Entre-lazados: Cristian y Ana

CAPITULO 16: VIRGINIDAD PERDIDA

29 de Enero

POV CRISTIAN

Mama a estado muy poco en la casa. Con estos fríos y las nevadas muchos niños están enfermos. Y en la casa no es la excepción. Tanto mía como Ana están con un resfriado horrible, todo por culpa del estúpido colegio, donde las obligaron a ir con falda todo el año. Por mucho que se colocaran pantis gruesa, igual no mas se resfriaron. Lo bueno es que tiene 3 guateros personales. Max, romeo y Julieta no se han separado de ella. E incluso me siento excluido.

Papa solo va a la oficina si es necesario y lo mismo al tribunal. El está muy pendiente de la enanas por si algo llegara a pasar. Estoy en la cocina preparando un jugo de naranja natural y calentando un poco de sopa de pollo para llevarles. Coloco 2 pocillos con sopa y dos vasos con jugo en una bandeja y subo. Llego primero a la habitación de mía. Ella está viendo unos programas de chiste... ¿Cómo les puede gustar eso?

-hola pequeña, ¿como estas?- digo mientras coloco la bandeja en el velador que hay a un lado de la cama.

-mejor, aunque aun me duele la garganta- dice con voz ronca

-me alegro. Te traje algo de líquido para ayudar a que se te quite el resfriado-

-eres el mejor hermano que pude tener- dice sonriendo

-bueno Elliot, está estudiando así que creo que soy el único que te queda cerca-

-si, pero el muy tonto no me ha llamado- dice algo enojada

-mía tu sabes que tiene clases-

-si pero no todo el dia y menos en la noche-

-bueno cambiemos de tema. ¿necesitas algo más?-

-no. Con esto estoy bien. Mejor ve a ver a Ana, la sentí toser hace un rato-

-está bien. Te dejo para sigas viendo tus programas-

-no comiences cristian, que saldrás perdiendo- dice mientras me saca la lengua.

Tomo la bandeja con las dos cosas para Ana, salgo y me dirijo a la habitación de Ana, que por cierto es la mía. Con este resfriado no se en qué momento se cambio de habitación indefinidamente, lo cual agradezco. Así la vigilo en la noche, por cualquier cosa.

Cuando entro, ella está dormida. En sus pies esta Max y romeo, ella esta abrazando a Julieta. Dejo la bandeja en el escritorio y me acerco a ella. Le doy unos besos en la mejilla y poco a poco comienza a abrir sus hermosos ojos.

-hola- le digo

-hola- suelta a Julieta. Ahora me abraza a mí.

-¿Cómo te encuentras?-

-mejor pero aun tengo una pequeña molestia en la garganta- dice con voz ronca

- en la bandeja hay jugo y sopa-

-cristian, no quiero comer. No tengo hambre-

-Ana, no comiences con eso. Por último tomate la sopa, no has comido nada y son casi las 4 de la tarde- digo algo irritado

-está bien... no tengo animo de pelear- dice. Busco el pocillo con sopa y se lo paso

-todo- ella me pone lo ojos en blanco pero come.

Cuando termino, deje el pocillo en la bandeja y deje traje el vaso de jugo y lo deje en el velador. Ana se acomodo, abrazándome, colocando su mano encima de pecho justo en mi corazón, yo coloco mi mano sobre la de ella, nos miramos no se por cuanto gris contra azul, me encanta mirarla, están bella, una adolecente única y lo mas importante es que amo.