Capítulo 2

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Me puse pálida mirando en un estado de shock a Ali, mientras ella me miraba con los ojos abiertos de par en par. Sin que quisiera me di la media vuelta lentamente esperando que no sea la persona que creo, le pedí a Dios que no lo fuera.

Error, si es.

-Hola Ethan- dije intentando hablar lo más normal posible -Hola- respondió este sonriendo -¿Qué haces aquí?- me preguntó -Yo... viene por una malteada con mi amiga Ali- dije un poco nerviosa mientras apunté a Ali con el pulgar, esta sólo sonrió en modo de saludo, Ethan hizo lo mismo.

-Bueno... ¿Y tú que haces aquí?- pregunté con una sonrisa nerviosa -Sólo paseaba mirando la librería de abajo- sonrió y pasó una mano por lo cabellera negra -¿Tú lees?- le pregunté con un ligero tono de impresión -Si, la verdad es que me encanta- Madre santa -Vaya...- ahora si estoy impresionada -Bueno... yo sólo te vi y quería saludar -hizo una pausa- Hola- dijo sonriendo -Hola- respondí con menos nerviosismo -Yo... iré a... buscar lugar- y Ali se fue ignorando el hecho de que no le poníamos atención -¿Cómo has estado?- preguntó Ethan tratando de seguir la conversación -Bien, ¿Y tú?- el nerviosismo se fue y llegó la confianza -Mejor ahora que estoy contigo- falsa alarma, el nerviosismo sigue aquí y está acompañado de un rubor que se apoderó de mi cara.

-Gra-Gracias- dije nerviosa y éste sonrió en forma de victoria ¿Quería que me sintiera nerviosa? Ethan abrió la boca para decir algo pero la cerró al instante, un ruido provenía de mi bolsa. Apresurada-mente saqué mi celular de la bolsa no sin antes darle a Ethan una mueca en forma de disculpa.

Miré el mensaje de Ali que decía:

"Como tu mejor amiga debo salvarte de esta situación, dile que ocurrió una emergencia y te tienes que ir"

"Gracias" tecleé aliviada y envié el mensaje.

Haciendo caso a Ali me despedí de Ethan diciéndole la excusa, él sólo asintió comprensiva-mente, se despidió y se fue.

-En serio, gracias- fue lo primero que le dije a la castaña que estaba bebiendo de una malteada -Fue un placer-dijo ella dejando la malteada a un lado -Tenía que hacer algo, supe que estabas en problemas desde que dijo "Mejor ahora que estoy contigo"- Dijo esto último tratando de imitar la voz de Ethan.

-¿Lo escuchaste?- pregunté mirándola a los ojos -Claro- Respondió - Tengo que estar al tanto de tu vida amorosa ¿No crees?- ahora me miraba divertida -Ya te habías tardado en entrometerte en mi vida- Dije rodando los ojos divertida por nuestra conversación.

Terminamos de beber la malteada entre risas y bromas, después decidimos ir a ver las tiendas de ropa las cuales tienen vestidos preciosos. Después de aproximadamente media hora en cada tienda, regresamos al auto con dos bolsas de ropa en cada brazo de cada una de nosotras dos.

Al llegar al auto dejamos las bolsas en los asientos de atrás -¿Nos vamos a tu casa o a la mía?- preguntó Ali sentándose en el lugar del copiloto -Como gustes, si quieres vamos a mi casa y después te dejo en la tuya- me senté en el asiento del piloto, encendí el auto y me puse a conducir.

-Sí, está bien, de paso me robo unos zapatos tuyos que combinen con mis vestidos- hizo una pausa -Rayos, no debí decir eso- se empezó a reír y yo le seguí la corriente -Si, y cuando llegue a tu casa me robaré esos pendientes tan bonitos y muy caros que te dieron tus padres- ahora yo me reía.

-Oye pelirroja- dijo Ali tratando de cambiar el tema de conversación - ¿Qué pasó castaña?- le respondí yo aún con los ojos en el camino, Ali se tardó un poco en responder -¿Puedo decirte algo sin que te sientas... no sé... rara?- miraba por la ventana y luego comenzó a jugar con su pulsera -Claro- dije extrañada, Ali me miró y dijo -Creo que le gustas a Ethan.

