Ésa tarde, bajo el sol ardiente, el cielo despejado y el calor sofocante que provocaba a mi garganta estar demasiado seca, me había encontrado con Jean en la plaza, cerca de la fuente donde tiempo antes habíamos resbalado después de una pelea. Me parecía extraño que de repente se le hubiera ocurrido el llamarme para encontrarnos ahí, después de todo no hacía más de una semana que vivíamos juntos en la misma casa, la cual rentábamos porque estaba cerca de la universidad a la que planeábamos ir. Cada uno pagaba la mitad del alquiler. La casa no era grande, apenas tenía un solo piso y ya nos habíamos peleado más de una vez por usar el baño primero, pero no importaba. Sinceramente estaba bastante contento con nuestra situación, tarde o temprano terminaríamos acostumbrándonos. Además, era como si hubiéramos decidido vivir juntos después de años de relación y me sentía un poco emocionado al respecto, sin importar que no fuera realmente el caso. Tenía la esperanza de que llegara la oportunidad perfecta para que en algún momento formalizáramos nuestra relación, en un futuro no muy lejano. Así que por alguna razón pensé que esta era esa oportunidad.
Los niños jugaban no muy lejos de nosotros, haciendo su habitual alboroto, el agua caía de la fuente con su típico ruido acuoso. Noté un automóvil gris estacionarse cerca, tal vez esperaban a alguien, pues nadie bajó de él. Varios pájaros dejaban su canto resonar al fondo, en algún árbol o incluso andando en el aire de un lugar a otro. Había un par en algunos cables entre los postes de más allá que volaron todos juntos en cuanto alguno desplegó las alas. Jean me miró fijamente y yo me limité a intentar tragar saliva. Realmente tenía sed, después de todo había caminado bajo el sol desde la mañana, sin probar una sola gota de agua. Sin embargo, estaba tan nervioso por lo que fuera a decirme Jean que me importaba un demonio el agua.
—¿Qué piensas hacer a partir de ahora?— preguntó de pronto.
Estuve a punto de reírme pensando que era una broma, ya me había preguntado lo mismo antes, así que debería saber la respuesta. Una respuesta que ni siquiera me gustaba a mí mismo. Su expresión fue lo suficientemente seria como para detener mi risa a medio camino.
—Ir a la universidad, estudiar la carrera que mi padre quiere que estudie. Ya te lo había contado— contesté mirándolo un tanto confundido por su actitud.
Hubo una pequeña pausa antes de que él hablara.
—Eren, yo pienso irme del país. ¿Quisieras acompañarme?
Esta vez no pude evitar reírme. No creía que fuera capaz de dejar la universidad para irse de vago a otro país, así que lo tomé como una broma esta vez. Jean era demasiado cuidadoso para hacer algo así. Eso a menos que tuviera una buena oportunidad en aquel lugar. Además, ¿no era su sueño vivir tranquilamente en la capital? Aunque ahora que lo pensaba no había mencionado eso en muchísimo tiempo, y a mí nunca se me había ocurrido preguntarle sobre ello. Quizás había cambiado de opinión y había decidido que vivir en otro país era mejor. Fuera como fuere no tenía sentido lo que decía, así que lo único que pude hacer, por acto reflejo, fue burlarme.
—Jean, estás loco. No viviré contigo en un departamento rentado en otro país sólo para pagarte la mitad del alquiler— dije con sarcasmo.
El negó con la cabeza, aún con la misma seriedad de antes, dejándome aún más confundido que antes. Estaba diciéndome todo en serio. No podía creer que en realidad me haya preguntado aquello en serio. Quizás era sólo mi imaginación, pero eso era como pedirme que huyera con él de casa hacia un lugar desconocido. Como si me pidiera ir en una aventura juntos. Jean no era así, era demasiado cuidadoso para hacer una tontería así. Mi corazón latió tan fuerte en ese momento que sentí que en algún momento explotaría, que se detendría o que simplemente me desmayaría. No sabía qué contestar a ello. Entonces comenzó a hablar, escuché atentamente, buscando con esperanza un indicio de que lo que pensaba era cierto.
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Él y yo | [JeanEren]
FanfictionEren tiene algunas lagunas en su memoria que no lo dejan recordar algo importante, así que hace caso a las palabras de Mikasa y busca ayuda profesional, con la cual será capaz de descubrir el suceso que estuvo tan escondido entre tantos recuerdos ju...