#2 SAM

Miércoles, 26 de Agosto de 2015

11:03 pm.

El olor a marihuana, moho y alcohol se impregnaba a mi ropa de manera rápida. Estoy a una hora del departamento, son las once de la noche y estoy rodeada de tipos con dinero en la mano gritando lo que apostarían.

 ¿Cómo llegue aquí?

Ayer, martes, estaba con Rita y Jamie riendo y hablando sobre nosotros, cuando Jamie nos hizo la invitación de ir a ver una pelea de kick boxing en un lugar tranquilo a pocos minutos de la universidad.

Claro, lugar tranquilo y a poco minutos. Exactamente lo que dijo.

Rita y yo aceptamos. Invite a Dan, pero tenía una cita y tal vez terminaría teniendo sexo con su cita...y yo no quería estar en el departamento escuchando como tenia sexo con alguien. Así que, vean me aquí, abrazada a Rita y con Jamie jalando de mi mano libre. Todas las cosas de valor las dejé en casa de los padres de Rita y solo llevo conmigo treinta dólares. 

Los hombres siguen gritando y los gritos se vuelven más fuertes cuando se apagan las luces. Clavo las uñas en la mano de Jamie y Rita se pega a mi cuerpo, no es para nada lindo estar sin luz. A los tres segundos se encienden, pero esta vez veo perfectamente lo que tengo enfrente gracias a Jamie. Una jaula en forma de octágono, dentro hay dos chicos y Jamie jala de nuevo de mi mano. Nos quedamos parados en uno de los escalones, donde la jaula queda solo a tres metros lejos de nosotros y está un poco elevada en una plataforma.

-¿Quienes son? -grita Rita cerca de mi oído para que la escuche-. ¡¿Ese no es el chico del que nos hablaste?!

Apunta con su barbilla y sigo la dirección. Y en afecto, es él. Él chico del gimnasio es uno de los que esta dentro de la jaula y está vez lleva unos shorts rojos... pero cuando veo bien su cara, mi quijada cae casi al suelo y mis ojos están a punto de salirse. Es él mismo que vi en el super mercado, aquel que se burló de mi estatura y estaba borracho. El chico del gimnasio y del super son el mismo. 

Santa mierda....

-¡A pelear! -grita una voz por un megáfono y los gritos comienzan otra vez.

-¿Quien crees que gane, preciosa?-grita Jamie en mi oído y señala la jaula-. Le voy al de rojo.

Cuando miro la pelea... él chico del gimnasio le da una fuerte patada en el costado y el otro cae haciendo una mueca de dolor. Él aprovecha de que el otro esta en el piso y se pone a horcajadas sobré este y comienza a golpear su cara.

-¡También le voy a ese! -grito lo más alto que puedo y Jamie sonríe.

11:08

Me estremezco al ver que de la boca y nariz del muchacho que estaba antes en el piso sale mucha sangre, pero apenas esquiva los golpes del él... Pero con cada segundo que pasa me doy cuenta de que Él no pelea de verdad. Solo es como si estuviera jugando. El gato y el ratón. El chico logra darle un golpe en el mentón y creo que fue su peor error. Él lo toma por la nuca y le da un fuerte rodillazo en la cara. El pobre chico cae inconsistente y le lanzan un pañuelo rojo sobre su cuerpo. Los gritos explotan apenas el pañuelo toca al chico y siento el brazo de Jamie rodear mis hombros pegándome a él y aprieto el brazo de Rita. Todos se comienzan a amontonar y tratamos de pasar sobre la horda de cuerpos. Fue la tercera pelea, el caos ya explotó y solo duro tres minutos.

Avanzamos poco a poco y por alguna extraña razón volteo hacía atrás y me encuentro con los ojos de él. Los gritos dejan de escucharse, el agarre de mis amigos desaparece y siento que todo va de manera lenta. Ya no esta dentro de la jaula, sino fuera de ella,  sobre la parte superior de una grada y está revolviendo su cabello pero sin quitar sus ojos de los míos. Recuerdo que cuando lo vi de cerca sus ojos eran cafés oscuros y su cabello igual. Ahora sé que a ganado una pelea, esta tatuado y da buenos golpes. Fascinante...