-¡¿Qué?!- pregunté frenando de repente y mirándola atónita, la castaña se asustó un poco y me miró -Lo siento- dije volviendo a conducir normalmente, gracias a dios ningún auto venía detrás de nosotras.

-¿Estás segura de lo que dices?- pregunté a Ali, que ahora esta más tranquila -Segura- dijo esta mirándome -¿Es que no lo notas?- ella sonreía amplia-mente -¿Notar qué?- dije mirándola en vez del camino por un segundo. Ella suspiró como en un intento fallido de enseñar matemáticas de secundaria a un niño de primaria -Por favor Sofía, sus señales son muy obvias- Ali me daba una mirada de regaño.

-¡Oh vamos!- dije yo -¡NO es obvio!
-No es obvio para ti, pero para los demás lo es.
-Bueno, ¿quieres explicarme sus señales?- Di un suspiro frustrado.
-Con gusto.

-Para empezar- comenzó Ali -¿Recuerdas lo que te dijo cuando se conocieron en la playa?
-Si- Un "Déjame decirte que tienes un alma hermosa" sonó en lo profundo de mi mente.
-Primera señal- Ali comenzó a enumerar -Te vio en el centro comercial y te quiso saludar aún estando a un piso de distancia ¿Qué hombre desinteresado hace eso?
-¿Un hombre amable?- dije dudosa.
-Claro que no- hizo una pausa -Sería un vil engaño.
-Cierto- concordé.
-El "Mejor ahora que estoy contigo" es la tercera señal- Ali seguía enumerando -Y última señal; Se conocieron... ¿Cuándo?
-Ayer.
-¡Ayer, señores, ayer!- Dijo Ali haciéndose la dramática.
-¿Y esto que tiene que ver con la cuarta señal?
-Que se conocen mucho menos de una semana y ya te dio tres señales- Ali me miró esperando que lo comprendiera -¿Y qué?

-"¿Y qué?" "¿Y qué?" - Ali me imitó - ¡Te diré que! - me miraba fijamente -¡Está enamorado de ti! ¡Para él fue amor de primera vista! ... o simplemente está desesperado.
-Opto por la primera opción- dije levantado mi mano derecha y luego poniéndola en el volante.
-Si, alguien guapo como él no puede estar desesperado- La miré mal, ella comenzó a sonreír.

-¡Y a ti te gusta!
-¿Pero qué dices?- me sentía... ¿ofendida? ¿avergonzada? ¿cómo una pequeña a la cual descubren su secreto?
-Me miraste mal cuando dije que era guapo, y eso amiga, se le llaman celos- Ali estaba divertida.
-¿Celos? Yo no estoy celosa, ni siquiera me gusta- Lo negué... como una niña que no sabe mentir, maldije mentalmente.
-Hey, tranquila -siguió Ali en el juego- Es todo tuyo.
-¿Y para qué lo quiero yo?- dije divertida
-Tu sabes, hacer cosas...- solté una carcajada sin pena y Ali también.
-¿Cómo leer?- intenté hacer la que no entendía el tema.
-Si Sofía, como leer- dijo Ali acariciándome la cabeza como si fuera una niña mientras reía por mi comentario.

Por fin llegamos a mi casa, nos bajamos del auto bajamos las cosas y nos dirigimos a la puerta. La abro y Ali se adelanta a mi habitación, en cambio, yo dejo las bolsas en el piso y cierro la puerta y le un mensaje a mi madre avisándole que ya llegué a la casa. Nuevamente tomo mis cosas y subo a mi habitación donde supongo que Ali me espera para seguir conversando.


-o-o-o-o-o-o-o-o-

¡Hola! ¡nuevo capítulo!
Vale, les debo una disculpa por la tardanza. Es que tuve un problema con Word así que tenía que escribir a mano y a mi se me facilita más en la computadora, por eso me tardé en subir capítulo.
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Hasta la próxima.




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