionada pensando que ya era viernes y  que por fin podría tumbarme en el sofá y engancharme a mi serie favorita: Castle. Madre mía como adoraba esa serie!!! Me encantaba ver los maratones de la serie con mis amigas, lo más divertido era ver el final porque justo cuando van a decir el asesino... bum! voy yo me adelantó y lo cuento todo antes de que Becket ( protagonista que hace el papel de inspectora en la serie) acuse al verdadero asesino, entonces mis amigas se pican por contarles el final e intentan estrangularme mientras yo salgo huyendo por toda la casa partiéndome de risa.

Pero desgraciadamente era lunes así que no pude ver la serie y en consecuencia salí de casa con un humor de perros terrible, en dirección a la parada de autobús. Seguramente los amantes de la serie de Castle, como yo, comprenderéis porque estaba que expulsaba humo por las orejas  y los que no, solo puedo deciros que es una serie de lo más divertida y  entretenida, os recomiendo que la veáis porque os enganchará enseguida como me pasó a mí.


Ni loca, guapoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora