-Ya está.
-Te ha dicho algo?
-No! Si en realidad estaba hablando solo!-Dice sarcástico.
-Ja.
-Se lo ha tragado, de hecho me ha dicho que si mañana me sigo encontrando mal puedo no ir perfectamente.
-Tu jefe es un poco iluso.
-Si le dijese que me ha mordido un pulpo gigante y me han salido ocho brazos, seguro que me mandaria pulseritas de la amistad para animarme. De hecho, una vez me quería ir a un festival de verano, y sabes que le dije a mi jefe para explicarle porqué no había ido?
-No, qué?
-Que la serpiente de mi vecino se había escapado y había mordido a mi perro (el cuál no tengo) y que gracias a un veterinario que había salido en un programa de supervivencia me ayudó. Y se lo creyó? Igual que se cree un cristiano la biblia.
Me río y cuándo lo hago me sale café por la nariz.
Ahora el que se ríe cómo una morsa es él.
-Cállate imbécil!
-No. Yo no obedezco a fuentes de cafeína.
*levanta la palma de una mano como diciendo: Stop fuentes de cafeína**Y yo le hago un corte de mangas como diciendo: vete a la mierda*
-Primero tenemos que planear lo que vamos a hacer.
-No, antes tenemos que conseguir toda la información necesaria.
-Información?
-Claro, cosas como, dónde trabajan, sus horarios, direcciones, etc.
-Creo que te puedo dar bastante de esa información.
-De acuerdo pero necesitamos una libreta para nuestro plan de venganza alias Gillian.
-De acuerdo, ven.
Vamos hasta mi "despacho" que es ese lugar que es la prueba física de que los tornados de interior existen.
Papeles y lápices por todas partes, ropa, zapatos, ups... unas bragas y miles de cosas más.
-Wow.
-Ya.
-No "ya" no, W-O-W.
-Ya.
Me mira con condescendiencia
-A ver, pequeño explorador asombrado, mejor que te quedes aquí y yo vaya a buscar una libreta vacía. Por si acaso sale algún puma o algo.
-*empieza a cantar la música de Indiana Jones*
TANTARANTAANTANTARAAAN-Me voy a aventurar a entrar.
-*pone voz de chica* Vuelve pronto! *hace como si agitara un pañuelo a modo de saludo* Nuestro amor es inquebrantable! *hace como si se secase una lágrima*
-Maricón.
-Yo también te amo cariño!
Me pongo a rebuscar entre todo ese papeleo inútil y encuentro una libreta que tiene una flor rosa sonriente estampada en la tapa.
La levanto en alto y la señalo.
-No tiene cara de Gillian.-concluye Aaron.
-No hay nada más, no te quejes genio.
-Vale mami! *dice con voz de niño pequeño*
-Hijo! Castigado!
-MAMÁ FUÉ EL PERRO!
-CASTIGADO HE DICHO!
*hace un puchero*
-Eres el peor hijo del mundo.
*sale corriendo por toda la casa corriendo como Heidi* y gritando:
-Mi mamá no me quiere!
Me rio y voy al comedor.
-Vamos a ver, dejáme a Gillian-sin-pinta-de-Gillian.
Le doy la libreta.
-Primero escribiremos el apartado de Jayce.
-Vale.
-Edad?
-23 años.
-Profesión?
-El paro.
-Dirección?
-Walker Street número 16 1er piso.
-No puede ser.
-El qué?
-No puede ser, es imposible.
-El qué?-digo con impaciencia.
-QUE NO PUEDE SER TE DIGO!
-QUÉ NARICES ES LO QUE NO PUEDE SER JODER?
-No puede ser.
ESTÁS LEYENDO
¿Quieres pizza?
Teen FictionAdalyn se acaba de enterar que su novio, con el que llevaba cuatro años de relación, la engañaba con su hermana Sophie desde hacía dos años. Ella esta desalmada, rompe con su novio y se jura y se perjura que no le volverá a dirigir la palabra a su...